El éxito incontrolado de Málaga o cómo convertirse en una ratonera para su gente
Un accidente en uno de los accesos a la capital puso de manifiesto —otra vez— que la provincia crece sin plan y sufre unos servicios saturados e infraestructuras obsoletas. A ello se une la falta de casas para una población que no deja de aumentar
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2F71a%2F12e%2Fecb%2F71a12eecb5919d6f9a1d9b5088f5efa9.jpg)
Eran las 9:57 del miércoles cuando el departamento de Comunicación de la Diputación de Málaga informaba de que el pleno se retrasaba sin hora. Debería haber comenzado a las 9:00, pero el presidente, Francisco Salado, y otros diputados, estaban atrapados en el atasco que ese día colapsó la circulación en los accesos a la capital. Un accidente registrado a las 6:50 en el túnel de Cerrado de Calderón que generaba hasta 20 kilómetros de retenciones en la ronda Este y que reabría el debate sobre las comunicaciones de la provincia que experimenta el mayor aumento poblacional del país.
Pero este caos circulatorio, y la posterior exigencia de mejores infraestructuras, encierran muchas otras claves y lecturas. Porque Málaga se enfrenta al dilema de su futuro y a la supervivencia de su idiosincrasia. A las consecuencias de un crecimiento súbito, agravado por un mercado inmobiliario imposible y el encaje de los numerosos extranjeros que quieren residir en la zona. Una situación por la que el próximo 5 de abril se convoca los vecinos de la capital a la tercera manifestación contra el actual modelo de desarrollo.
La interminable caravana que alteró la rutina de miles de ciudadanos, avivó el enfrentamiento entre las administraciones —y partidos— por la situación de las infraestructuras y la ejecución de proyectos que no pasan de un anuncio o una tramitación inicial. Salado recriminó la "indolencia" del presidente Pedro Sánchez ante "el problema de la movilidad" y afirmó que esta circunstancia se está convirtiendo en una "tortura" para los malagueños.
"Creo que hay una clara estrategia del Gobierno de España, con tintes claramente políticos, para asfixiar a Málaga", denunció el también alcalde de Rincón de la Victoria, a quien respondió el subdelegado del Gobierno. Javier Salas, que en un primer momento trató de rebajar la gresca, puntualizó que se había tratado de un "accidente complejo" en un punto "muy complicado" y recordó que se trabaja en posibles alternativas para la ampliación de esta vía.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Ff04%2Fddf%2F624%2Ff04ddf624ee751da20f4a2d8dd1130e5.jpg)
El PP apuesta por la habilitación de un tercer carril que considera básico para reducir la congestión de una autovía cuyo tráfico ha registrado un incremento anual cercano al 9%. Esto es tres veces más que la media nacional. Y, mientras se acometen los trabajos, propone medidas transitorias, como el uso de arcenes, la gestión de los accesos o la puesta en marcha de unidades de respuesta rápida ante los alcances.
El Ejecutivo de coalición y la Dirección General de Tráfico (DGT), según critican los populares, no han respondido a estas sugerencias, por lo que ha planteado una pregunta parlamentaria en la que, entre otros aspectos, requiere información sobre la inversión comprometida para mejorar la circulación en esta autovía.
"Son ya siete años de Gobierno de Sánchez sin inversiones ni mejoras en materia de carreteras, pese al aumento demográfico y a que el tráfico no ha parado de crecer", ampliaba el foco la presidenta del PP de Málaga, Patricia Navarro, quien en las últimas fechas ha recordado el "abandono" del Ejecutivo central en materia de circulación. Salas, por su parte, elevó el tono al acusar de "sectarismo" a las administraciones gobernadas por los populares y les reprochó: "Lo único que se escuchan son ataques al Gobierno de España y no hablan de sus competencias".
