Es noticia
Moreno preserva su talante moderado y saca a sus 'polis malos' a pelear con Montero
  1. España
  2. Andalucía
La socialista critica la doble estrategia

Moreno preserva su talante moderado y saca a sus 'polis malos' a pelear con Montero

El presidente de la Junta evita el choque directo y se desmarca de la versión más dura de Génova tras la acusación de Aldama. Antonio Repullo, Antonio Sanz y Carolina España protagonizan la ofensiva contra la nueva líder de la oposición

Foto: Juanma Moreno, en el Parlamento, rodeado de sus arietes: Carolina España, Antonio Sanz, Antonio Repullo y Toni Martín. (EP / Rocío Ruz)
Juanma Moreno, en el Parlamento, rodeado de sus arietes: Carolina España, Antonio Sanz, Antonio Repullo y Toni Martín. (EP / Rocío Ruz)
EC EXCLUSIVO Artículo solo para suscriptores

En la pasada legislatura, un dirigente del PP de la total confianza de Juanma Moreno se acercó en un acto a un veterano socialista andaluz y le confesó, discretamente, que en el partido habían estudiado en profundidad el modelo de éxito de los 37 años de gobiernos del PSOE en la comunidad. Y que su plan, entre otras cosas, pasaba por aplicar lo mejor de ese aprendizaje para cimentar su éxito. El primer tomo de esa enciclopedia es, quizás, el modelo de presidencia que diseñó Manuel Chaves, una figura muy institucional, poco dada al enfrentamiento, con tono sereno. Y ese es el tomo que mejor se ha estudiado el actual presidente de la Junta, que ha hecho bandera de su moderación y acaba de cumplir 6 años en San Telmo.

Para poder conservar esa imagen, necesita a una serie de figuras a su alrededor que sí bajen al barro, se remanguen y que en los últimos días han sacado toda la artillería en respuesta al cambio que se ha producido en el primer partido de la oposición. Desde que María Jesús Montero, vicepresidenta primera del Gobierno, anunció que aspiraría a dirigir el PSOE andaluz, el fuego popular ha sido una constante, pero nunca desde el principal despacho de la Junta. Los principales protagonistas de esta estrategia son cuatro dirigentes de la total confianza de Moreno que responden por tierra, mar y aire a la designación de la ministra de Hacienda como líder de los socialistas andaluces.

El puesto de principal escudero se lo disputan dos de sus arietes en el Gobierno, casi los únicos miembros del gabinete con peso político. Se trata de Carolina España, portavoz y titular de Hacienda; y de Antonio Sanz, consejero de Presidencia. Desde la sede regional de la calle San Fernando hace lo propio el secretario general del PP andaluz, Antonio Repullo. Y el póker lo completa el portavoz parlamentario popular en el viejo Hospital de las Cinco Llagas, Toni Martín. El muro de defensa de Moreno ya estaba ahí antes de la vuelta de Montero, pero en las últimas dos semanas ha crecido y se ha reforzado para hacer frente a la nueva jefa de la oposición.

"Nosotros preferíamos a [Juan] Espadas, qué te voy a decir", expresaba con cierta sorna una fuente popular del más alto rango. En San Telmo aseguran que a Montero le tienen cogida la medida, que conocen su pasado en la Junta, su gestión sanitaria y su relación con el PSOE de los ERE. Y también su condición de pilar de Pedro Sánchez en Madrid y responsable de negociar con independentistas. El entorno de Moreno ha dejado caer en más de una ocasión que su mayor amenaza habría llegado de la mano de un candidato o candidata más joven, que representase un cambio generacional frente al barón popular, que cumplirá en mayo 55 años.

Foto: Juanma Moreno y María Jesús Montero, en un acto en Málaga. (EP / Álex Zea)

Esos mensajes de seguridad, no obstante, contrastan con la sonora reacción que ha provocado Montero desde que el pasado 8 de enero se hizo pública su candidatura para liderar el PSOE-A. En menos de una semana Antonio Repullo convocó tres ruedas de prensa que se dedicaron casi por completo al desembarco de la política sevillana en San Vicente. El secretario general de los populares andaluces se hizo acompañar de varios titulares de prensa sobre la vicepresidenta primera en la enorme pantalla que el PP-A instaló hace unos meses en su sede regional.

