¿Es Barcelona tan insegura como dicen los 'influencers'? "Nadie te ayuda, si pasa algo te sientes vulnerable"

Barcelona vive una crisis de imagen en la que la inseguridad se ha convertido en un auténtico dolor de cabeza para las autoridades y las patronales del turismo. Las redes sociales como TikTok o Instagram extienden tan rápido como la pólvora los casos de hurtos y robos en la capital catalana. Mientras tanto, y según los balances ofrecidos por el Ayuntamiento, los delitos -en cómputo general-, se reducen levemente (un 0,5%). Pero los vecinos tienen dudas de que esta situación tenga su traducción en las calles.

Hace apenas unas semanas, se viralizó un vídeo de una turista colocándose el bolso entre las piernas en una terraza de Barcelona para evitar que se lo robasen. Pero no se trata de un caso aislado. Cada vez son más los usuarios de TikTok que comparten este tipo de contenido. Desde fundas para el móvil que llevan incorporada una cuerda de seguridad hasta cómo usar una simple pinza del pelo para protegerte ante un atraco.

Trucos para evitar los hurtos que también comparten los vecinos. Si se pregunta a los barceloneses, ellos también tienen sus propios consejos. No ponerse nunca el móvil en el bolsillo posterior del pantalón, llevar el bolso debajo del brazo o colocarse la mochila delante cuando te subes al metro son algunos de los más habituales. "Si un grupo sospechoso te viene a hablar, pedir fuego o la hora, corre, cambia de acera, guíate por tus sensaciones", explica Ingrid D., que acostumbra a salir de fiesta por la zona de Marina o el Paralelo.

Pero, ¿es realmente Barcelona tan insegura como la están pintando? Muchos vecinos mantienen que no han vivido asaltos ni agresiones en primera persona, aunque algunos de ellos han presenciado hurtos en el metro o carteristas en Las Ramblas, una de las avenidas de la ciudad con más afluencia de turistas.

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Recientemente, el Ayuntamiento de Barcelona presentó los resultados del Barómetro 2024, una encuesta que llevó a cabo entre el 25 de junio y el 4 de julio que coloca la inseguridad como principal preocupación de los barceloneses con un 27,2%, seguida a más de diez puntos del acceso a la vivienda (16,6%) y el turismo (13%), que arrebata la tercera posición a la limpieza, que ha caído al 5%.

Noelia Poyato ha vivido toda la vida en Barcelona. Nacida y criada en Nou Barris, ella misma describe su barrio como uno los más peligrosos de la ciudad, ya que suele haber robos, redadas o incluso tiroteos. Considera que Barcelona no es peligrosa, aunque reconoce que le han robado el móvil en varias ocasiones.

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Una perspectiva menos optimista la tiene Sergi D., un joven de L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona) que se desplaza a diario a Barcelona en metro para acudir a la universidad. "Me gusta poco ir a Barcelona porque no me siento en mi ciudad". Como muchos otros, Sergi explica que esta sensación la tiene en parte también por la cantidad de "turismo desmedido y sin control" que habita las calles de Barcelona.

Tirones en el interior del coche

A finales de julio, la Junta Local de Seguridad de Barcelona dio cuenta de los datos de criminalidad. Según su informe, el volumen de delitos bajó en un 0,5% en el primer semestre con respecto al mismo periodo del año pasado. Los hurtos fueron los delitos más habituales en la capital catalana y representan casi el 60%. Aunque, según sus datos, este tipo de infracciones se ha reducido en un 5,1% con respecto al primer trimestre del año pasado. También hubo un descenso en otros delitos, como los de carácter sexual (2,5%).

Igual que con los hurtos pasa con los robos con violencia, que han bajado casi un 8%, pero aun así 2024 acumula hasta 5.035 casos. Los objetos más sustraídos son móviles, cerca de un 45% de los casos, los bolsos con el 22%, joyas con cerca del 10% y, por último, relojes con el 8%. Y las cifras son cifras hasta que les pones nombre para contar su historia.

María Rosa tiene 52 años y lleva más de media vida trabajando en el centro de Barcelona. Hace un par de meses vivió un episodio que le hizo cambiar su mirada a la ciudad por completo. Una tarde de febrero aparcó el coche en una esquina de la calle Aragón, una de las más concurridas de la capital catalana. Cuando volvió de hacer un recado, se subió al coche, se sentó en el asiento del conductor y procedió a arrancar, sin bloquear las puertas, algo que no debería suponer un problema.

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A. Fernández. Barcelona

En ese momento, un hombre desconocido abrió la puerta del piloto, donde ella estaba sentada, y la mujer se quedó en shock. Aun así, consiguió cerrarla, pero el delincuente volvió a abrirla, así hasta tres veces. La mujer cansada y derrotada de haber tenido que forcejear, finalmente cedió, y el ladrón se tiró encima de ella para arrancarle el bolso de las manos. "Es increíble que, en el centro de Barcelona, con un montón de gente, a las 7 de la tarde te abran el coche y te asalten", denuncia María Rosa: "Nadie te auxilia, pasas desapercibida, es una sensación de vulnerabilidad tremenda".

Natalia P. vive en un piso de estudiantes en Barcelona: "No es una ciudad segura, se ve cuando viajas a otros países y capitales. Aun así, la gente es muy exagerada, hay sitios mucho peores". Una sensación que no es única entre los vecinos: "Me siento más insegura aquí que en otros países", reconoce Ariadna B., que se define como "ciudadana del mundo" y que hace años que se ha asentado en la Ciudad Condal.

Una "idea exagerada" de los turistas

En la zona alta de Barcelona, por encima de la Diagonal, muchos de los vecinos comparten una misma opinión sobre la sensación de inseguridad: "Depende de la zona". Los ciudadanos de los barrios adinerados de la ciudad señalan directamente a los barrios que consideran problemáticos. "El Raval, el Born, la Mina… ahí hay más posibilidades de que te roben u otras cosas", dice Marina R. una joven de Sant Gervasi, que añade: "Lo malo es que ahí están algunas de las zonas más conocidas de Barcelona, las más visitadas y por donde se mueven los turistas, ese es el motivo de que nos estemos ganando esta fama de ciudad insegura".

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Steven es inglés y está viajando solo por primera vez a la capital catalana: "Es una ciudad maravillosa, pero da la sensación de que quizás está gobernada por la gente equivocada". Ante el temor que expresan los extranjeros surge la respuesta crítica de los barceloneses, que responden con un: "Los guiris también alborotan las calles" o "hablan de Barcelona como si fuese el Bronx o Medellín en los 90".

Pero esta imagen de inseguridad no viene únicamente de los extranjeros, también muchos españoles tienen la creencia de que Barcelona es una ciudad que se debe visitar en permanente tensión. Estefanía es de Madrid y fue a Barcelona hace cuatro o cinco años: "No me sentí especialmente insegura", aunque reconoce que en la capital se ha empezado a hablar de que la situación ha empeorado desde hace dos años. "Mucha gente que conozco que ha ido a Barcelona ha vuelto sin el móvil", reconoce.

También hay casos de personas que se han mudado de Madrid a Barcelona atemorizadas por la leyenda de la inseguridad más absoluta. Es el caso de Esteban, originario de Alicante, que durante su juventud ha vivido tanto en Barcelona como en Madrid. "Cuando me mudé, todo el mundo me dijo que debía tener cuidado, que en la tele no paraban de salir atracos en Barcelona". Pese a las recomendaciones de que se quedase en la capital, decidió darle una oportunidad a la Ciudad Condal y reconoce que nunca ha pasado miedo.