Trias le pide a Bonet que siga como presidente de Fira de Barcelona

El alcalde de Barcelona, Xavier Trias, le ha pedido a Josep Lluís Bonet que siga como presidente de Fira de Barcelona cuando acabe su mandato a finales de este año, según han explicado fuentes del empresariado catalán.

Bonet, presidente de Freixenet, ocupa a su vez la presidencia de Fira de Barcelona, la entidad ferial más importante de España. El final de su mandato había desatado las aspiraciones de tres candidatos pero el Ayuntamiento prefiere que Bonet siga en el cargo cuatro años más, tal y como permiten los estatutos de la institución.

El mandato de Josep Lluís Bonet acaba a finales de este año. El Consell General de la Fira que se celebrará este mes de julio no tratará esta cuestión que se aplazará a diciembre. Fuentes de Fira han declinado hacer declaraciones, pero las fuentes empresariales antes mencionadas han señalado que Bonet está estudiando prolongar su mandato otros cuatro años.

El aval a la figura de Bonet es también un pleno apoyo por parte del Ayuntamiento de Barcelona, partícipe en la Fira, de la gestión del actual director de Fira de Barcelona, Agustí Cordón, que se ha apuntado éxitos como la renovación del Mobile World Congress, la feria de móviles más importante del mundo.

Tres candidatos en busca de apoyos

Hasta ahora había tres candidatos maniobrando para llegar a la presidencia de la Fira. El director general de Damm, Enric Crous; el presidente de la firma de head hunters Seeliger y Conde, Luis Conde; y el exdelegado especial del Gobierno en el Consorcio de la Zona Franca, Enrique Lacalle.

Los tres son miembros del consejo de la Fira, pero para los tres su cargo expira este año por lo que tendrán que dejar el consejo al ser la segunda vez que han sido escogidos. De no poder optar a la presidencia, tendrán que dejar de estar vinculados a la entidad ferial.

La búsqueda de apoyos que los tres habían iniciado ha servido de poco. Todo apunta a que tanto la Generalitat, que tiene la última palabra, como el Ayuntamiento, ambos controlados por CiU, abogan por la continuidad de Bonet. Ahora todo queda en las manos del actual presidente.