Mas 'roba' a Montoro un inspector para montar su Hacienda y le paga como a un conseller

El presidente de la Generalitat catalana, Artur Mas, ya tiene a su hombre de Hacienda, el que ha de montar la estructura para que la Hacienda de Cataluña se sacuda de encima a la española. Y, para ello, nadie mejor que alguien que conozca los entresijos del Ministerio que encabeza Cristóbal Montoro. Así fue como llegó a Joan Iglesias, un inspector de Hacienda que hasta ahora trabajaba en la Delegación de la AEAT en Barcelona.

Iglesias era, hasta hace unos días un inspector adscrito a la Unidad Regional de Inspección (URI) de la Delegación de Hacienda de Barcelona pero nunca había tenido cargos en la Administración, por lo que su nombramiento ha causado sorpresa entre sus compañeros. Lo más curioso, sin embargo, es que recalará en el Departamento de Presidencia con un salario asimilado al de secretario general más un complemento de 23.410,40 euros anuales, lo que equipara su sueldo al de un consejero autonómico, ya que se situará en casi 108.000 euros anuales.

El principal cometido de Iglesias será “participar en órganos consultivos o asesores que tengan como finalidad preparar las estructuras tributarias financieras que Cataluña necesita para implementar en el desarrollo del mandato del Parlamento de Cataluña de 23 de enero de 2013”. Es decir, desarrollar la Hacienda catalana al margen de la española, conforme la resolución parlamentaria aprobada por la cámara autonómica y que el Gobierno central ha recurrido ante el Constitucional.

Pero también deberá asesorar al presidente de la Generalitat “en las cuestiones y asuntos relacionados con la definición de un modelo de Administración Tributaria que permita la gestión, liquidación, inspección, recaudación y revisión de la totalidad de los impuestos y tributos que se aplican en Cataluña”. Además, colaborará con el consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, en asuntos relacionados con el desarrollo de los procedimientos internos adecuados “con el fin de asesorarle sobre la coordinación de la actuación de los diferentes organismos con competencias de gestión, liquidación, inspección, recaudación y revisión de los impuestos y tributos propios de la Generalitat y de los impuestos estatales transferidos”. 

Su misión será también colaborar con el consejero de Presidencia, Francesc Homs, “en el diseño de las estrategias más convenientes para coordinar la actuación de las diferentes administraciones públicas con competencias en materia de gestión, liquidación, recaudación o revisión de los tributos que se aplican en Cataluña”. Por si fuera poco, también ha de “asesorar y hacer propuestas en relación con el sistema de ingresos de la Generalitat” y fomentar la participación “de los sectores profesionales y académicos de Cataluña en el diseño del modelo de Administración Tributaria de Cataluña”.

Los que le conocen, califican a Iglesias como un hombre reservado y un estudioso. En el 2011, ganó el primer Premio Estudios Financieros, que otorga el Centro reestudios Financieros (CEF), con el trabajo La regularización de la defraudación tributaria constitutiva del delito contra la Hacienda Pública, por lo que se llevó 9.000 euros. Había concurrido al concurso bajo el seudónimo de Galileo 2.0. Muy vinculado desde hace años al CEF, escribe habitualmente en su revista y se ha mostrado contrario a la amnistía fiscal que había impulsado Cristóbal Montoro.