"Es inviable": Aragonès acalla la pretensión de la ANC de declarar la independencia

Pere Aragonès convocó este martes por la tarde a la ANC, a Òmnium Cultural y a la Associació de Municipis per la Independència (AMI) para calibrar el estado de ánimo de las entidades independentistas tras la manifestación de la Diada, pero la reunión acabó en una auténtico diálogo de sordos. La presidenta de la ANC, Dolors Feliu, planteó volver a declarar la independencia de manera unilateral en el segundo semestre de 2023, “coincidiendo con la presidencia española de la UE. Como todo el mundo estará mirando será más difícil la represión”, llegó a señalar. Sin embargo, la entidad no encontró respaldo. Tras la reunión, la 'consellera' de Presidencia, Laura Vilagrà, calificó esta propuesta de “inviable” y criticó que hubieses sido “improvisada minutos antes de la reunión”.

El fracaso de la reunión ya se intuía por la mañana cuando se supo que el vicepresidente de la Generalitat, Jordi Puigneró (JxCAT), tuvo que ser llamado a capítulo desde Palau por haber organizado una reunión con la ANC por su cuenta y fuera de la agenda pública de la Generalitat. Presidencia obligó a Puigneró a reunirse con la ANC fuera de las instalaciones de la Generalitat. Pero durante la tarde, la distancia entre Aragonès, y por extensión ERC, y la ANC se hizo abismal.

La ANC llevó a Palau la propuesta que ya hizo la CUP hace un año: un nuevo referéndum en 2023 coincidiendo con el que planean los independentistas escoceses, algo que ahora, un año después tampoco está claro en Escocia. Laura Vilagrà dejó claro que la Generalitat no va a apostar por esta opción y que lo que hace falta es “recuperar las confianzas”, según declaró en rueda de prensa tras la reunión, que duró más de dos horas. Divorcio total y portazo.

Vilagrà desmontó sin contemplaciones las pretensiones de la ANC de hacer retroceder el reloj y volver a octubre de 2017 y así denunció que “a día de hoy sólo hay una estrategia válida para la independencia y refrendada por las urnas. Representamos al 80% de la sociedad catalana. Y esa estrategia nos permite confrontar con el Estado. Por hoy sólo hay una propuesta. El resto son deseos, son proclamas que no nos acercan a nuestro objetivo: la independencia de Cataluña”.

Según Vilagrà, “hay que seguir trabajando bilateralmente con estas entidades. Hemos podido escuchar largamente y compartir la estrategia independentista de la Generalitat. Este Govern es un activo imprescindible para fortalecer el proyecto y sumar cada vez más gente”.

Por tanto, ni Aragonès ni ERC se movieron de su postura inicial: independencia sí, pero ahora no porque no se dan la circunstancias que puedan hacer el proyecto viable. En cambio, la ANC quiere otra DUI como la de Carles Puigdemont para el año que viene. Ni los republicanos ni Òmnium avalan esta posición.

Vuelve la prisa

La ANC regresa al lema 'Tenim pressa' –tenemos prisa–, que tanto daño hizo en 2017 al movimiento. Feliu se reafirmó en su posición de “lo planteamos ahora, a un año vista, y creemos que esto lo hace todavía más factible. Hay mucho tiempo para prepararlo".

La ANC plantea que hay tiempo para en un año volver a declarar la independencia

Por eso la ANC pide que el próximo debate de política general, que arrancará este 27 de septiembre, acabe con una resolución que vote la mayoría independentista del Parlament. En este momento, ERC está muy lejos de asumir este posicionamiento.

Ni la CUP se apunta

Vilagrà se reafirmó en apostar por la mesa de diálogo que, a su juicio, “fuerza y confronta con el Estado español”. Incluso la CUP relativiza que la manifestación del domingo avale a la ANC para algo así.

“No trabajamos con deseos. Queremos ganar en serio. Queremos que Cataluña sea una república y hoy no se dan las condiciones para sacar adelante una propuesta como la que ha hecho la ANC”, lamentó esta tarde la 'consellera' de la Presidencia.