Diez hitos que marcaron el referéndum: el abrazo a un Mosso y el pelotazo en un ojo

Golpes, choques entre cuerpos y fuerzas de seguridad y algún abrazo que otro. La larga jornada de votación celebrada este domingo en Cataluña en el marco del referéndum declarado ilegal deja numerosos momentos de tensión, una insólita votación con 92 centros clausurados por Interior y 319 por los Mossos y, sobre todo, muchas y muy poderosas imágenes.

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Las urnas llegan en bolsas

Los votantes madrugaban, como había recomendado la plataforma independentista Escoles Obertes. Pero también la logística, el gran misterio que preservaba la Generalitat.

Antes del amanecer, la tensión y los paraguas de unas 200 personas se apostaban en la puerta de la Escola Llacuna, en la calle Pallars del Poblenou, en Barcelona. No se podía entrar en la escuela pero quedaba gente dentro. Algunos de los concentrados explicaban a este periódico que cerca de un centenar de personas habían dormido en el centro y algunos eran menores, como explica un padre que se iba a llevar a sus hijos a casa antes de que dieran las 7.00.

Pasado cuarto de hora, un Nissan gris para en la calle Llacuna, pone los intermitentes y dos hombres bajan con dos bolsas grandes que contienen las urnas. Todo bajo la atenta mirada de dos agentes de los Mossos y entre los aplausos de la gente. Desvelada la incógnita de la llegada de las urnas, solo quedaba que el Gobierno de la Generalitat implantara horas después por sorpresa un censo universal para que 5,3 millones de catalanes pudieran votar, aunque fuera sin sobres y con papeletas imprimidas en casa para introducirlas después en la urna traslúcida, que según el portavoz del Govern, Jordi Turull, "garantiza el secreto de voto".

La exposición de los menores

Frente a la precaución del padre de Poblenou, otras familias decidieron salir a la calle con sus hijos, a pesar de los disturbios que podían desatarse. Y el Ministerio del Interior no dudó en denunciar la exposición de los menores ante los riesgos de días de tensión e incertidumbre, tanto a través de Twitter como en declaraciones públicas, en línea con el debate abierto en las últimas semanas sobre la presencia de niños en concentraciones favorables al referéndum. Esta niña subida a hombros de su padre grita"¡fuera, fuera!" junto con otros manifestantes a las puertas de un colegio electoral, mientras una patrulla de policías nacionales se acercan al punto de votación.

El titular de Interior, Juan Ignacio Zoido, ha hecho alusión a la presencia de menores a lo largo de la jornada y ha denunciado que en este "paripé irracional", "están dispuestos a utilizar a mayores y a niños". También la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha criticado que el independentismo haya decidido "movilizar a sus partidarios para imponer sus pretensiones, usando a niños y personas mayores sin ningún límite". Y el propio presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha citado el "adoctrinamiento de niños" en la enumeración de situaciones vividas durante el referéndum, por las que culpa a "quienes han promovido la violación de la legalidad".

La mujer herida

Una de las primeras fotos-denuncia que circulaban por WhatsApp era la de esta mujer de edad avanzada herida y ensangrentada en unas escaleras del colegio Freire del barrio de Roquetes de Barcelona, punto de votación del referéndum de este domingo. Los testigos han asegurado que diversos agentes lograron entrar en el centro y se llevaron las urnas y las papeletas. Al tiempo, el rostro de otra mujer con una herida en la cabeza comenzaba a circular y dar idea de las consecuencias de las intervenciones de la Guardia Civil y la Policía Nacional en los colegios para recoger las urnas, ante la pasividad de los Mossos en el cumplimiento del mandato de impedir el referéndum.

El agente tumbado por un sillazo

La tensión en el colegio Ramón Llull se palpaba en el ambiente. Decenas de independentistas se situaban a la puerta de este centro de votación para impedir el acceso a los agentes de seguridad que pretendían requisar las urnas.

En este vídeo puede apreciarse cómo, tras intentar entrar con cizallas y objetos punzantes, un agente de policía cae redondo al suelo tras recibir un sillazo de uno de los vecinos que allí se encontraba.

El pelotazo en el ojo

De acuerdo con el más reciente balance del Departamento de Salud de la Generalitat, que reportaba 844 heridos o contusionados durante la intervención de las fuerzas y cuerpos de seguridad en los colegios, hay dos personas que presentan una mayor gravedad. Es el caso de un hombre que sufría un paro cardiorespiratorio y otro que recibía un pelotazo de goma en un ojo y tuvo que ser sometido a una cirugía de urgencia en el hospital Sant Pau de Barcelona.

