La ley de amnistía de Budó acaba convertida en una propuesta simbólica del Parlament

La ley de amnistía que anunció Meritxell Budó hace dos semanas ha acabado convertida en una propuesta de resolución, una declaración formal que se colará en el último pleno con calzador y que apenas tiene valor simbólico. La propuesta de resolución se ha presentado de manera conjunta por la CUP, JxCAT y ERC, pero, como han advertido los letrados del Parlament en la reunión de la Mesa de ayer, “solo tiene el valor de un deseo y no supone ninguna aplicación legal”, según han desvelado fuentes parlamentarias. Los presos del 'procés' deberán seguir esperando el indulto si quieren salir a la calle. Un indulto que no será inmediato.

“La amnistía debe tener como ámbito objetivo todos los actos de intencionalidad política, cualquiera que fuese su resultado, tipificados como delitos o como conductas punibles administrativamente, realizados desde el 1 de enero de 2013 y hasta el momento de la entrada en vigor de la ley de amnistía, cualquiera que sea su denominación y contenido”, asegura en su propuesta de resolución el soberanismo.

Pero la propuesta de resolución no tiene más alcance legal que mostrar un desiderátum de la mayoría que la respalde. Nada más. La portavoz de la Generalitat exageró su impacto, que de hecho será ninguno. En el fondo, una propuesta de resolución tiene una metodología determinada, 250, que impide que pueda ser elevada al Congreso para que se modifique la ley. En cambio, el Parlament sí que podía haber presentado una propuesta de ley de amnistía y por el método 270 trasladarla a la Cámara Baja española. Esto no pasará con la propuesta de resolución señalada, ya que legalmente no es posible llevarlo a cabo por esta vía y no hay tiempo en esta legislatura que ahora acaba.

Desde que se produjo la sentencia del 'procés' por parte del Tribunal Supremo, hace más de un año, las fuerzas soberanistas han perdido un año sin hacer nada por los presos. La principal ayuda que han recibido estos ha venido de los comunes, que han apoyado tanto los indultos como la modificación de Código Penal para rebajar las penas del delito de sedición. Ambas vías han sido rechazadas por el independentismo, que solo acepta la amnistía como salida política.

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La propuesta de resolución para el último pleno parece más pensada para calmar a sus votantes con un nuevo simbolismo que para ser llevaba a cabo en el terreno de la legislación real. De hecho, equipara a los presos del 'procés', como Oriol Junqueras, Carme Forcadell o Quim Forn, con “las 2.800 personas que han sido o siguen encausadas por la participación en eventos relacionados con la consulta del 9 de noviembre, el referéndum deI 1 de octubre de 2017 y las diversas movilizaciones y protestas ciudadanas”.

Sin riesgo legal

No es solo que sus señorías en el Parlament no asuman ningún riesgo legal con la aprobación de esta propuesta de resolución —que tendrá el mismo valor que las múltiples propuestas de resolución que ha publicado el Parlament en favor del pueblo saharaui, por poner un ejemplo de minoría nacional oprimida— sino que tampoco habrá una traslación legal que pueda ser útil a los presos en este momento.

La situación se hizo tan evidente que ayer el portavoz de ERC en la Cámara catalana, Sergi Sebrià, se vio obligado a anunciar una ley de amnistía para después de las elecciones, pese a la gran desconfianza entre los grupos independentistas, tal y como se está viendo en la precampaña. Así, tras la propuesta de resolución presentada este miércoles, ERC, JxCAT y la CUP también presentarán una ley de amnistía en el Congreso una vez pasadas las elecciones catalanas del 14 de febrero, “concretamente, en el mes de marzo”. Así lo ha anunciado el presidente del grupo de ERC en el Parlamento, Sergi Sabrià, en rueda de prensa desde la Cámara catalana.

Sergi Sebrià, de ERC, anunció una propuesta de ley en el Congreso en ese sentido

Para el portavoz de ERC, la propuesta de resolución en el Parlamento y que se pueda votar la próxima semana define "el marco antirrepresivo compartido del independentismo y trabajamos para sumar tantos espacios como sea posible".

Cada vez más distantes

Lo que intentó Sebrià es asegurar que ERC y JxCAT, que no se ponen de acuerdo en nada, llegarán a un consenso en esto. Y que la proposición de ley de amnistía se presentará de manera directa en el Congreso sin pasar por el Parlament, que queda relegado a un órgano de animación con la propuesta de resolución que se someterá a votación la próxima semana.

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Según el artículo 126 del Reglamento del Congreso, pueden presentar una propuesta de ley, “a iniciativa de: 1º. Un diputado con la firma de otros catorce miembros de la Cámara, 2º. Un Grupo parlamentario con la sola firma de su portavoz”. Es decir, ERC podría hacerlo sola. Pero JxCAT que no tiene ni grupo parlamentario, precisa del resto de diputados soberanistas. Además, con 52 diputados de Vox, una ley de amnistía de los presos catalanes tiene muy difícil prosperar en la Cámara.