Guerra por el poder en los círculos independentistas catalanes

El independentismo catalán no es lo que aparenta. Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) es la formación con representación parlamentaria que apuesta abiertamente por la independencia. Pero en las próximas elecciones catalanas, otros grupúsculos tratan de llevarse una parte del pastel. Desde algunos círculos, estas corrientes son calificadas de “independentismo friki”, pero a pesar de su apariencia, los distintos grupos están más divididos que nunca, aunque tienden a polarizarse en dos formaciones: la primera, liderada por el ex presidente del Barça, Joan Laporta, que se presenta con Solidaritat Catalana per la Independència (SI); la otra es Reagrupament y está liderada por el ex consejero Joan Carretero, escindido de ERC.

Estas dos últimas no han llegado a un acuerdo para presentarse ante los electores bajo el paraguas de una opción alternativa a ERC “por problemas de liderazgo y en la elaboración de las listas”, tal y como aseguran a El Confidencial dirigentes de SI. “Hemos intentado alcanzar un acuerdo entre Joan Laporta y Joan Carretero para que en las listas estuvieran representados de forma proporcional dirigentes de ambas formaciones, pero al final iremos por separado aunque en los próximos tres meses hasta las elecciones de noviembre es posible que se produzcan más reuniones”, explican las mismas fuentes.

Tanto SI como Reagrupament están “convencidos” de que en Cataluña “existe una mayoría social que quiere ahora la independencia de Cataluña ante el expolio de España” y sus dirigentes están más preocupados por hablar de independencia sin detallar cuáles van a ser sus principales ejes programáticos en economía, protección social, infraestructuras, seguridad, innovación, empleo, educación o inmigración. “Todavía no hemos elaborado los programas”, reconocen desde SI. Lo que sí dicen desde Reagrupament es que “el acuerdo unitario con Joan Laporta no ha sido posible porque el ex presidente del Barça nos propuso someternos a una lista única de Solidaritat”, aseguran las mismas fuentes. En Reagrupament, que cerró su lista durante una asamblea celebrada en julio, reprochan a Laporta que pretenda "disolver" la formación para integrarla en Solidaritat Catalana. En la formación del ex mandatario azulgrana rechazan las "listas cerradas" de Reagrupament y son partidarios de que ambas formaciones se sometan a un proceso de primarias el próximo sábado 4 de septiembre.

En el trasfondo de la unión imposible entre ambas formaciones pesa también la fuerte personalidad de sus dos líderes que buscan acaparar los focos de la atención pública y con un gran protagonismo mediático sin apenas un discurso bien razonado en el que expliquen por qué Cataluña y sus siete millones de ciudadanos se beneficiaría si se convierte en un Estado segregado de España. Laporta quiere mantener su tirón como ex presidente azulgrana, en el que se ha caracterizado por actos públicos muy pasionales desde que anunció su intención de dedicarse a la política. Y la de Joan Carretero, que con su segregación de Esquerra Republicana fue pionero en inaugurar una alternativa independentista al margen de los grandes partidos.

Los apoyos de Laporta

Lo cierto es que la imagen de “unidad” del independentismo catalán ya se ha roto antes de las elecciones, donde el votante que opte por esta vía política de Cataluña segregada de España podrá escoger entre ERC, SI y Reagrupament. “Sería bueno unirnos, pero en estos momentos es imposible”, confirman desde el partido de Laporta. A la espera de esa unión, que quizás nunca se produzca, Solidaritat Catalana sigue buscando apoyos entre grupúsculos independentistas. Las formaciones que se han unido al proyecto de ex presidente del Barça son el Partit Republicà Català, Els Verds-Alternativa Verda (lo que ha provocado las acerbas críticas de Els Verds-Esquerra Ecologista, que ha denunciado a Laporta por especular con terrenos en el cinturón de Barcelona) y el grupo de empresarios Cercle Català de Negocis (CCN), al que se ha sumado también el ex presidente de Reagrupament, Oriol Sallas. Según Laporta, “la adhesión de estas entidades que se suman a las 17.000 personas que nos apoyan demuestra la transversalidad de la coalición”, que celebrará elecciones primarias para escoger a sus candidatos a las elecciones catalanas de otoño.

"Las cosas son como son", asegura Laporta en relación a la falta de acuerdo con el partido presidido por Joan Carretero, aunque ha reiterado que ambas formaciones exploran otras formas de colaboración para encontrar "estrategias paralelas confluyentes". Solidaritat celebrará las primarias el próximo sábado 4 de septiembre bajo un sistema de votación en el que los militantes eligen directamente qué candidatos forman parte de las listas electorales. Laporta afirma que en la manifestación del pasado 10 de julio salieron a la calle 1,2 millones de personas a "pedir la independencia", lo que demuestra –en su opinión- que existe “una masa social suficientemente amplia como para que exista más de un partido que defienda esta opción en Cataluña”.

El ex presidente del Barça tiene la intención de cumplir su compromiso con la ciudadanía y permanecer los cuatro años en el Parlament como diputado si sale elegido (con el sueldo que le toca por cumplir este cargo público), aunque ha matizado que su prioridad es poder gobernar.

Laporta critica que los políticos no pongan sobre la mesa el debate sobre la independencia y se nieguen a dar explicaciones a los ciudadanos en temas como el "expolio fiscal" de Cataluña o los casos de presunta corrupción. Solidaritat Catalana hizo público ayer que el doctor Moisès Broggi cerrará su lista. Broggi, que con anterioridad estuvo adherido a Reagrupament, manifestó que es un "honor" formar parte del proyecto de Laporta. La formalización de un partido político por parte del ex presidente azulgrana ha supuesto la disolución de varias agrupaciones territoriales de Reagrupament, cuyos miembros han preferido integrarse en las filas de Solidaritat Catalana. En ellas figuran también el hasta hace pocas semanas diputado de ERC, Uriel Bertran, y el jurista y ex miembro del consejo nacional de Convergència i Unió (CiU) Alfons López Tena. Este último ha avivado más el fuego de la discordia con Reagrupament alegrándose de que no se haya podido conformar una candidatura única electoral con Solidaritat. “De todas formas hemos llegado a la conclusión en Solidaritat de que si nos presentamos por separado vamos a ganar más votos que si lo hacemos conjuntamente, aunque en el futuro podemos colaborar para llevar a cabo la independencia de Cataluña”, asevera López Tena.

Otra de las circunstancias que se han producido y que evidencian la fragmentación de las fuerzas independentistas catalanas es que Reagrupament busca también apoyos para concurrir a las elecciones al margen de Solidaritat. Así, el partido de Joan Carretero irá en coalición con Suma Independència, un grupo de profesionales independientes.