Moreno impulsa la renta mínima autonómica tras descartar el ingreso por la infancia

Tras admitir que no habrá un ingreso específico para combatir la pobreza infantil, la Junta impulsa la Renta Mínima de Inserción Social (RMISA), la prestación creada por el PSOE en 2017. La ayuda, que ha quedado opacada por la entrada en funcionamiento del Ingreso Mínimo Vital, verá aumentadas sus cuantías, aunque es cierto que el presupuesto previsto en las cuentas de 2023 es el mismo que el consignado antes de la reforma aprobada por la Junta en el Consejo de Gobierno de este martes.

Según explicó la consejera de Inclusión Social, Loles López, la ayuda crecerá un 45% de media al aumentar el pago mínimo, pero también para incluir varios complementos. La prestación mínima para un solo individuo pasará de 451 euros a 533, un 18% más. A esa cantidad hay que añadir un aumento del 30% por cada miembro de la unidad familiar, porcentaje que hasta ahora era del 10%. Además, las familias monoparentales y las que tengan a algún integrante con discapacidad reconocida recibirán un plus del 22% de la ayuda. De esta manera, la prestación máxima pasa de 839 euros a 1.173.

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Carlos Rocha. Sevilla

La segunda parte del decreto sirve para adaptar la renta autonómica al IMV, que desde su puesta en marcha ha hecho languidecer la apuesta de la Junta por la RMISA. Hay que recordar que, en sus primeros compases, el Gobierno de Juanma Moreno dio un impulso a esta ayuda que no logró el objetivo marcado por los socialistas debido a lo engorroso de sus trámites. En 2019, el primer año con PP y Ciudadanos al frente, la Junta ejecutó 107 millones, casi el doble del último año con el PSOE en San Telmo, cuando fueron 57. El presupuesto de 2020 se elevó hasta los 135 millones, pero ya en 2021 cayó hasta los 115 y en 2022, con las cuentas prorrogadas, se quedó en 78,5 millones.

La caída del gasto, explican desde la Consejería de Inclusión Social, es una consecuencia directa de la aplicación del IMV. El último dato ofrecido por el Gobierno cifra en 157.425 el número de hogares de la comunidad que cobran la ayuda nacional, que llega a 455.421 andaluces. En 2020, el año en el que la RMISA tuvo un mayor presupuesto, llegó a 79.640 andaluces. Este martes, la Junta habló de "6.500 familias" beneficiarias, pero no detalló el número de personas que las componen.

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Para hacer compatibles ambas ayudas y como una forma de responder a la crisis de precios, el Gobierno de Juanma Moreno permitirá que la renta regional llegue donde no lo hace el IMV. Es el caso de los hogares que pasan por una situación de urgencia o emergencia social, como las mujeres víctimas de violencia de género o explotación sexual, por enfermedad o accidente grave, o en caso de pérdida de la vivienda habitual, así como los solicitantes de asilo.

El objetivo es que dejen de producirse reintegros de ayudas por el solapamiento de ambas prestaciones, un objetivo que se marcó la Junta en la pasada legislatura, pero que no se logró. En San Telmo achacan esta realidad a las "constantes revisiones" del IMV y aseguran que han optado por hacerlo mediante decreto ley para acelerar los trámites. El plan inicial era crear un nuevo Ingreso por la Infancia y la Inclusión (IPII), una idea de la anterior consejera de Políticas Sociales, Rocío Ruiz, que dejó listo el borrador de una ley que incluso comenzó a negociar con la oposición de izquierdas.

El propio Juanma Moreno se comprometió en su discurso de investidura, el pasado julio, a impulsar esta ley en el primer periodo de sesiones, que finaliza este jueves con la aprobación del Presupuesto de 2023. El Confidencial adelantó que la Consejería de Loles López descartaba esta promesa del presidente. La excusa consistía en que el IMV incluyó el año pasado un complemento a la infancia para la lucha contra la pobreza infantil, pero las organizaciones como Unicef y Save the Children se quejaron por esta decisión. Hay que tener en cuenta que el 43,7% de los menores andaluces vive en riesgo de pobreza y exclusión, según la última edición de la Encuesta de Condiciones de Vida que elabora el INE.