Quim Torra doblará los puestos de algunas 'consellerias' para colocar a los presos

La restitución tiene un coste. El nuevo presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha decidido doblar los puestos de algunas 'consellerias' para que los presos puedan ser 'consellers' y mantener así la idea de que es posible restaurar, aunque sea de manera parcial, el Govern que encabezaba Carles Puigdemont y que fue suspendido por el 155. La idea es que cada 'conseller' preso tenga un comisionado que será la persona que en realidad haga su trabajo. Dos puestos, dos salarios, la misma función, según confirman fuentes del PDeCAT.

Así, por ejemplo, Josep Rull será el 'conseller' de Territori, el equivalente de Obras Públicas. Pero tendrá un comisionado de Territori, que será Damià Calvet, quien se ha convertido en persona de confianza de Carles Puigdemont. De manera que otras administraciones, empresas privadas o agentes sociales interlocutarán con Calvet en lugar de Rull, que seguirá en su celda de Estremera.

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Lo mismo pasará con Cultura. Lluís Puig asumirá la 'conselleria' desde Bruselas. Pero Puig no puede pisar España a riesgo de ser detenido y encausado por el Tribunal Supremo. En este caso, la diputada Laura Borràs actuará como comisionada de Cultura.

Se prevé que en las próximas semana el juez Pablo Llarena suspenda en el cargo a todos los encausados. Cuando esto pase, los comisionados asumirán de manera automática los cargos de los 'consellers' cesados en sus puestos. Así, que 'consellers' como Rull o Jordi Turull (Presidencia) asuman sus cargos será en esencia de manera simbólica y por unos días. Quim Torra aseguró que su Govern sería temporal. Ahora ha trascendido que algunos de sus 'consellers' también lo serán.

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ERC discrepa de esta idea de la restitución. Los de Oriol Junqueras consideran que estos 'consellers' provisionales dan a Llarena más poder del que ya tiene, puesto que la primera crisis de Govern no dependerá de cuestiones políticas sino que la generará el Tribunal Supremo.

Por eso, ERC ha optado por hacer tabla rasa, según apuntan fuentes del partido. Y la mayoría de los cargos que asuman entrar en el Govern, como es el caso de Pere Aragonès, que asumirá la vicepresidencia económica, no habrán sido titulares antes del cargo ni tendrán causas pendientes con la Justicia.

La excepción Comín

Pero hay un excepción. El 'exconseller' de Salut, Toni Comín, convertido en el confidente de Puigdemont desde que decidió instalarse con él en Bruselas, ha pedido volver a ser 'conseller' de Salut. Y en ERC están intentando gestionar esta crisis. Complicado decirle que no si el PDeCAT restituye a todos los consejeros que así lo desean.

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Eso obliga a cambiar todos los cargos previstos. Así, ERC se debatía para Salut entre el exdirector del Catsalut, David Elvira, o el exsocialista Joan Ignasi Elena, que tienta a Junqueras por el principio de los republicanos de “ensanchar la base”, es decir, de ampliar el apoyo social del independentismo más allá de sus apoyos tradicionales.

Eso obligará, además, a nombrar a una mujer para Exteriores, algo que no estaba previsto pero que ERC quiere para mantener una cierta prioridad.

Artadi, desplazada de nuevo

Por otra parte, Elsa Artadi ha sido desplazada de nuevo. El director del CTTI, Jordi Puigneró, se ha ganado la confianza de Puigdemont para ser el nuevo 'conseller' de Governació, que integraría telecomunicaciones. Y así Artadi ha sido retirada de Governació y tendrá que conformarse con Empresa i Coneixement, eso sí, reteniendo la portavocía.

Con este cambio además, se margina a Marc Solsona, que iba a ser el máximo representante del PDeCAT. Ahora ya no hay sitio para él en el gobierno que encabezará Torra pero que está diseñando Puigdemont desde Berlín.