Disculpas, inversión e infraestructuras: Así contrarresta Moreno la crisis de los cribados

Juanma Moreno se ha puesto el mono de trabajo para intentar desactivar la crisis provocada por el error en el cribado del cáncer de mama. El presidente de la Junta se ha remangado y encabeza la respuesta a este terremoto que amenaza con complicarle el final de la legislatura. Y lo ha hecho por varias vías. La primera es el reconocimiento del fallo, un cambio inmediato en el protocolo para que se informe de forma automática a las mujeres cuya prueba no es concluyente, a diferencia de lo que ocurría hasta ahora. La segunda será la depuración de responsabilidades una vez que se averigüe a quién se puede achacar el fallo. Y la tercera pasa por recordar que la inversión sanitaria está en máximos, con una importante apuesta por las infraestructuras.

El jefe del Ejecutivo andaluz tomó el mando el pasado miércoles, cuando el error en los cribados había puesto ya contra las cuerdas a la consejera de Salud, Rocío Hernández. En una entrevista radiofónica habló de "manipulación sanitaria" precisamente para contraponer los fallos en el programa de prevención con el aumento del presupuesto sanitario en Andalucía. Desde entonces la exposición de la responsable del Servicio Andaluz de Salud ha ido reduciéndose y la del propio Moreno ha crecido.

Fue en la rueda de prensa del Consejo de Gobierno celebrada en las Reales Atarazanas cuando el barón popular avanzó que habría 22 inauguraciones de infraestructuras sanitarias hasta febrero. También tendrá tiempo, probablemente, de poner la primera piedra del tercer hospital de Málaga, uno de sus principales compromisos desde que llegó a San Telmo. Y en los seis días que han pasado desde aquel anuncio ya ha protagonizado dos de las citadas inauguraciones, la de un centro de salud en Torremolinos y un consultorio en Piedras Redondas (Almería).

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En la localidad almeriense, Moreno recordó que el gasto en infraestructuras sanitarias alcanza los 2.900 millones de euros en más de 1.800 obras de distinto calibre en los últimos años. En San Telmo creen que esta apuesta por remozar y construir nuevos centros de salud y hospitales no les luce, a pesar de que muchos son edificios largamente reclamados en las poblaciones donde están. Y muchos están pendientes incluso desde los tiempos del PSOE en la Junta de Andalucía. El caso de Piedras Redondas es paradigmático, ya que la primera piedra del consultorio inaugurado este lunes se puso en 2011, con María Jesús Montero como titular de Salud.

Entre los datos que destacan en la Junta estos días está el gasto en equipos oncológicos, que alcanzan los 157,4 millones entre 2019 y 2023, frente a los 29,9 millones que destinaron los socialistas entre 2014 y 2018. El aumento de la inversión es común en todos los departamentos de la sanidad pública andaluza (y también en las derivaciones a la privada) lo que ha hecho posible que el gasto sanitario se haya elevado hasta los 1.764 euro por habitante. Por primera vez está por encima de la media nacional y muy lejos de los peores años de recortes, como en 2014, cuando la Administración gestionada por el PSOE dedicó 979 euros por habitante.

"Es la comunidad que más aumentó la inversión sanitaria por habitante", expresan desde San Telmo, donde recuerdan que el presupuesto de Salud creció un 7%, cinco puntos por encima del incremento medio nacional. Estos sucesivos avances han tenido su eco en ampliaciones del cribado del cáncer de mama. Ahora llega a las mujeres de 49 a 71 años, pero bajo los mandatos del PSOE era sólo para las andaluzas de 50 a 65 años. Y el objetivo es llegar al intervalo de 45 a 75 años. También se ha puesto en marcha el cribado de cáncer de colon y el de cuello de útero.

El problema que denuncian los pacientes, los sanitarios y los partidos de la oposición es que la tardanza en los procesos asociados y los avisos ha crecido también en los últimos años. Esto responde a la falta de profesionales, como los radiólogos que se encargan de analizar las mamografías. Y es un problema que es común en toda España, como recuerdan los distintos portavoces de la Junta cada vez que tienen ocasión.

Moreno ha tomado las riendas de la crisis y ha pedido disculpas en cada intervención pública desde el pasado miércoles. Ese día blindó en su puesto a la titular de Salud para evitar "vaivenes" en una consejería tan relevante. Dos días después, en su participación en el foro de La Toja añadió que su intención es "depurar responsabilidades" una vez que la investigación interna aclare dónde se produjo el fallo. El Gobierno andaluz achaca el problema a un error de comunicación que ya no podrá repetirse al cambiar el protocolo. Y además el SAS está llamando a las 2.000 mujeres que no fueron avisadas en primera instancia.

Mientras el Gobierno andaluz se afana en solucionar esta crisis, la oposición eleva el tono y hasta Vox se suma al asedio habitual de la izquierda contra la gestión sanitaria de la Junta. Esto ocurre justo cuando la Fiscalía Superior de Andalucía ha admitido a trámite una denuncia de la asociación Defensor del Paciente y el Defensor del Pueblo Andaluz, Jesús Maeztu, ha puesto en marcha una investigación de oficio. El tercer varapalo puede llegar este martes si la Asociación de Mujeres con Cáncer de Mama (Amama), que hizo pública esta situación, lleva el asunto a los tribunales con una denuncia colectiva.