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Aragonès se alinea con Murcia y Valencia para reivindicar el corredor mediterráneo
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Aragonès se alinea con Murcia y Valencia para reivindicar el corredor mediterráneo

El presidente de la Generalitat asistirá este jueves a un acto en Barcelona, junto a Puig y López-Miras, para reclamar esta infraestructura, boicoteada activamente por sus predecesores en el Govern

Foto: El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. (EFE)
El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. (EFE)

El cambio de Gobierno en Cataluña tras las elecciones de febrero de 2021 ha surtido efecto. La indolencia en algunos temas del anterior Ejecutivo, que encabezaba Quim Torra, ha dado paso a la gestión del equipo que lidera Pere Aragonès. Y los efectos se comienzan a notar. Una prueba es la presencia del president en un acto para reivindicar el corredor mediterráneo que la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) organiza en Barcelona este jueves, algo impensable con su predecesor, que boicoteó activamente el proyecto. La infraestructura, que también ha sido calificada como prioritaria por el empresariado catalán, supondría materializar un pasillo a lo largo del litoral español para conectar Andalucía, Valencia y Murcia con Europa o con la propia Cataluña.

No es un capricho. La línea ferroviaria que conecta Cataluña con las comunidades del sur es digna de un país tercermundista, hasta el punto de que un tren que viaje hacia el norte ha de detenerse para que pase el que circula en dirección contraria porque solo hay una vía de tendido férreo. El envío de mercancías a la parte más septentrional de España o Europa se convierte en poco menos que una pesadilla, y tanto los centros de mercancías como los puertos mediterráneos se quejan de la deficiencia de comunicaciones. Los empresarios, sean de la comunidad que sean, apuestan por esta infraestructura con una mejor conexión entre territorios. “Apostar por el Mediterráneo es apostar por el conjunto del país y conectar territorios contribuye a nuestra vertebración”, dice AVE en una nota oficial.

Foto: Un tren atraviesa Teruel. (EFE)

El evento que acoge Barcelona este jueves es el sexto Acto Empresarial por el Corredor Mediterráneo, organizado por AVE, llevado a Barcelona como una forma de involucrar a las autoridades catalanas. “Nuestro país no puede esperar más” es el lema de la jornada, que espera concentrar en la capital catalana a más de 1.500 empresarios y representantes de la sociedad civil española. Además de Aragonès, asistirán la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, y su homólogo en Murcia, Fernando López-Miras.

También han confirmado su asistencia los dirigentes de AVE, Vicente Boluda; de la CEOE, Antonio Garamendi; de Telefónica, Emilio Gayo; del Círculo de Economía, Jaume Guardiola; de Fomento, Josep Sánchez-Llibre; del Consejo de Cámaras de la Comunidad Valenciana, José Vicente Morata, o el presidente de Mercadona, Juan Roig. También los responsables del puerto de Barcelona, Damià Calvet; del puerto de Cartagena, Yolanda Muñoz, y del puerto de Castellón, Rafael Simó. Se prevé que además acuda el exministro Josep Piqué, entre otras personalidades.

Demasiados retrasos

Fuentes de AVE señalaron a El Confidencial que el acto se organiza "para reivindicar que se cumplan los tiempos marcados" por el Ejecutivo central para construir esta infraestructura. De hecho, el corredor mediterráneo ya debería estar en funcionamiento y ahora se baraja el año 2025 como su fecha de puesta a punto, aunque los plazos no se van cumpliendo, por lo que pueden generarse nuevos retrasos. “El encuentro servirá para chequear en qué momento se encuentran las obras del corredor y para pedir el Gobierno español que no retrase más su puesta en marcha”, explican. Desde los círculos empresariales, se teme que el final del túnel del corredor mediterráneo no se vislumbre aún, por las continuas demoras.

Foto: La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, interviene en el 5º Acto Empresarial por el Corredor Mediterráneo. (EFE/Mariscal) Opinión

La conexión ferroviaria por el litoral, que parte desde Algeciras, ha de hacerse con una red de doble plataforma, para que los trenes de pasajeros y mercancías puedan conectarse con la de ancho europeo sin trasbordo de mercancías en la frontera. Su longitud desde este punto hasta Zahony (Hungría) sería de 3.500 kilómetros y conectaría al 54% de los habitantes de Europa. Algunos de los tramos están ya construidos, pero la gran mayoría están en obras o ni siquiera han comenzado. Tres de estos están proyectados para 2026, por lo que ya han rebasado las previsiones del Gobierno. Pero la mayoría ni siquiera tienen fecha de terminación, como los de la estación de La Sagrera en Barcelona, el AVE Castellón-Valencia, el de Murcia-Cartagena, el de Granada-Antequera o la conexión con todos los puertos.

El colofón de una campaña

AVE puso en marcha la plataforma Quiero Corredor para dedicarse exclusivamente al seguimiento y a la reivindicación de esta infraestructura. Fuentes de la asociación valenciana señalan que “sobre el papel es una cosa, pero ahora constatamos que no se están cumpliendo los plazos previstos por el Gobierno”. De ahí que el acto de Barcelona sea publicitado como el colofón de una gran campaña publicitaria, exigiendo al Ejecutivo de Pedro Sánchez que “no coleccione más retrasos”. Desde hace dos meses, los empresarios comenzaron una campaña bajo el lema "Mójate por el corredor mediterráneo" para denunciar “la demora en la construcción de las infraestructuras del corredor”.

En uno de sus recientes comunicados, la plataforma reproduce unas palabras del secretario general de AVE, Diego Lorente: “El movimiento Quiero Corredor nace desde la sociedad civil para llamar la atención sobre una realidad que es catastrófica, y es que no tengamos una infraestructura ferroviaria adecuada para el transporte de personas y mercancías, lo cual afecta directamente a nuestra economía porque perjudica el turismo y las exportaciones”.

El cambio de Gobierno en Cataluña tras las elecciones de febrero de 2021 ha surtido efecto. La indolencia en algunos temas del anterior Ejecutivo, que encabezaba Quim Torra, ha dado paso a la gestión del equipo que lidera Pere Aragonès. Y los efectos se comienzan a notar. Una prueba es la presencia del president en un acto para reivindicar el corredor mediterráneo que la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE) organiza en Barcelona este jueves, algo impensable con su predecesor, que boicoteó activamente el proyecto. La infraestructura, que también ha sido calificada como prioritaria por el empresariado catalán, supondría materializar un pasillo a lo largo del litoral español para conectar Andalucía, Valencia y Murcia con Europa o con la propia Cataluña.

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