Puigdemont pidió a Rajoy garantías: liberar a 'los Jordis' y no aplicar el 155

Carles Puigdemont negoció contrarreloj con el Gobierno de Mariano Rajoy y con la colaboración de diversos intermediarios los flecos para el acuerdo que le habría llevado a convocar elecciones autonómicas, según explicaron fuentes cercanas al Palau. Sin éxito, porque según anunció el presidente de la Generalitat en su esperada comparecencia, "no hay garantías para que hoy convoque elecciones".

Esas mismas fuentes explicaron que Puigdemont inició esta mañana la demolición del aparato independentista sin tener del todo cerradas las garantías de que el Gobierno del PP fuese a cumplir su parte. Las dos peticiones que hacía Puigdemont se limitaban a lograr la puesta en libertad del presidente de la ANC y del de Òmnium Cultural —Jordi Sànchez y Jordi Cuixart— y a que se le garantizara que no se aplicaría el 155 y que, por lo tanto, no habría suspensión de la autonomía en Cataluña. Pero, como dijo Puigdemont en su intervención, ninguna de las dos aspiraciones han obtenido el resultado esperado.

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Y abundó: "Esto no ha obtenido una respuesta responsable por parte del PP, que ha aprovechado esta opción para añadir tensión en un momento en el que hace falta diálogo. Por lo tanto, no hay elecciones, pero tampoco, por el momento, declaración de independencia".

De lo que pueda suceder en adelante, dijo: "Mi responsabilidad era agotar todas las opciones que tenía en la mano, practicando la paz y el civismo. Pues bien, en las próximas horas, estos compromisos deben mantenerse firmes. Solo así podremos acabar ganando". Así, queda en manos del Parlament la reacción a la aplicación del artículo 155.

La llamada de Urkullu

Una llamada telefónica esta mañana del lendakari Iñigo Urkullu al 'president' inclinó definitivamente la balanza hacia la alternativa de convocar elecciones, según explican fuentes conocedoras de los contactos entre estos dos gobiernos autonómicos. Urkullu recomendó a Puigdemont que no proclamase la independencia y que declarase elecciones, y Puigdemont lo interpretó como un mensaje del Gobierno en este sentido.

Por su parte, el Gobierno solo habría puesto sobre la mesa el artículo 155: si bien seguiría su tramitación en el Senado, quedaría suspendido en su ejecución, una facultad legal que sí tiene. En cambio, el Ejecutivo de Rajoy no llegó a ofrecer nada respecto a la libertad de Jordi Cuixart y Jordi Sànchez, alegando que tiene que respetar la separación de poderes y que se trata de un tema judicial.

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Estas negociaciones de última hora explicaban el retraso en la declaración pública que iba a hacer Puigdemont, así como la confusión a primera hora de la tarde alrededor de la comparecencia. Finalmente, se celebraba en el Palau de la Generalitat a las 17:00, y en ella el 'president' anunciaba que finalmente no iba a convocar los comicios y que por lo tanto había decidido que "la mayoría [del Parlament] determine" cómo reaccionar ante la aplicación del 155 en el pleno de la Cámara catalana.

Una mañana de locura

A medida que comenzaba la mañana, la posibilidad de convocar elecciones cobraba fuerza. Tras la reunión que ha mantenido este jueves Carles Puigdemont con sus 'consellers', el 'president' se estaría inclinando hacia esta opción tras las presiones que ha recibido por parte de algunos miembros del Govern. Los comicios frenarían la tramitación del artículo 155 en el Senado, siendo el 20 de diciembre la fecha que se baraja para el llamamiento a las urnas.

La convocatoria de elecciones como alternativa a la DUI ya se planteó en el encuentro que mantuvieron los independentistas este miércoles, acordando en este sentido que se iniciasen contactos con el Gobierno de España y se propusiese al lendakari, Iñigo Urkullu, como mediador entre ambas partes. Tras la reunión celebrada la mañana de este jueves, dicha posibilidad ha ganado fuerza, por lo que desde la Generalitat se ha anunciado en un primer momento que Puigdemont comparecería a las 13:30, después se ha retrasado a las 14:30 y finalmente se ha anulado.

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La amenaza de ERC

Ante la trascendencia de esta nueva hoja de ruta, las ejecutivas del PDeCAT y ERC se reunieron este mediodía y, según afirman fuentes del PDeCAT, uno de los temas tratados en la cita fue la ruptura de Junts pel Sí por la honda decepción de los republicanos.

En este sentido, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) llegó a amenazar a Puigdemont con abandonar el Gobierno si convocaba elecciones. La ejecutiva del partido de ERC, reunida de urgencia este mediodía, optó por salir del Govern si el 'president' Carles Puigdemont convocaba elecciones, según explican fuentes de la formación política republicana.

El 'vicepresident' de la Generalitat, Oriol Junqueras, su mano derecha en el partido, Marta Rovira, y el consejero de Asuntos Exteriores, Raül Romeva, llegaron esta tarde al Palau de la Generalitat y se reunieron con Puigdemont para comunicarle la inminente crisis de Gobierno. Rovira y Junqueras entraron por la puerta de atrás del Palau una vez que recibieron el mandato del partido, en un intento desesperado de que el 'president' no convocara elecciones autonómicas. De todos modos, miembros de ERC aseguran a este diario que el rechazo a la convocatoria de elecciones no ha sido unánime en la formación, y es que algunos de sus 'consellers' también ven con buenos ojos dicha opción.​

Además, diputados del PDeCAT como Jordi Cuminal o el de Junts pel Sí Albert Batalla han anunciado que dimiten del partido y entregan el acta, ante lo cual la fragilidad del frente independentista se ha precipitado en las últimas horas.

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Por otra parte, cabe señalar que a la cita celebrada este jueves han acudido la presidenta del Parlament, Carme Forcadell, y varios miembros de Junts pel Sí, pero en ningún momento han participado los políticos de la CUP. Se trata de una ausencia importante, puesto que dicha formación ha abogado desde el 1-O por una declaración unilateral de independencia, rechazando así la posibilidad de que se convocasen elecciones como alternativa.

Cs siempre ha apoyado la aplicación del 155, pero también es partidario de esos comicios que, además, pueden serle favorables

En lo que se refiere a los partidos de ámbito estatal, tanto miembros del PSOE como de Podemos han pedido a Puigdemont en los últimos días que convoque comicios. "Unas elecciones en Cataluña no resolverán el problema, pero dificultarán aplicar el 155 y darán más tiempo para buscar el diálogo", tuiteó este jueves el propio Pablo Iglesias. A esto se suma que los senadores socialistas han presentado una enmienda en la comisión senatorial donde se debate la aplicación del 155 para que, en el caso de convocatoria de elecciones, se detenga el mismo, lo que permitiría cumplir con la exigencia de los independentistas. Por último, desde Ciudadanos siempre han apoyado la aplicación del 155, pero también son partidarios de esos comicios que, además, pueden serles favorables, según todas las encuestas.

De todos modos, en lo que se refiere al Gobierno, son muchas las voces populares que han asegurado en los últimos días que la convocatoria de elecciones no implicaría detener el artículo 155. Así lo han afirmado, entre otros, el ministro de Justicia, Rafael Catalá, el de Fomento, Íñigo de la Serna, y el vicesecretario de Comunicación del PP, Pablo Casado. "Me temo que ya han cruzado el Rubicón, están viendo cómo salen del lío por una gatera que evidentemente la legislación no les va a facilitar", llegó a decir ayer este último. De todos modos, todavía está por ver la reacción de La Moncloa tras las últimas noticias que llegan desde Cataluña.