La lucha contra el terrorismo yihadista: 220 operaciones y 723 detenidos desde el 11-M

Trece años, 220 operaciones y 723 detenidos después, el terrorismo yihadista golpeó de nuevo a España. Desde el 11 de marzo de 2004, con la explosión de cuatro trenes en Madrid que mataron a más de doscientas personas, el país no sufría ningún otro ataque terrorista de carácter yihadista. Sí es verdad que desde 2015, con el ataque al semanario satírico Charlie Hebdo en Paris, la vigilancia y las intervenciones de las fuerzas de seguridad habían aumentado.

El número de operaciones contra el yihadismo y las detenciones en cada una de ellas se intensificaron a partir del año 2014, según los datos que publica el Ministerio del Interior. Durante los tres últimos años, el número de operaciones se ha situado en 36 cada año, la cifra más elevada del período analizado. Intervenciones que se han saldado con más de cincuenta detenidos en cada periodo.

España, como ya había avisado el Estado Islámico a través de sus canales de comunicación, estaba en el punto de mira. La tensión era máxima como demuestra que en los primeros ocho meses de 2017 se han desarrollado el mismo número operaciones antiyihadistas que en cualquier otro año anterior completo.

Cataluña, en concreto Barcelona y Cambrils, han sido el escenario de los ataques más recientes. De hecho, la provincia de Barcelona es la región con mayor número de detenciones y operaciones policiales contra el yihadismo desde el 2012.

Cambrils, en especial, es además un emplazamiento muy cercano a Salou. Ambas ciudades jugaron un papel relevante previo a los atentados del 11 de Septiembre en Estados Unidos. De hecho, en Salou, días antes del ataque, Mohamed Atta, el piloto del primer avión que se estrelló contra las Torres Gemelas, se reunió con Ramzi Muhammad Abdullah bin al-Shibh, un representa de Al-Qaeda con vínculos en la planificación del atentado.

De acuerdo al informe ‘Estado Islámico en España’, publicado por el Real Instituto Elcano, “el principal escenario de la movilización promovida en España por el Estado Islámico se encuentra en la provincia de Barcelona”. Además, en el mismo se señala a otra de las ciudades uniprovinciales con más radicales como es Ceuta: “si la atención se centra sólo en los detenidos de nacionalidad española su foco hay que situarlo entre jóvenes de segunda generación nacidos y residentes en Ceuta”.

Este elevado número de actuaciones se explica por la política preventiva que inició España después del 11 de marzo de 2004 en Madrid. “Responsables policiales y ministerio público optaron como enfoque preventivo por la anticipación de operaciones contra el terrorismo yihadista con el fin de desbaratar posibles atentados en fase de planificación o preparación”, destacan en el estudio. De hecho, según un informe de Europol, 'European Union terrorism situation and trend report', España es el tercer país que más arrestos realizó en 2016, tan sólo por detrás de Francia y Reino Unido.