La ciudad con una de las catedrales más importantes de España: ambiente nocturno de diez y perfecta para ir en octubre

León es una de esas ciudades que saben seducir a primera vista. Su catedral gótica, conocida como la Pulchra Leonina, es una joya que deslumbra a cualquier hora del día gracias a sus vidrieras de colores que llenan de luz mágica el interior. Pero más allá de este templo, considerado uno de los más bellos de España, la ciudad guarda un encanto especial que se disfruta con calma en sus calles, plazas y barrios cargados de historia.

Con más de 2.000 años a sus espaldas, León fue campamento romano, capital de un reino medieval y parada fundamental en el Camino de Santiago. Sus murallas, el imponente convento de San Marcos o la basílica de San Isidoro, donde descansan los reyes leoneses, hablan de un pasado monumental que se respira a cada paso. Caminar por la Calle Ancha hasta desembocar en la plaza de la Catedral es una experiencia obligada, mientras que la Plaza del Grano conserva ese aire medieval que recuerda a los mercados de antaño.

Si por el día la ciudad conquista por su patrimonio, al caer la tarde muestra otra de sus mejores caras. Los barrios Húmedo y Romántico se transforman en escenarios llenos de vida, donde las tapas se convierten en protagonistas. Cada consumición va acompañada de una tapa gratuita, una tradición que hace de León uno de los destinos gastronómicos más atractivos de España. Desde la morcilla hasta la cecina o el picadillo, cada bar ofrece su especialidad, haciendo del tapeo casi una ruta turística más.

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El Confidencial

El otoño sienta especialmente bien a León. Octubre trae temperaturas suaves que invitan a recorrer sus calles sin agobios y a disfrutar de su ambiente nocturno sin el frío del invierno. Además, es un mes en el que la ciudad acoge celebraciones como San Froilán, una de sus fiestas más tradicionales, con mercados, romerías y desfiles que llenan de color las calles.

León también sorprende por su capacidad de mezclar lo histórico con lo contemporáneo. La Casa Botines de Gaudí recuerda que el modernismo también dejó su huella en la ciudad, mientras que el MUSAC, con su fachada multicolor, ofrece un contrapunto de arte contemporáneo que atrae a visitantes de todas partes.

Quienes decidan quedarse más de un día encontrarán aún más alicientes: excursiones a Las Médulas, los paisajes de los Picos de Europa o la monumental Astorga, a poco más de media hora en coche. Pero incluso si solo se dispone de un fin de semana, León garantiza un viaje completo donde la cultura, la historia, la gastronomía y el ocio nocturno se dan la mano.