El abuelo del limpiaparabrisas, la imagen más icónica de los disturbios en Barcelona
El gran símbolo de la quinta jornada de protestas ha sido un hombre de avanzada edad que recorrió las calles de la ciudad condal reponiendo el mobiliario urbano destrozado por los CDR
Además de innumerables desperfectos, las protestas en las calles de Barcelona tras la sentencia del 'procés' están dejando imágenes icónicas. El primer protagonista fue el 'rider' de Uber Eats que repartía con su bicicleta mientras las llamas tomaban la ciudad; después llegó el turno de los turistas que se fotografiaban con las barricadas de fondo y, a continuación, se extendió el vídeo de un padre que huía con su hijo en brazos ante el temor de que se incendiara la vivienda en la que residían.
[Última hora sobre los disturbios en Barcelona]
El gran símbolo de la quinta jornada de protestas ha sido un hombre de avanzada edad que recorrió las calles de la ciudad condal con lo que parece ser un limpiaparabrisas en manos y se enfrentó a los manifestantes para impedir que levantaran barricadas y atacaran a las fuerzas de seguridad. "Que no me entere yo que lanzáis algo a la Policía", llegó a increpar a los encapuchados de la Vía Laietana, según recogen las cámaras de 'Cuatro'.
Un anciano planta cara a los violentos independentistas que destrozan mobiliario urbano.
— Antidisturbios 🇪🇸 (@FuerzasDelOrden) October 18, 2019
-Que no me entere yo que lanzais algo a la Policía. pic.twitter.com/IEsVpMoxBH
En otro fragmento, captado por el programa 'Más Vale Tarde', de 'La Sexta', se le puede observar caminando por mitad del fuego cruzado entre policías y manifestantes hasta plantarse frente a los contenedores que estos últimos utilizaban como parapetos. Allí permaneció con el objetivo de disuadirles —y sin que mediara violencia entre ninguna de las dos partes— hasta que los agentes avanzan y los activistas comienzan a correr.
Además de innumerables desperfectos, las protestas en las calles de Barcelona tras la sentencia del 'procés' están dejando imágenes icónicas. El primer protagonista fue el 'rider' de Uber Eats que repartía con su bicicleta mientras las llamas tomaban la ciudad; después llegó el turno de los turistas que se fotografiaban con las barricadas de fondo y, a continuación, se extendió el vídeo de un padre que huía con su hijo en brazos ante el temor de que se incendiara la vivienda en la que residían.