Este jueves le cogió el testigo en esa labor prospectiva el portavoz parlamentario, Toni Martín, que recuperó intervenciones de Montero del diario de sesiones de la Cámara, recordando su etapa en política autonómica. "Nos vamos a divertir mucho con lo que dijo esa señora y lo vamos a compartir con ustedes", expresó el dirigente popular durante una reunión de la Diputación Permanente dedicada casi en exclusiva a debatir sobre la caída del decreto ómnibus en el Congreso de los Diputados.

La labor orgánica la complementa Carolina España desde el atril de San Telmo los martes, en las ruedas de prensa posteriores al Consejo de Gobierno. La dirigente malagueña fue aupada a la portavocía el pasado julio, precisamente en una apuesta de Moreno por lanzar mensajes más incisivos en un contexto muy concreto. El debate del curso político que se vislumbraba entonces tenía que ver con la financiación autonómica y colocar a la titular de Hacienda como portavoz le permitiría lanzar los envites contra Montero de forma directa. Ahora que la propia ministra es la principal contrincante del presidente de la Junta, la elección de España parece incluso más acertada, sobre todo si se tiene en cuenta que ambas se conocen de la etapa que la malagueña pasó como portavoz de Hacienda del PP en el Congreso de los Diputados.

Ahora que la propia ministra es la principal contrincante del presidente de la Junta, la elección de España parece incluso más acertada

Por si esta munición fuera poca, Moreno tiene a su principal escudero en Antonio Sanz, su mano derecha en el Gobierno autonómico y un veterano baqueteado en los años de oposición del PP andaluz y alumno aventajado de Javier Arenas. Y ha sido el titular de Presidencia quien ha dejado ver de forma más clara la estrategia dual de San Telmo con la jefa del PSOE andaluz. Sanz se lanzó a pedir explicaciones a los socialistas después de que Víctor de Aldama afirmase que existía una denuncia sobre cuentas de Montero en el extranjero. Al poco tiempo se hizo público que la Fiscalía había descartado esa posibilidad y archivado el escrito. Y Moreno, apenas con una hora de diferencia, optó por no pronunciarse sobre las palabras del empresario de la trama Koldo.

"Todo lo que no sea confirmado con pruebas no tengo nada que comentar", dijo Moreno en Fitur, desde donde lanzó un pescozón a Montero por combinar la labor de jefa de la oposición en Andalucía y sus cargos en Moncloa. Nada más. "Eso es más viejo que la caló", respondió la ministra de Hacienda este viernes durante una reunión de la interparlamentaria del PSOE andaluz. Se refería así Montero a la estrategia del "poli bueno, poli malo" que despliega el PP. Pero lo cierto es que incluso esta apuesta popular viene en el libro de instrucciones de la Junta que escribió en su momento su partido. Chaves tenía su propio azote de la oposición en Gaspar Zarrías, un puesto que años después heredó Elías Bendodo y que, tras su marcha a Madrid, han heredado el póker de dirigentes del PP a que protege a Juanma Moreno.

En la pasada legislatura, un dirigente del PP de la total confianza de Juanma Moreno se acercó en un acto a un veterano socialista andaluz y le confesó, discretamente, que en el partido habían estudiado en profundidad el modelo de éxito de los 37 años de gobiernos del PSOE en la comunidad. Y que su plan, entre otras cosas, pasaba por aplicar lo mejor de ese aprendizaje para cimentar su éxito. El primer tomo de esa enciclopedia es, quizás, el modelo de presidencia que diseñó Manuel Chaves, una figura muy institucional, poco dada al enfrentamiento, con tono sereno. Y ese es el tomo que mejor se ha estudiado el actual presidente de la Junta, que ha hecho bandera de su moderación y acaba de cumplir 6 años en San Telmo.

Juanma Moreno María Jesús Montero
El redactor recomienda