Podemos deja ver sus costuras en Andalucía: tiene candidatos en uno de cada diez municipios

Hay candidaturas de las primarias de Podemos en Andalucía donde solo hay un aspirante, como en la localidad granadina de Padul. Y hay provincias, como Córdoba, donde los morados tienen listas en dos municipios, la capital y en Priego. El proceso, que finalizó el viernes después de varios días de votaciones, dejó algunas pistas sobre la debilidad que tiene la formación morada en su implantación territorial. A día de hoy solo podría presentarse en uno de cada diez pueblos y ciudades de Andalucía, puesto que las 81 localidades donde han presentado aspirantes son el 10,3% de los 785 municipios que tiene la comunidad

Los morados han celebrado la participación en el proceso, con 4.317 inscritos. Son muchos menos que los 5.932 que votaron en las elecciones internas para elegir candidato a Juan Antonio Delgado para las andaluzas, hace seis meses. Dados estos datos, el optimismo de Podemos se explica porque el censo ha sido menor (aunque no es público), ya que solo estaban llamados a las urnas los afiliados en los 81 municipios con candidaturas. Más de la mitad de los participantes en el proceso (2.245 personas) se concentran en las ocho capitales, donde viven unos 2,5 millones de andaluces.

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La población de todos los municipios donde Podemos ha presentado lista suma unos 5 millones de personas, es decir, el 58% del total de habitantes de Andalucía. Es un porcentaje mucho mayor que el de los 83 municipios donde los morados fueron solos en las elecciones municipales de 2019, cuando llegaron al 31% de la población en solitario. Hay que tener en cuenta que entonces los morados fueron en coalición, dentro de Adelante Andalucía, en otros 206 municipios que sumaban el 52%, lo que les permitió llegar al 83% de los habitantes de la comunidad.

En la dirección andaluza de Podemos explican que esta cifra no es definitiva y que hay lugares donde podrán presentarse nuevas candidaturas con solo recibir el aval de las direcciones nacional y regional. Es decir, sin primarias. Y recuerdan que todavía es posible un proceso de confluencia a pesar de las tensiones en Madrid y del bloqueo que se vive en el grupo parlamentario Por Andalucía, la coalición que los morados, junto con Alianza Verde, pactaron in extremis con IU, Más País, Equo e Iniciativa del Pueblo Andaluz.

El ejemplo de Coín, donde las direcciones locales no quieren ni oír hablar de la pugna, sería la solución para esta escasa implantación territorial de los morados. Pero el municipio malagueño se parece más a una aldea gala rodeada de los centuriones del Cesar que a un ejemplo a seguir. Precisamente en la provincia de Málaga hubo un intento de acuerdo que estuvo a punto de cerrarse, pero no llegó a buen puerto porque, aseguran en IU, una orden de Madrid paró las máquinas en medio de las tensiones por la reconfiguración del espacio de la izquierda.

La toma de posiciones en la carrera por lo que habrá a la izquierda del PSOE se desarrollará en la precampaña y la campaña de las municipales y autonómicas de 2023. El proyecto Sumar de Yolanda Díaz se espera para después, para las generales, pero Podemos e IU (con Más País en Andalucía) ya toman posiciones en este nuevo choque. El mensaje de los morados es claro. "Tenemos más votantes que militantes y hay otros partidos que no", apunta una fuente de la formación que dirige Ione Belarra.

En Podemos explican que podrán presentarse en más localidades, aunque esas candidaturas ya no pasarán por unas primarias vinculantes

Así quitan importancia a los datos que utiliza IU Andalucía para presumir de poderío. Frente a los 644 apoderados que aportó Podemos en las andaluzas, IU movilizó a 4.726. Los morados dejan caer que esto se debe a que la formación que dirige Toni Valero apunta a todos sus militantes, mientras que ellos no hacen lo mismo con los afiliados. Pero en IU no sólo presumen de afiliados, sino también de concejales, que, aseguran, se reparten en una proporción similar a la de los apoderados del 19-J.

921 concejales de IU y 153 de Podemos

En las elecciones de 2019, IU logró, por 921 concejales en las elecciones andaluzas, la tercera fuerza tras PP y PSOE. 455 fueron bajo la marca de la federación de izquierdas y 566 bajo el paraguas de Adelante Andalucía. Podemos, por su parte, logró 83 concejales de forma independiente y 72 bajo la marca de la confluencia que pactaron Antonio Maíllo y Teresa Rodríguez, entonces líderes de IU y Podemos en Andalucía respectivamente. Son 153 ediles morados, pero muchos de ellos ya no pertenecen al partido.

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La dirigente gaditana acabó fuera de la formación tras romper con Pablo Iglesias en su empeño por formar un partido netamente andaluz, sin dependencia de Madrid. Para ello utilizó a Adelante Andalucía, lo que le granjeó la expulsión de la formación morada, acusada de transfuguismo. Pero se llevó no solo a los 10 diputados morados que había en el Parlamento regional, todos afines a Rodríguez; sino también a un importante número de concejales repartidos por toda la comunidad.

La salida de la ahora portavoz de Adelante, que fue la líder de Podemos en Andalucía desde su fundación, en 2014, está directamente relacionada con la debilidad de la formación, que casi ha tenido que armar de nuevo sus estructuras en los últimos años. Y ello en un contexto de choque con IU, que en Andalucía destaca por su implantación territorial y su histórico peso municipal.

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Lo cierto es que ninguna de las candidaturas que se han presentado a las primarias moradas podrían presentarse por sí solas a las elecciones, ya que ni las más numerosas (Málaga y Sevilla) tienen los 31 miembros que deben registrar las listas de las dos ciudades más pobladas de Andalucía. A pesar del optimismo de la dirección de Martina Velarde, hay lugares donde la única opción posible es una confluencia. Pero los socios tienen una relación casi inexistente, como muestra la situación del Parlamento.

IU y Más País, con el aval de Equo e Iniciativa, desalojaron a la representante de Podemos de la Mesa de la Cámara porque registró un reglamento del grupo sin consensuarlo antes. Los morados respondieron así al incumplimiento del acuerdo político al que llegaron con IU para que Por Andalucía pudiera presentarse a las elecciones con Podemos dentro. La sustitución de Alejandra Durán por Esperanza Gómez es, en teoría, temporal, pero nadie sabe decir qué tiene que pasar para que el bloqueo se disuelva. Cuando se pregunta a uno y otro lado, la respuesta es la misma: "Tienen que cumplir el acuerdo".