El juicio récord al narco: 157 acusados, 2.000 años de cárcel y 16.000 millones en multas

El clan de Los Castaña protagoniza a partir de este lunes la primera macrocausa contra el narcotráfico en el Campo de Gibraltar. 157 personas se sentarán en el banquillo de los acusados para responder por los delitos contra la salud pública, pertenencia a grupo criminal, contrabando, tenencia de armas, atentado a agente de la autoridad y receptación. La Fiscalía pide para ellos una total de 2.000 años de cárcel y más de 16.000 millones de euros de multa, en un proceso con cierto aire de revancha después del jarro de agua fría que supuso la sentencia de la Audiencia Provincial de Cádiz, que exoneró a 16 miembros de la conocida organización delictiva.

Esta resolución se produjo el pasado mes de noviembre y aumentó, más si cabe, la expectación sobre la causa cuya vista oral se celebrará en la sección de Algeciras. Para acoger las 32 sesiones en que se ha dividido, que se prolongarán hasta el 30 de junio, ha sido necesario habilitar dos salas.

TE PUEDE INTERESAR

Detenido de nuevo "el rey del narco" de Los Castaña cuando salía de la cárcel de Albolote

EFE

"El juicio comenzará con las cuestiones previas que puedan plantear las partes y se desarrollará por bloques, en cada uno de los cuales irán declarando los acusados y testigos propuestos en relación a los hechos enjuiciados en esa parte", precisó el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA).

El origen de este proceso se sitúa en la operación Dismantle, una intervención de la Guardia Civil que comenzó a principios de 2020 y permitió la incautación de casi 11 toneladas de hachís. Un total de 157 personas fueron detenidas como resultado de una decena de operaciones de narcotráfico llevadas a cabo entre el 1 de febrero y el 27 de agosto de ese año. En el escrito de acusación, se detallaba que 11 de los investigados se encontraban en rebeldía y enumeraba los cargos a los que se enfrentan quienes se sentarán en el banquillo de los acusados: delitos contra la salud pública, pertenencia a grupo criminal, contrabando, tenencia de armas, atentado a agente de la autoridad y receptación.

En el banquillo se sentará el lugarteniente del clan, al que liberaron por la fuerza en el hospital de La Línea cuando era custodiado

La fiscal antidrogas del Campo de Gibraltar, Macarena Arroyo, señala a Antonio Tejón, uno de los hermanos Castaña, como principal acusado. Solicita para él no menos de 13,9 años de prisión y una multa de 104 millones de euros, al considerar que era la persona encargada de "establecer los contactos y coordinar" al resto de implicados. Su hermano Francisco no se encuentra involucrado en esta causa, aunque sí uno de los hombres de confianza de los líderes del clan, S.C., que protagonizó una violenta fuga mientras era custodiado en el hospital de La Línea de la Concepción. Este episodio supuso un antes y un después ante la magnitud del problema del narcotráfico en la comarca del Campo de Gibraltar y su enraizamiento en el tejido social, lo que derivó en movilizaciones de protesta contra los traficantes y de apoyo a las fuerzas de seguridad.

La investigación de la operación Dismantle se centró originariamente en la zona de Palmones del municipio de Los Barrios, donde los acusados supuestamente llevaban a cabo todo tipo de labores logísticas para introducir los transportes de droga, así como para habilitar guarderías en las que esconder los alijos, los vehículos y las embarcaciones semirrígidas.

TE PUEDE INTERESAR

Caídos los Castaña, el Messi y el Pantoja, el Estrecho busca nuevo 'señor del transporte'

Pablo Gabilondo

Algunos de los investigados "ejercían claras funciones de jefes" y presuntamente eran "los encargados de llevar a cabo todas las gestiones para la introducción de grandes cantidades de hachís, procedente de Marruecos, por vía marítima". "Para ello, empleaban embarcaciones de alta velocidad (...) consideradas como género prohibido (...) por la ley de contrabando".

El escrito de acusación plasma a lo largo de 30 páginas todas las actividades que giran en torno a una operativa de narcotráfico. "Desde los tratos con los proveedores marroquíes para la adquisición de la droga", pasando por "la coordinación de otras personas que adquirían, ocultaban en naves, preparaban, transportaban y botaban las lanchas de alta velocidad", así como la búsqueda de individuos que "se encargaban del avituallamiento de gasolina y víveres de las embarcaciones para la travesía en alta mar" y cerraban las contrataciones de "los pilotos, los puntos de vigilancia, los vehículos de carga —en ocasiones, sustraídos—, los conductores y los que descargaban la droga".

Se dirimirá la participación en hasta seis delitos de gravedad de los 157 acusados. Once de ellos estaban fugados

Como en el mercado laboral convencional, la Fiscalía detecta que algunos de los investigados colaboraban con la organización de forma permanente, mientras que "otros actuaron de manera eventual". Cada una de las funciones que ejercían era "fundamental, complementaria y necesaria" para realizar el alijo "con éxito y evitando que las fuerzas de seguridad lo interceptasen".

La gravedad de estos hechos, y tras el revés que supuso la reciente resolución exculpatoria que benefició al clan de Los Castaña, en la que solo se pudo acusar a uno de los hermanos por la tenencia de cinco kilos de hachís, concede más relevancia al juicio que arranca este lunes, porque todo lo que no sea una dura sentencia condenatoria se podría interpretar como un cuestionamiento de estos últimos años de lucha contra el narcotráfico.