Bescansa alerta de que Podemos no tenga "un proyecto político para España"

Las voces críticas en Unidos Podemos respecto al discurso y la estrategia que está siguiendo el partido en la crisis catalana han dado un golpe sobre la mesa, pasando de alertar en privado sobre las posibles consecuencias electorales de este posicionamiento a hacerlo en público. El cese de la diputada de Podemos, Carolina Bescansa en la Comisión Constitucional del Congreso, que será sustuida por la portavoz del partido, Irene Montero, ha precipitado esta suerte de rebelión interna en lugar de atajarla, como se pretendía desde la dirección. Bescansa criticó este miércoles en los pasillos de la Cámara Baja que su formación no tenga "un proyecto político para España" en pleno desafío independentista en Cataluña y ha asegurado que esta sensación es compartida por muchos de sus compañeros.

"A mí me gustaría un Podemos que le hablase más a España y a los españoles y no solo a los independentistas", lamentó en los pasillos del Congreso. Bescansa recordó que Podemos es un partido "español" y "estatal" pero, sin embargo, "se ha olvidado de contarlo" en la crisis política que se vive en Cataluña. A su juicio, Podemos no explicó que no apoyará una independencia de Cataluña "ni por la vía unilateral, ni por la bilateral". Preguntada si considera que su relevo en la Comisión se debe precisamente a su posición política sobre Cataluña, Bescansa no cree que esa sea "la cuestión" sino el hecho de que falte un "proyecto político para España".

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Iván Gil

El grupo de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea sustituyó la semana pasada a Carolina Bescansa como vocal en la Comisión Constitucional del Congreso, órgano al que en principio corresponderá el estudio de la reforma de la Constitución, puesto que ocupará ahora Irene Montero. La propia portavoz justificaba el relevo porque “se va a empezar a debatir una reforma de la Constitución” y “los miembros de la dirección [a la que Bescansa dejó de pertenecer tras desmarcarse de errejonistas y pablistas en Vistalegre II] debían estar ahí".

Desde Izquierda Unida, el coordinador federal, Alberto Garzón, también ha comenzado a desmarcarse públicamente de la línea oficial que ha impreso la dirección del grupo confederal. En una reciente entrevista con este diario, el líder de IU advertía: “Hay gente que cuando hablamos de Estado plurinacional no entiende que el rebrote nacionalista catalán empuja al español y viceversa. Se alimentan mutuamente y eso lleva a que las cuestiones sociales se aparquen”. Para el líder de IU el discurso debe ser "queremos trabajo y no banderas”, advirtiendo que las clases populares no son independentistas.

Esta tarde Unidos Podemos celebrará una reunión del grupo parlamentario confederal en la que se calibrarán los apoyos a la línea oficial del partido y a los que demandan un giro de guion. Bescansa ha sido la primera en romper el silencio y tratar de encabezar a los críticos para provocar un giro discursivo que evite, según sustienen, un descalabro electoral que vienen reflejando diferentes sondeos, hasta el punto de situar a Podemos como cuarta fuerza por detrás de Ciudadanos. Cunde la sensación entre estas voces críticas de que "lo que se gana en Cataluña se pierde en el resto de España".