Es noticia
“Comencemos por algún lado. Comámonos a los ricos”: el particular debate fiscal de la CUP
  1. España
  2. Cataluña
SEÑALAN TAMBIEN A ERC Y JXCAT

“Comencemos por algún lado. Comámonos a los ricos”: el particular debate fiscal de la CUP

La formación anticapitalista pone en marcha una campaña con el foco puesto en la subida de precios y la precariedad de los trabajadores. El objetivo es recuperar el terreno perdido ante su electorado más fiel

Foto: Imagen de archivo de una manifestación convocada por la CUP con motivo de la Diada. (EFE/Alejandro García)
Imagen de archivo de una manifestación convocada por la CUP con motivo de la Diada. (EFE/Alejandro García)

La lucha de clases vuelve a la palestra, invocada por la izquierda irredenta que sigue anclada en los postulados marxistas de principios del siglo XX. “Comencemos por algún lado. Comámonos a los ricos” es el lema de la nueva campaña de la CUP, el partido de la izquierda independentista catalana por excelencia. De hecho, la formación anticapitalista ya planeaba un volantazo a su estrategia y la vuelta a los antiguos postulados antisistema para reconciliarse con su electorado más fiel, y ahora, tras el debate fiscal abierto entre diferentes comunidades, el movimiento se ha precipitado.

placeholder Varios jóvenes queman una fotografía del 'president', Pere Aragonès, y de Pedro Sánchez en la última Diada. (EFE/Quique García)
Varios jóvenes queman una fotografía del 'president', Pere Aragonès, y de Pedro Sánchez en la última Diada. (EFE/Quique García)

En esta estrategia prima el deseo de marcar perfil propio, diferenciarse de las demás ofertas soberanistas y levantar un banderín que enganche a un público ávido por cambiar las cosas. El principal postulado de la CUP es que por mucha independencia que haya en Cataluña, nada cambiará si no cambia el sistema. En otras palabras, que juntamente con la separación de España es preciso aplicar un nuevo concepto de sociedad para que la república catalana funcione. Se trata de un pack indivisible: de lo contrario, no habrá ningún avance. Por eso, su espíritu anticapitalista le ha llevado a la épica lucha de clases del siglo XX, cuando el enemigo a batir eran “los ricos”. De ahí el eslogan de su nueva campaña de imagen mientras prepara su particular ‘otoño caliente’ al hilo del aniversario del referéndum del 1-O.

Durante la última semana, han ido floreciendo pancartas, grafitis o pintadas por toda Cataluña aludiendo a esta nueva campaña, intentando centrar el discurso en los ejes que a los antisistema les interesa, o como dice la propia organización, “un marco discursivo en el que trabajaremos las intervenciones públicas durante los próximos meses”.

Foto: Manifestación en Barcelona tras la consulta ilegal del 1-O. (EFE/Alberto Estévez)

La campaña, dice la CUP, “responde a la necesidad de dar respuesta a la situación actual de encarecimiento general de la vida combinado con una situación precaria tanto en lo referente a los derechos laborales y trabajos de calidad como en lo referente a los servicios públicos básicos. Además, demuestra la soberanía precaria de las instituciones del país a la hora de proteger los derechos de la gente trabajadora”.

Los ejes de la campaña

Los ejes centrales de esta campaña serán: el trabajo, la vivienda, la educación, la sanidad, los impuestos o la renta básica. La estrategia se vehicula a través de dos grandes acciones: la primera será la denuncia constante de los principales agentes que la CUP considere culpables de la situación. En su punto de mira, estarán los grandes capitales y las grandes corporaciones. El segundo eje de actuaciones será el eje político, en el que tendrán cabida propuestas concretas para cada uno de los problemas que la organización detecte.

placeholder Manifestantes en la última Diada. (EFE/Alejandro García)
Manifestantes en la última Diada. (EFE/Alejandro García)

“La renta básica universal, el control de precios, la nacionalización de suministros y el impuesto para el futuro son cuatro de las 11 propuestas en que se estructurará la campaña”, además de los ya citados ejes. En su programa marco 2019-2023, la formación anticapitalista deplora que tanto el Estado como los dos partidos mayoritarios catalanes “juegan al ‘procesismo’ retórico mientras en la práctica ejercen el autonomismo”. Y subraya que “para la CUP, la unidad popular es la alianza de aquellas personas que llevamos décadas padeciendo sus políticas neoliberales, patriarcales y autonomistas para plantear una alternativa global a su dominación”.

La formación defiende también que “sólo a través de la conjunción ante la movilización y la organización popular masivas y la determinación de las instituciones a hacer valer los derechos políticos, sociales y económicos de la mayoría popular, si es preciso a través de la autotutela de derechos y la desobediencia, es posible un cambio de modelo que permita ejercer la autodeterminación y construir un cambio de modelo basado en la justicia social, la igualdad, la solidaridad y la libertad”.

Foto: Turull (JxCAT) y Aragonès (ERC) en una imagen de archivo. (EFE/Susanna Sáez)

Para impulsar esta campaña, la CUP necesita desmarcarse de los otros agentes soberanistas, especialmente de ERC y de JxCat. Por ello, en el debate de política general (similar al del Estado de la Nación en el Congreso), los anticapitalistas sacaron la artillería contra el ‘president’, Pere Aragonès. “Su discurso es autocomplaciente, un discurso propio de un dirigente de la patronal. No hemos visto ningún horizonte de cambio ni ninguna medida transformadora. Es necesaria una nueva estrategia que permita recuperar la iniciativa política (…) olviden los proyectos tronados de Foment [la patronal catalana]. Es preciso una transición ecosocial y de soberanía nacional”, defendió la portavoz de la CUP en el Paralament, Eulàlia Reguant. Le reprochó que no habló de desahucios, ni de los CIE, ni de la ley de alquileres que está suspendida por el Constitucional, ni de los beneficios de empresarios como Florentino Pérez o Juan Roig. Son los ricos a los que la CUP se quiere ‘merendar’. Aragonès, de momento, está en su mismo saco.

La lucha de clases vuelve a la palestra, invocada por la izquierda irredenta que sigue anclada en los postulados marxistas de principios del siglo XX. “Comencemos por algún lado. Comámonos a los ricos” es el lema de la nueva campaña de la CUP, el partido de la izquierda independentista catalana por excelencia. De hecho, la formación anticapitalista ya planeaba un volantazo a su estrategia y la vuelta a los antiguos postulados antisistema para reconciliarse con su electorado más fiel, y ahora, tras el debate fiscal abierto entre diferentes comunidades, el movimiento se ha precipitado.

CUP Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) Nacionalismo Independentismo