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La marcha de Castells debilita al sector más catalanista del PSC de cara a las elecciones
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HABÍA PEDIDO A MONTILLA QUE SE DISTANCIARA DEL PSOE

La marcha de Castells debilita al sector más catalanista del PSC de cara a las elecciones

El presidente catalán, el socialista José Montilla, iniciará la campaña electoral tras las vacaciones de verano con las encuestas en contra y sin su número dos

Foto: La marcha de Castells debilita al sector más catalanista del PSC de cara a las elecciones
La marcha de Castells debilita al sector más catalanista del PSC de cara a las elecciones

El presidente catalán, el socialista José Montilla, iniciará la campaña electoral tras las vacaciones de verano con las encuestas en contra y sin su número dos y peso fuerte del partido en Cataluña, el actual conseller de Economía Antoni Castells. Quien negociara la financiación autonómica en el marco del nuevo Estatuto de Autonomía, el profesor que explica como si se tratase de un aula universitaria su plan de recorte y de austeridad de las cuentas públicas, ha decidido distanciarse de la actual cúpula del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC).

¿Por qué? A grandes líneas los que le conocen de cerca aseguran que Castells “había presionado en los últimos meses al propio José Montilla para que se distanciara del PSOE, sobre todo, después de ver algunas reacciones de los socialistas en el resto de España que no defendían el encaje de Cataluña en un país federal con más autonomía, como marcaba el nuevo Estatuto”, y que apoyaban los recortes que finalmente se han producido tras la sentencia del Tribunal Constitucional.

Castells representa el ala más catalanista del PSC, junto con las actuales consellers Montserrat Tura (Justicia) y Marina Geli (Sanidad) y el de Educación, Ernest Maragall. Lo que ha denunciado Castells, como justificación para no ir en las listas por Barcelona en las autonómicas de otoño, es que “los 25 diputados del PSC en Madrid no tengan autonomía propia ante determinadas cuestiones”. Un ejemplo: Castells se quedó en minoría en la ejecutiva del partido cuando denunció que los diputados del PSC propiciaran en el Congreso un pronunciamiento acorde con la resolución del Parlamento catalán en defensa del texto del Estatut, rompiendo, si fuese oportuno, la disciplina de voto del PSOE.

“Entre Cataluña y el PSOE han prevalecido los equilibrios con el PSOE”, asegura Castells. Y es esa falta de criterio propio frente a Madrid de los socialistas catalanes, a la hora de defender los intereses de Cataluña frente a los que defiende el PSOE de igual forma para todo el Estado, lo que ha distanciado a Castells. Un destacado miembro socialista en Barcelona asegura a El Confidencial que, “con la decisión de Castells, habrá que replantearse las bases del futuro del PSC: mayor autonomía de decisión o dependencia de las tesis del PSOE”.

Lo cierto es que la deriva hacia postulados más catalanistas, incluso nacionalistas, de José Montilla –en la defensa del Estatuto íntegro y oponiéndose frontalmente a la sentencia del Constitucional- pueden costarle los votos de los catalanes nacidos de la inmigración. Pero ni esos guiños más catalanistas, por ejemplo al conceder Montilla libertad de voto a los diputados para votar a favor o en contra de las corridas de toros en Cataluña, han sido suficientes para mantenerle en la próxima carrera electoral.

El ‘enigma Chacón’

Como contrapartida ideológica a Castells, dentro del PSC, está la ministra de Defensa Carme Chacón, miembro de la ejecutiva catalana, y defensora a ultranza de la política del PSOE y de José Luis Rodríguez Zapatero. “Chacón cada vez tiene más apoyos entre los compañeros catalanes, pero todavía es una desconocida porque sus intereses están en progresar la política española no en Cataluña”, afirman las mismas fuentes socialistas consultadas.