Málaga es la provincia donde hay que hacer un mayor esfuerzo económico para comprar una casa nueva: el 74,6% de la renta disponible
Pero lo ocurrido esta semana, más que un problema puntual que genere más o menos ruido político, es un síntoma de lo que se avecina. El acceso a la capital por la ronda Este viene dando señales de saturación desde hace años y ejemplifica la evolución de una provincia que en un año ha crecido en 21.973 habitantes. Los 100.000 vehículos al día que circulan por esta autovía —mayoritariamente— de dos carriles hacen necesario reformular las conexiones por carretera. Sobre todo, porque se estima que Málaga supere la población de Sevilla en 2031, y la situación sólo puede empeorar si no se toman medidas.
Movilidad, agua y vivienda
La provincia corre peligro de colapsar por el éxito si su rápido desarrollo no viene acompañado de las infraestructuras y servicios necesarios. El anuncio del Ejecutivo de comenzar el ansiado proyecto del Tren Litoral —que debería aliviar la circulación en la Costa del Sol occidental— no ha aplacado las reclamaciones de unos alcaldes que exploran un concepto de movilidad con espíritu metropolitano. Representantes de 40 municipios redactaron un recetario que, entre otras fórmulas, proponía "mejorar, ampliar y crear las infraestructuras, el servicio y la gestión del transporte público a nivel provincial; incrementar los espacios y servicios de intermodalidad e impulsar la metrópolis policéntrica con proyectos de interconexión".
Fue el fruto de un encuentro del Foro Málaga Metrópolis Global que la Fundación Ciedes organizó en septiembre del año pasado y que ahondó en otras cuestiones estrechamente ligadas con la sostenibilidad de la provincia y un modelo económico que, aunque trabaja en su conversión en un hub tecnológico, es fundamentalmente turístico. Una de ellas, y aunque resulte extraño tras el carrusel de borrascas de las últimas semanas, es la escasez de las reservas de agua. No hace mucho que algunos embalses estaban por debajo del 10% de su capacidad, que se hablaba de traer barcos con reservas hídricas y que se aprobaban restricciones al consumo por la sequía extrema. Y todo ello, con 14,4 millones de visitantes que dinamizan la economía, pero que también tensionan servicios básicos y mercados.
El inmobiliario es el ejemplo más claro. La irrupción de los apartamentos vacacionales, el desfase entre la oferta y demanda de inmuebles o la escasez de vivienda pública han favorecido una escalada de precios inalcanzable para el malagueño medio. Y el último trabajo sobre el sector refleja esta situación. La firma de tasación Tinsa, en su informe Vivienda Obra Nueva 2025, ha señalado que Málaga es la provincia del país donde hay que hacer un mayor esfuerzo económico para comprar una casa nueva —el 74,6% de la renta disponible—. Mientras que la Estadística Registral Inmobiliaria del Colegio de Registradores de la Propiedad, Bienes Inmuebles y Mercantiles de España alertaba de que el precio del metro cuadrado en la capital creció en 2024 un 24,5% y se situó en 2.980 euros. Datos que hay que enfrentar con el hecho de que el sueldo más habitual del malagueño, según el último estudio del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA), es de 19.449 euros brutos.
Nos da vergüenza ver en qué han convertido el Centro y cómo se ha creado un ambiente en el que los guiris, se creen con derecho a todo, a hacer lo que les da la gana, se creen que todos estamos a su servicio y que nadie debe impedirles su gozo y disfrute...@malaga https://t.co/7YNBDNNMbb
— CentroAntiguoMálaga (@vecinosmalaga) March 9, 2025
El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Málaga, Daniel Pérez, ha cifrado en 35.000 los vecinos expulsados de la capital por la imposibilidad de acceder a una casa y muchos de ellos han tenido que buscar soluciones habitacionales en las áreas metropolitanas de la capital. Son, una parte, los que el miércoles quedaron atrapados en el atasco cuando se desplazaban a sus puestos de trabajo.
