Puigdemont carga contra el 'Tezanos de Illa' y pone en duda la caída de Junts en los sondeos
La encuesta del Centro de Estudios de Opinión de la Generalitat ofrece malos augurios a Junts, que perdería cerca de seis diputados, y eso ha desatado los ataques de la formación
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Carles Puigdemont carga contra el Centre d’Estudis d’Opinió (CEO), el equivalente al CIS pero dependiente de la Generalitat, por no dar credibilidad a la caída que refleja para Junts la última encuesta sobre intención de voto en Cataluña. Desde su cuenta en X, Puigdemont compara el CEO con el CIS en una voluntad nada disimulada de asimilar el rol del director del CEO, Joan Rodríguez Teruel, al de José Félix Tezanos en el CIS. Aunque no hay base técnica para algo así, es verdad que Rodríguez Teruel se podría considerar “tezanista” y que ha sido un gran defensor del trabajo del CIS. Pero lo que le ha dolido a Puigdemont y Junts, es sobre todo, que les quite entre seis y ocho diputados de los 35 con los que cuenta ahora en la cámara catalana.
Puigdemont valora que “los sondeos se han convertido desde hace tiempo en una herramienta para la propaganda política. Últimamente, ni el CIS ni el CEO han podido escapar de la tentación y publican resultados que parecen perseguir más un efecto político que contribuir a aportar datos para el análisis del momento político”. Rodríguez Teruel apenas lleva siete meses en el cargo, por tanto es un poco pronto para este tipo de comparaciones y menos con Tezanos. Pero la encuesta escuece porque los diputados que pierde Junts van directos a Aliança Catalana, que pasa de 2 a 8 en la franja baja de la horquilla.
Y no ha sido solo Puigdemont. El partido entero. En TVE, el diputado de Junts Salvador Vergés aseguró: “No estamos preocupados. El CEO tiene una credibilidad cero. En los últimos comicios no han acertado nunca". Pero es muy pronto para afirmaciones de este tenor. Además, el CEO no dispara los resultados del PSC. Salvador Illa no despega en términos demoscópicos, pese a que está teniendo una presidencia de la Generalitat plácida. El CEO que tanto ha irritado a Puigdemont le da solo 43 escaños al PSC en lo más alto de la horquilla, mientras que ahora cuenta 42 diputados en el Parlament.
El líder de Junts hace una crítica mucho más desaforada. Acusa al CEO de “tirar el dinero público, como hace el CIS español”. Sin embargo, los errores que atribuye el expresident huido se refieren a la época en que ERC dirigía el CEO en época de Pere Aragonès.
Atacar al CEO de la Generalitat le sirve a Junts para eludir cualquier autocrítica
Carles Puigdemont incluso va más lejos. Se refiere de manera despectiva a “los amigos del CEO (tú ya me entiendes)” insinuando que hay partidos a los que el CEO trata de manera preferente, y critica que siempre se acerquen al resultado final por la franja baja de la horquilla.
Cero autocrítica
No solo es que el CEO de Illa lleva poco tiempo, es que Puigdemont hace cero autocrítica. Los últimos seis meses se han visto marcados por el apoyo de Junts a Pedro Sánchez, algo que buena parte de sus bases independentistas no entienden, en especial porque el propio discurso de Junts es mucho más radical que el día a día de su práctica política.
Así, Puigdemont evita evaluar qué parte del desgaste electoral que refleja el CEO es culpa de las disonancias entre el discurso del partido y lo que luego acaba haciendo la formación, más pendiente de la implementación de la amnistía a Puigdemont que de otro tipo de cuestiones.
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Pureza contra pragmatismo
En la práctica, se está dando una lucha entre la pureza, que siempre ha reclamado tanto Puigdemont, y el pragmatismo al que se ha visto abocado el independentismo en los últimos años. La consulta del 1-O en 2017 supuso la esencia de la pureza, cuya representación reclamó Puigdemont desde que huyó a Bélgica. Los puros de ERC se van a la abstención cuando el partido lleva años virando hacia posiciones más prácticas en busca de sobrevivir al día a día.
Pero los puros de Junts se sienten tentados por el discurso de Aliança Catalana. Silvia Orriols no hace concesiones al Gobierno español. Sus posicionamientos utilizando la tribuna del Parlament, su trabajo en redes sociales, todo eso va minando poco a poco las posiciones de Junts, por mucho que el partido esté intentando poner el foco en la inmigración para compensar. Al hacerlo, Puigdemont y los suyos están comprando el discurso de la ultraderecha catalana y esta sigue creciendo a su costa. Pero, claro, es más fácil echarle la culpa la CEO que asumir que simplemente han quedado en una mala posición estratégica.
Carles Puigdemont carga contra el Centre d’Estudis d’Opinió (CEO), el equivalente al CIS pero dependiente de la Generalitat, por no dar credibilidad a la caída que refleja para Junts la última encuesta sobre intención de voto en Cataluña. Desde su cuenta en X, Puigdemont compara el CEO con el CIS en una voluntad nada disimulada de asimilar el rol del director del CEO, Joan Rodríguez Teruel, al de José Félix Tezanos en el CIS. Aunque no hay base técnica para algo así, es verdad que Rodríguez Teruel se podría considerar “tezanista” y que ha sido un gran defensor del trabajo del CIS. Pero lo que le ha dolido a Puigdemont y Junts, es sobre todo, que les quite entre seis y ocho diputados de los 35 con los que cuenta ahora en la cámara catalana.