Castells no se retira de la política. De hecho, su decisión supone un toque de advertencia: “Es necesario que el PSC sea capaz de aglutinar una mayoría social en Cataluña que no le haga depender de formar tripartitos (con los independentistas de ERC y los ecosocialistas de ICV) para gobernar y que sea un complemento de los nacionalistas de CiU”, aseguró ayer en declaraciones a Catalunya Ràdio. "Creo que tenemos que reconstruir un espacio político que sea mayoritario y lo tenemos que hacer a partir del PSC. Hablo de trascender, de agregar y de ampliar, de arrancar un proceso para evitar esta lenta pérdida de centralidad donde está situado el PSC".

Para Antoni Castells, el PSC debe aspirar a “aglutinar la mayoría de la sociedad catalana y ganar las elecciones”. Asegura que ayudará al president Montilla, pero también advierte de que el PSC debe pensar a medio plazo. Y ha criticado la forma de negociar del Ejecutivo español. Asegura que éste no respeta los pactos y no ha defendido lo suficiente el Estatut. Sin embargo, matizó que "no ir a una listas no significa que no vuelva a ser consejero", por lo que no ha descartado volver a liderar el área de Economía si se lo pide el próximo presidente de la Generalitat, que espera que se el presidente Montilla, aseveró en la emisora catalana.

Por otra parte, Castells se ha mostrado irritado con el presidente de CiU, Artur Mas, por que éste interpretara su decisión como una "estocada fuerte" para el PSC y ha denunciado su poca talla política."¡Qué poca categoría política que tiene Mas! Me decepciona siempre. Sólo ve a un palmo de su nariz", ha aseverado en tono contundente el conseller, que incluso ha tildado el comentario de Mas de "mezquino". Fuentes del PSC manifiestan a este diario que la decisión personal de Castells tiene el respeto del partido, que seguirá contando con el socialista como "un activo" dentro de la formación. Y reconocen la "gran tarea" llevada a cabo al frente de la Conselleria de Economía estos años, y ha puesto el ejemplo del acuerdo de financiación alcanzado con el Gobierno en el marco de la negociación del Estatut.

Nuevas exigencias de ERC e ICV

Los dos socios del Govern, ERC e ICV, reclamaron explicaciones al PSC sobre sus intenciones de pacto tras las elecciones, mientras que PP y Ciudadanos han atacado duramente a Castells y Montilla por el "naufragio" del partido al que pertenecen. El portavoz de ERC, Ignasi Llorente, ha asegurado este lunes que su partido "respeta al máximo" la decisión del conseller de Economía y ha interpretado que "demuestra que algo se está moviendo dentro del PSC a su alrededor". Y añadió que "a día de hoy este debate no deja de ser sólo palabras, porque todavía no hemos visto hechos". El portavoz republicano pidió tanto a los socialistas catalanes como a CiU que definan sus estrategias en Madrid para defender las reivindicaciones de la manifestación que se hizo el 10 de julio en Barcelona.

La portavoz de ICV-EUiA en el Parlament, Dolors Camats, ha considerado que la renuncia de Castells a ir en las listas del PSC demuestra que los federalistas tienen "poco margen" en la relación del PSC con el PSOE. En referencia a las opciones de pacto, Camats ha instado a los socialistas catalanes, también a Castells, a decir "que quieren ser cuando sean mayores". Además, ha opinado que el PSOE no es federalista, sino "autonomista de corto vuelo". La portavoz del PP en el Parlamento catalán, Dolors Montserrat, afirmó que "ante la evidencia del naufragio, ya se están produciendo las primeras fugas".    

El presidente catalán, el socialista José Montilla, iniciará la campaña electoral tras las vacaciones de verano con las encuestas en contra y sin su número dos y peso fuerte del partido en Cataluña, el actual conseller de Economía Antoni Castells. Quien negociara la financiación autonómica en el marco del nuevo Estatuto de Autonomía, el profesor que explica como si se tratase de un aula universitaria su plan de recorte y de austeridad de las cuentas públicas, ha decidido distanciarse de la actual cúpula del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC).

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