La economía circular en la hípica: convierten estiércol de los caballos en abono de calidad

Este domingo finaliza el Andalucía Sunshine Tour 2023 tras nueve semanas de competición de Salto de Obstáculos del máximo nivel internacional, en las que más de un millar de jinetes y hasta 3.500 caballos de 60 nacionalidades diferentes han pasado por las instalaciones ubicadas en Vejer de la Frontera. A nivel deportivo, se han disputado casi 500 pruebas diferentes y se han repartido más de 2,5 millones de euros en premios.

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Este campeonato se celebra en la finca Dehesa Montenmedio, que es la instalación ecuestre de competición más grande de Europa y cuenta con 7 pistas verdes, 14 pistas de arena con sistema AllWeather, además de albergar la pista cubierta desmontable más grande del mundo, con 966 boxes fijos y capacidad para montar hasta 2.500 boxes en total, entre otros.

Junto a todo ello, este año, estas instalaciones cuentan con una importante novedad que ha llevado a cabo Antonio Blázquez, creador e impulsor de este Andalucía Sunshine Tour o Circuito del Sol, y que ahora dirige su hija, Teresa Blázquez Abascal, reconocida amazona.

Este empresario gaditano ha puesto en marcha el proyecto Vermiorganic para la producción de abonos orgánicos, ecológicos y sostenibles con el medio ambiente. Para ello, ha invertido este último año casi 1,5 millones de euros en la construcción en la misma finca de una gran planta de compostaje para reciclar el estiércol de los caballos y convertirlos en fertilizantes de calidad.

Estas instalaciones de 20 hectáreas se basan en la lombricultura, que es una biotecnología que utiliza una especie domesticada de lombriz (generalmente la Lombriz Roja de California o Eisenia foetida) para transformar todo tipo de materia orgánica, obteniendo como fruto mediante un proceso natural el humus de lombriz o vermicompost, que es un fertilizante ecológico de primer orden.

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Se puede utilizar estiércol de ganado equino, vacuno, porcino, de granja de gallinas y biomasa procedente de poda y silvicultura como materia prima, convirtiéndolos en un fertilizante orgánico de excelente calidad.

Se llama humus a la materia orgánica degradada a su último estado de descomposición por efecto de la acción microbiana. Este proceso, que la naturaleza tarda muchos años en realizar, se puede llevar a cabo en un periodo de tiempo mucho más breve a través de la Lombriz Roja de California, obteniéndose como resultado humus de lombriz. Este producto, también llamado vermicompost, está demostrado que posee unas cualidades excepcionales como enmienda orgánica de suelos.

De momento, la experiencia de este año ha sido muy positiva para su impulsor, que ya está llevandom a cabo nuevas inversiones en la ampliación de las instalaciones, con nuevas naves y la compra de maquinaria envasadora, con un coste aproximado de 500.000 euros.

Durante la construcción de la planta trabajaban 20 operarios y actualmente para el funcionamiento de la planta hay seis personas contratadas. La previsión es producir entre 8 y 10 millones de kilos de vermicompost en 2024.

La venta se realiza principalmente a través de plataformas online y grandes superficies, los principales compradores son pequeños agricultores y pequeños consumidores para jardinería, ya que al ser un producto ecológico cien por cien su coste es algo más elevado y no es fácilmente asumible para grandes productores, salvo para plantaciones de aguacate, donde sí se utiliza mucho al ser un producto con un mayor margen de beneficio.