La Generalitat saca a Treball de las residencias tras morir 1.047 personas

La Generalitat ha apartado al departamento de Treball de la tutela de la residencias de ancianos tras morir 1.047 personas. En la práctica, las más de 4.000 residencias de ancianos han sido intervenidas y pasan a ser controladas por el departamento de Salut, que asumirá la última responsabilidad y ya no recaerá en Treball, Benestar y Familia.

La nueva responsable es Yolanda Lejardi, Coordinadora de Participación, Secretaria de Atención Sanitaria y Participación, según ha explicado la consellera de Salut Alba Vergès.

TE PUEDE INTERESAR

La Generalitat crea un grupo para reorientar el estado de las residencias de mayores

Marcos Lamelas. Barcelona

En la rueda de prensa diaria, el conseller de Treball, Chakir El Homrani, ha reconocido que a causa de la situación crítica de las residencias la Dirección General de la Autonomía Personal i la Discapacidad, de la que dependen las residencias, la responsabilidad pasa a la conselleria de Salut y deja de depender de Treball. Según ha subrayado Homrani, “hemos decidido que el departamento de Salut lidere la atención a los centro residenciales”.

Homrani ha reconocido que no sabe cuantos de los 1.047 muertos forman parte de los 3.041 fallecidos que se ha cobrado el Covid-19 en Cataluña. “Estamos intentando cruzar los datos”, ha señalado.

Hoy Homrani ha tenido una reunión con el sector de las residencias en las que ha participado Quim Torra y en las que los empresarios se han quejado de que no necesitaban un plan sino medidas inmediatas, como tests a todos los enfermos y desplazar a una parte de los residentes. Pero por ahora sólo hay el anuncio de un plan sobre el que no se dan detalles.

La situación de las residencias es tan caótica que el 20% de los centros todavía no ha reportado la información a la conselleria de Treball. Por eso, ahora el Institut Català de la Salut toma el control de las residencias de ancianos.

Vergès no ha sido capaz de explicar que hará Salut con las residencias de ancianos, sólo que “preparan un plan”, pero no hay medidas inmediatas. Sí se conoce que utilizarán una parte de los 180.000 test serológicos que envió el Gobierno español para separar internos sanos y ancianos.

Petición al Gobierno

Además, la Generalitat ha pedido al Gobierno español que el confinamiento duro que acaba mañana, con parálisis de la economía, se mantenga. Así lo ha hecho la consellera de Presidència Meritxell Budó, que se ha mostrado muy preocupada por cómo se llevará a cabo el desconfinamiento de la población en esta crisis del coronavirus. Budó teme que un “desconocimiento precipitado pueda suponer un rebrote de la enfermedad”.

La Generalitat no dice hasta cuando debería prorrogarse, sólo que quiere mandar, en palabras de Budó “un mensaje al Gobierno español". "Mañana acaba el confinamiento total. Seguimos siendo de la opinión de que debe prolongarse. Nos llega incertidumbre, no sabemos qué pasará a partir de la semana que viene. Sólo se ha aplicado una recentralización. A pesar de esto, hemos sido leales. Pero ahora existe una incertidumbre sobre hasta dónde llegará el desconfinamiento, qué trabajadores podrán ir al trabajo, qué sectores podrán ir a trabajar. Un confinamiento mal planificado hoy podría ser letal para mañana”, ha argumentado.

El conseller de Interior, Miquel Buch, ha explicado que “ahora se está reuniendo el comité del Procicat. “Se desplazará para el comité de dirección la petición de que se mantenga este confinamiento en Cataluña. Si no somos capaces de aguantar este confinamiento, si no lo hacemos así, todo es esfuerzo y el sufrimiento por no poder ver a seres queridos no servirá para nada”, ha apuntado.