Se trata de uno de los momentos más tensos de la jornada, ocurrido hacia las 10.30 de la mañana, cuando los agentes han disparado sus escopetas de pelotas de goma, en trayectorias bombeadas, para mantener una línea de seguridad y poder abrir el paso a las furgonetas en las inmediaciones de la escuela Ramón Llull de Barcelona. Algunas de las personas concentradas han mostrado en las redes sociales las pelotas de goma que ha disparado la Policía, las primeras que se utilizan en Cataluña desde que el 30 de abril de 2014 el Parlament prohibió su uso a los Mossos d'Esquadra y policías locales de Cataluña.

Los jugadores del FC Barcelona

Lo ocurrido en Cataluña este domingo no ha dejado indiferentes a los jugadores del FC Barcelona, que además protagonizaban otro de los momentazos del día, al decidir a menos de una hora del comienzo previsto del partido que jugarían contra UD Las Palmas a puerta cerrada, para desgracia de los aficionados que se quedaban a las afueras del Camp Nou.

Xavi Hernández se pronunció temprano sobre los incidentes que se estaban produciendo, que calificó de "vergüenza". "Lo que está sucediendo hoy en Cataluña es una vergüenza. Es inadmisible que en un país democrático la gente no pueda votar", dijo Xavi a través de un vídeo que colgó en Twitter el periodista de 'RAC1' Jordi Basté. Horas antes, otra leyenda del barcelonimos y de la selección español, Carles Puyol, también se había pronunciado sobre lo que está sucediendo este domingo en Catalunya. "Votar es democracia!", tuiteó Puyol. Y no podía faltar Gerard Piqué, que votaba pasado el mediodía y compartía en Twitter la instantánea.

El jugador azulgrana ya se había prounciado esta semana. "Desde hoy y hasta el domingo, nos expresaremos pacíficamente. No les demos ninguna excusa. Es lo que quieren. Y cantemos bien alto y bien fuerte", dijo el pasado jueves.

Policía y Guardia Civil vs. Mossos

Varios vídeos difundidos a través de la red social Twitter muestran cómo agentes de los Mossos d'Esquadra y de la Guardia Civil se encaraban durante algunas de las actuaciones realizadas por las fuerzas de seguridad del Estado para impedir la celebración del referéndum. Estas escenas de tensión, que se han difundido por las redes sociales, se han producido en varios puntos de Cataluña, como Castellgalí (Barcelona) o Sant Joan de Vilatorrada (Barcelona), donde agentes de la Benemérita trataban de abrirse paso entre decenas de concentrados frente a los colegios electorales.

El Gobierno catalán animó a los ciudadanos a denunciar a la Policía Nacional y a la Guardia Civil por las agresiones durante los desalojos de los colegios elctorales. Para ello, abrió un servicio de ayuda telemática a "víctimas de delitos" facilitando un teléfono de línea 900.

Guardias civiles apedreados en Sant Carles de la Ràpita

Pero también los agentes de la Guardia Civil han sufrido ataques. El Ministerio del Interior difundía un vídeo con la salida de los agentes de la Guardia Civil de Sant Carles de la Ràpita (Tarragona) apedreados por unas 20 personas, mientras que fuentes sanitarias aseguran que hubo 45 heridos tras las cargas en el pabellón ferial. En el vídeo se ven dos coches del grupo de reserva y seguridad (GRS) de la Guardia Civil escapando de forma apresurada de las calles de esa localidad.

De hecho, varios agentes se montan en marcha en uno de los vehículos mientras un grupo de decenas de personas les persigue a pocos metros de distancia lanzando piedras. Algunas de ellas pasan a pocos centímetros de los agentes mientras se montan en los vehículos.

Las lágrimas de los Mossos

El tuitero Boris Llona registraba una de las imágenes más empáticas, y quizá la menos dramática de la jornada, junto con la del joven que votó enrollado en una bandera de España en Lleida y fue aplaudido. Este uniformado se quedaba conmocionado después de la intervención de la Policía Nacional en el CAP de Cappont (Lleida) y comenzaba a recibir el abrazo de los civiles agolpados en la puerta del centro.

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E. Torrico Irene G. Peña