La pinza que preparan Illa y Collboni al soberanismo con el centenario de Gaudí

Barcelona se convertirá en 2026 en la Capital Mundial de la Arquitectura. Y además celebrará el centenario de la muerte de Antoni Gaudí, un arquitecto que es todo un símbolo del catalanismo. El regreso de la capital catalana a los grandes eventos que tanto criticaron los comunes de la exalcaldesa Ada Colau. Pero además hay una dimensión política de la que el PSC intentará sacar ventaja desde cada lado de Plaça Sant Jaume: Salvador Illa y Jaume Collboni lo pueden aprovechar en términos electorales para hacerles una pinza sobre ERC y Junts. Más Collboni, porque las municipales son al año siguiente.

Gaudí es mucho más que un imán para los turistas. El arquitecto de la Sagrada Familia y máximo representante del modernismo representa todo un icono. Cortar cintas alrededor de Gaudí es comerles espacio sociológico a Junts y a ERC y también colonizar el imaginario político de los dos partidos que compiten de manera directa con el PSC.

El presidente de la organización encargada de terminar la obra maestra de Antoni Gaudí (1852-1926), Esteve Camps, ha anunciado que, en ese mismo 2026, coincidiendo con el centenario de la muerte del arquitecto, terminarán las obras de la torre central de 172,5 metros, que convertirá a la Sagrada Familia en el edificio más alto de Barcelona. Eso implicará finalizar la construcción vertical de la basílica. Un evento perfecto para Illa, siempre tan cercano al catolicismo.

En esta pinza del PSC, Jaume Collboni y Salvador Illa combinan sus superpoderes políticos. Collboni con su apuesta para que Barcelona siga siendo una capital europea de primera línea, con grandes acontecimientos que atraigan visibilidad internacional y visitantes. Por su parte, Illa es el especialista en apoderarse de activos simbólicos del independentismo. Lo hizo cuando recibió a Jordi Pujol en el Palau. O cuando fue a la Abadía de Montserrat con motivo de su milenario.

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Antonio Fernández

Fuentes del PSC descartan de que se trate de un plan para desarbolar a los partidos de la oposición. Recuerdan que eventos como que Barcelona sea Capital Mundial de la Arquitectura se empezaron a planear con años de antelación, en la época en que aún era alcalde Jordi Hereu, en 2010. Otra cosa, reconocen, es que los socialistas catalanes renuncien a aprovechar las circunstancias de un calendario que ya les viene dado.

Año clave

Las mismas fuentes del PSC relativizan el impacto electoral que puedan tener estos grandes eventos de la cultura en términos electorales. Lo mismo que la Copa América, que provocó el rechazo de los comunes de Ada Colau y de la CUP. En cambio, sí que reconocen que la salida del Tour de Francia de Barcelona, prevista para el 4 julio de 2026, sí que puede generar un mayor impacto popular, sobre todo porque va precedida de dos semanas de eventos diversos vinculados al inicio de esta prueba deportiva.

En todo caso, 2026 es el año clave y parece un calendario diseñado a largo plazo para que Collboni se asegure la reelección, aunque también es verdad que tras las sucesivas marcha del consistorio de Ernest Maragall, Xavier Trias y Ada Colau, en la práctica se ha quedado sin oposición y todo augura un mandato tranquilo del PSC en la segunda ciudad de España.

Apuesta por grandes eventos

De hecho, a pesar de sus críticas a la izquierda, Collboni sigue promoviendo una ciudad a lo grande. Ya el año que viene calentará motores en su línea con un acto también del mundo cultural y que en este caso no tendrá lugar en la capital catalana, pero servirá para posicionarla en el mapa mundial. Barcelona será la ciudad invitada de honor en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) 2025, el encuentro cultural más importante de Iberoamérica, que se celebra desde 1987.

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Claudia Sacristán. Barcelona

La Feria Internacional del Libro de Guadalajara reúne 3.000 actividades y 750 autores de cerca de cincuenta países. "La feria permitirá relanzar el posicionamiento cultural y económico de Barcelona en América Latina, así como entre amplios sectores emergentes hispanos de los EEUU", apuntan desde el Ayuntamiento. Hay que tener en cuenta que el libro, gracias a grupos como Planeta, es la principal industria cultural de Cataluña, al contrario que pasa en Europa, donde el audiovisual y los videojuegos les superan.

En todo caso, este calendario dibuja una entente en la que Collboni abriría paso para que luego Illa fuera colonizando espacios culturales del soberanismo catalanista. Y renovar así el poder del PSC a ambos lados de la Plaça Sant Jaume cuatro años más, una vez que terminen sus respectivos mandatos.