"¿Cómo puede ser que una pareja joven o un jubilado no puedan vivir en la ciudad en la que han nacido? Esto es un fracaso absoluto del modelo de ciudad", ha lamentado Pérez, quien critica que algunos barrios se han convertido en "decorados" donde "se han sustituido los hogares por apartamentos turísticos". Colectivos como la Asociación de Vecinos Centro Antiguo han denunciado los efectos de un modelo económico eminentemente turístico que aprovecha la vivienda vacacional. El Consistorio ha comenzado a tomar medidas prohibiendo nuevos pisos de este tipo en 43 barrios de la ciudad, pero hay quien exige más contundencia y reclama la prohibición total de esta fórmula de negocio. Y tampoco ha rebajado el malestar ciudadano el anuncio de un "plan de choque" por la vivienda para construir 3.000 domicilios al año.
La trasformación del paisaje cotidiano es evidente. Y no sólo por los ríos de turistas caminando o en pelotones ciclísticos. Establecimientos tradicionales dan paso a franquicias y a negocios enfocados al visitante, lo que muchos críticos asemejan a un "parque de atracciones" y que hace que los autóctonos "se sientan extraños en su ciudad", como lamentaba días atrás un miembro de la judicatura malagueña.
El éxodo de malagueños que se percibe está —directa o indirectamente— influenciado por la llegada de extranjeros que se asientan en la provincia para desarrollar un proyecto vital o adquirir una segunda residencia y que impacta en el precio de la vivienda. Esta situación la relataba a El Confidencial un vecino del barrio de Pedregalejo que vive junto a la conocida como plaza del Ancla: "Estaba en mi casa viendo la televisión cuando llamaron a la puerta. Abrí y había un señor que dijo ser un asesor inmobiliario. Me preguntó que si la vivienda estaba en venta, y le respondí que no. Entonces, me explicó que un matrimonio holandés la había visto y se había encaprichado de ella, que pusiese un precio, porque lo pagarían. Insistí en que ese era el hogar de nuestra familia y que no estábamos dispuestos a vender, y entonces me llamó la atención que se sintió contrariado, como si no entendiese la negativa".
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fda2%2F7c2%2F823%2Fda27c28232e8c682a65cfa02ed5943e5.jpg)
Que la provincia está de moda, y que su proyección internacional ha atraído a muchos foráneos, lo remarcan los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). A 1 de enero de 2024, se contabilizaron 1.774.701 habitantes, lo que representa 21.973 más que en la misma fecha del año anterior. Lo llamativo es que el 65% de estos nuevos malagueños —14.153— era de nacionalidad extranjera; y sólo 7.280, españoles. A lo que hay que añadir que Málaga absorbió casi la mitad de la población que ganó Andalucía en ese periodo —47.715 personas—.
Esta tendencia, además de por las condiciones meteorológicas, el aeropuerto condicional y el escalón de los salarios, es impulsada por el intento de transformación de la ciudad en un polo tecnológico que está atrayendo a nómadas digitales. Una figura que comienza a verse con recelo, como se podía comprobar en los carteles de las dos manifestaciones por la vivienda y contra la turistificación que se han celebrado en la capital malagueña, y en las que se oía que "Málaga ha dejado de ser de los malagueños" y quien pedía a los turistas o residentes extranjeros que "no me quites mi casa". El concejal de Vivienda, Francisco Pomares, habló entonces de "una yihad, una guerra santa" contra el turismo que alentaba a "perseguir a la gente con maletas con ruedas".
El próximo 5 de abril está convocada la tercera movilización en menos de un año. Málaga para Vivir, el colectivo que la impulsa, recalca que han logrado "romper el relato de consenso que ha dirigido el desarrollo" de la capital y explica que vuelven a las calles porque "Málaga es para vivir, no para convertila en un parque de atracciones".
Eran las 9:57 del miércoles cuando el departamento de Comunicación de la Diputación de Málaga informaba de que el pleno se retrasaba sin hora. Debería haber comenzado a las 9:00, pero el presidente, Francisco Salado, y otros diputados, estaban atrapados en el atasco que ese día colapsó la circulación en los accesos a la capital. Un accidente registrado a las 6:50 en el túnel de Cerrado de Calderón que generaba hasta 20 kilómetros de retenciones en la ronda Este y que reabría el debate sobre las comunicaciones de la provincia que experimenta el mayor aumento poblacional del país.