Mas paga 360.000 € al lobby internacional que asesora a Somalilandia y Kosovo

El Gobierno catalán ha pagado ya 360.000 euros al think tank Independent Diplomat (ID) para intentar buscar aliados internacionales al proceso de independencia y para que el presidente de la Generalitat, Artur Mas, sea recibido por mandatarios extranjeros. Así lo reconoció ayer el portavoz del Gobierno catalán y consejero de Presidencia, Francesc Homs, en la Comisión de Asuntos Institucionales del Parlamento autonómico.

ID es una organización que asesoró al Gobierno de Kosovo en su proceso independentista. “Este proceso fue gestionado por la ONU, pero fue dirigido políticamente por el Grupo de Contacto, un pequeño grupo de seis países que han dominado la toma de decisiones a nivel internacional en Kosovo y en la región de Europa Sudoriental”, explica el propio lobby en uno de sus dosieres informativos. Así pues, fue Independent Diplomat quien suministró“información detallada, análisis y asesoramiento sobre las intenciones de las dinámicas dentro del Grupo de Contacto y los diversos organismos de la ONU involucrados (…) Uno de sus éxitos fue lograr que el primer ministro de Kosovo pudiera dirigirse al Consejo de Seguridad de la ONU por primera vez para hablar de la situación en su país, un privilegio que previamente había sido negado a los representantes de Kosovo”.

El lobby contratado por Mas asesora también al Gobierno de Somalilandia, un territorio desgajado de la antigua Somalia y que pretende su reconocimiento como estado independiente. Desde noviembre del 2009 hasta julio del 2011, trabajó asimismo para la República de Sudán del Sur. Este think tank asesora, igualmente, a la Coalición Nacional de la Revolución Siria y a las fuerzas de la oposición en aquel país para introducirlas en los círculos de decisión del Gobierno de los Estados Unidos y la ONU. Desde 2011, trabaja para el United States Tamil Political Action Council (USTPAC), organización opositora al Gobierno de Sri Lanka, asesorándolo en la defensa diplomática y la estrategia política. Asimismo, ayuda desde 2006 a la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) en el proceso de autodeterminación del Sáhara Occidental.

Quién está detrás de ID

El director ejecutivo de ID es Carne Ross, mientras que el “jefe de operaciones (es decir, su segundo), es Mark Koenig. Ross es un exdiplomático británico que llegó a redactar los discursos del Secretario de Relaciones Exteriores de Reino Unido. En 2004 abandonó la diplomacia y fundó ID, tras tener que declarar después del escándalo de las supuestas “armas de destrucción masiva” de Irak (su cometido en los últimos años había sido la negociación de varias resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU sobre el control de armas de destrucción masiva). Koenig, por su parte, fue hasta hace sólo unos meses el director de Finanzas y Administración de la Federación de la Comunidad Judía de San Francisco, una fundación que mueve 150 millones de dólares anuales.

“Ellos van a lo suyo. Resulta que los presupuestos catalanes para el 2014 contienen severos recortes en deportes o cooperación, pero doblan la dotación para las embajadas y para el Diplocat [organismo oficial que controla la acción exterior de la Generalitat]”, explica a El Confidencial Santi Rodríguez, portavoz adjunto del PP en el Parlamento catalán. Carina Mejías, diputada de Ciutadans, tampoco ahorra críticas: “Artur Mas está utilizando la acción exterior para internacionalizar el conflicto. A promover la independencia se han ido 15 millones de euros. Y ahí entra la financiación de las embajadas, los abultados sueldos de los embajadores y el pago a Independent Diplomat. Baste decir que el presupuesto en esta área creció este año un 77%”, señala Mejías a El Confidencial.

Los misteriosos 16,8 millones

Tanto PP como Ciutadans también preguntaron a Homs sobre una partida de 16,8 millones de euros que el año que viene dará el departamento de Presidencia al Centro de Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (CTTI), el organismo que ampara el Cesicat, es decir, el órgano que Mas quiere convertir en la Agencia de Seguridad Nacional (ASN) o, dicho de otro modo, en el CNI catalán.

“Nos tememos que ese dinero se destine a crear la agencia de espionaje. De hecho, Homs nos dijo que no era verdad que se hubiese creado la agencia, pero no nos dan ni una explicación más. Lo que queremos saber es a qué se van a destinar esos 16,8 millones, si es para montar el sistema de espionaje o no. Y que digan algo sobre los documentos que están saliendo a la luz”, señala Carina Mejías.

Y Santi Rodríguez explica que “le pregunté directamente si es verdad que se quiere crear esa agencia, pero el consejero lo negó con un gesto, pero no de viva voz, de modo que no queda reflejado en el acta. Le pedí explicaciones sobre los documentos que se habían publicado y ahí sí le arranqué la confirmación del documento que compara al Cesicat con otras agencias de espionaje. Respecto al dinero, eludió responder claramente a la pregunta de si los 16,8 millones eran para la ASN. Pero es extraño que estos recursos pasen al CTTI. Homs tuvo la oportunidad de desmentir las informaciones publicadas pero no lo hizo”. En lo único que se mostró tajante el portavoz del Gobierno catalán fue en desmentir que la Generalitat hubiese espiado a agitadores sociales y líderes del 15-M, según se reflejaba en algunos documentos filtrados durante las pasadas semanas.