Es noticia
La ‘sequía estructural’ de España: el estudio de Málaga que confirma el mal de nuestras tuberías
  1. España
  2. Andalucía
URGENTE ACOMETER OBRAS

La ‘sequía estructural’ de España: el estudio de Málaga que confirma el mal de nuestras tuberías

El avance de un trabajo de investigación confirma que con las pérdidas y robos de agua de las redes de distribución se podría abastecer todos los años a 64 municipios de la provincia y a 90.000 personas

Foto: Imagen del embalse de la Guadalteba, cerca de Málaga. (REUTERS/ Jon Nazca)
Imagen del embalse de la Guadalteba, cerca de Málaga. (REUTERS/ Jon Nazca)

Mientras los pueblos andaluces se adentran en un otoño con pobres previsiones de lluvia, y tratan de combatir la sequía aplicando restricciones que reduzcan el consumo, un estudio de la Diputación Provincial de Málaga ha constatado una problemática que complica el suministro de agua en los núcleos de población: la existencia generalizada de fugas y robos en la red de distribución que provocan una silenciosa y constante pérdida de agua. Las primeras conclusiones del trabajo realizado señalan que los siete hectómetros cúbicos que se ‘evaporan’ entre las tuberías equivalen al consumo anual de los 64 municipios más pequeños de la provincia, que aproximadamente suman 90.000 habitantes. Una circunstancia por la que el presidente del ente supramuicipal, Francisco Salado, ha vuelto a reiterar la necesidad de que los ayuntamientos inviertan en la detección y reparación de estos escapes y sustracciones.

La investigación, que ha analizado los 800 kilómetros que conforman las redes de distribución de agua de 77 municipios de la provincia con menos de 20.000 habitantes, ha constatado la pérdida de 19.450 metros cúbicos diarios hasta sumar siete hectómetros cúbicos al año.

Foto: Grave sequía en el embalse de Guadalteba, cerca de Málaga. (Reuters/Jon Nazca)

Salado explicó que el estudio, con un coste de casi un millón de euros, concluirá a finales de noviembre o primeros de diciembre y destacó que es clave no solo para reducir el gasto de agua, sino también para prevenir posibles fraudes que se puedan estar produciendo. “Sobre todo en un momento como el actual, con una situación crítica en cuanto a nuestras reservas hídricas en los embalses de la provincia, ya que están al 36,53% de su capacidad. Y, lo que es peor, con las previsiones de un otoño que no será especialmente lluvioso, y que agrava la sequía y el déficit hídrico que arrastramos en los últimos años”, manifestó el dirigente popular, para el que, “ahora más que nunca, el agua se convierte en un bien muy preciado, también para nuestra economía, para los sectores agrícola, ganadero y turístico”.

Los primeros resultados obtenidos en los 51 municipios en los que ya ha concluido el estudio reflejan un consumo de agua desproporcionado por las noches. En este sentido, siguiendo el método del caudal mínimo nocturno —el más utilizado para estimar las pérdidas que se producen durante las 24 horas del día—, los equipos de medición instalados en los pueblos han recogido consumos nocturnos muy significativos en la mayoría de los casos, que suponen más del 50% del agua regulada en los depósitos de almacenamiento.

“Esto indica claramente —aseguró Salado— que se están produciendo pérdidas de agua en la red, aunque no todas achacables a fugas, ya que también puede haber tomas fraudulentas. En todo caso, se ha detectado un gran número de escapes en la mayor parte de los núcleos estudiados, llegando incluso en algunas localidades a 45 fugas en la red municipal”.

También se ha comprobado que, cuando se llevan a cabo reparaciones de las fugas, se aprecian descensos en los caudales mínimos nocturnos, lo que se traduce en ahorro de agua. Aunque, a veces, tras los arreglos, en determinadas zonas se producen nuevas averías o roturas debido al mal estado de las redes en algunos puntos.

El estudio señala que las fugas y fraudes suponen una pérdida económica de 3,5 millones al año

La Diputación Provincial de Málaga informó de que, con los registros obtenidos y analizados hasta la fecha, se han cuantificado unos caudales mínimos nocturnos de aproximadamente 19.450 metros cúbicos al día, lo que supone una cifra mensual de 583.500 metros cúbicos y de unos siete hectómetros cúbicos al año. Es decir, que tras estudiar la situación de la red de 51 municipios, al año se pierden o defraudan siete hectómetros cúbicos. “Con ese volumen de agua se podría abastecer a la población de los 64 municipios más pequeños de la provincia, que suman unos 90.000 habitantes. Imagínense lo que es eso”, señaló Francisco Salado.

Al margen de la gravedad del agua que se pierde, desde el punto de vista económico también la sangría es importante para los pueblos. Aplicando un coste medio de 0,5 euros el metro cúbico, derivado de los costes de extracción, potabilización, puesta en servicio, etcétera, se alcanzaría un importe de 9.720 euros diarios, lo que supone 3.547.800 euros al año. Es decir, que los municipios dejan de facturar tres millones y medio de euros por esa agua incontrolada por escapes o por tomas fraudulentas.

placeholder Francisco Salado, presidente de la Diputación de Málaga, ofrece los resultados del estudio. (Diputación de Málaga)
Francisco Salado, presidente de la Diputación de Málaga, ofrece los resultados del estudio. (Diputación de Málaga)

“Estos primeros resultados nos permiten extraer como conclusiones iniciales que son primordiales la erradicación de fugas en las redes municipales y el control de tomas fraudulentas en un futuro, a través de planes anuales, así como la reparación inmediata de averías, la renovación de redes en mal estado y la instalación de sistemas de control domiciliario con telelecturas”, detalló el presidente de la Diputación.

Labor de los Ayuntamientos

Salado recalcó que para paliar el problema de la falta de agua potable en la provincia deben implicarse todas las administraciones y, al respecto, ha comentado que las obras hidráulicas y de mejora de la red de abastecimiento de agua potable deberían ser también una de las prioridades de los municipios.

Recordó que el ente que dirige ha realizado un “importante esfuerzo” en la transferencia de fondos incondicionados a todas las entidades locales de la provincia, fondos que no tienen una finalidad concreta, sino que cada corporación es la que decide en qué gastar las cantidades que se le asignan, en función de sus prioridades.

Foto: Una de las duchas que dejarán de estar operativas. (Rincón de la Victoria)

“Desde julio de 2019, se han inyectado a las arcas de los ayuntamientos de la provincia 207,1 millones de euros como fondos incondicionados, y en el pleno que se celebra hoy —por este miércoles— se aprueba, de forma inicial, la sexta fase del Plan de Asistencia Económica Municipal para distribuir otros 16 millones de euros también como fondos incondicionados. Así que, en total, en el actual mandato se han transferido 223 millones de euros”, señaló la institución.

Salado recordó que “de nada sirve construir nuevos pozos, nuevos depósitos o hacer trasvases, si luego perdemos el agua por el camino. Es urgente que los ayuntamientos acometan las inversiones necesarias para mejorar sus redes de agua, para acabar con las fugas y con los fraudes. Y para ello han contado y cuentan con la ayuda de la Diputación de Málaga”.

En este sentido, advirtió de que, si los ayuntamientos no establecen como prioritarias las mejoras en sus redes de abastecimiento, “se tendrá que imponer el destino final de los fondos” que se transfieren a los consistorios. Salado destacó que, durante el actual mandato, el ente supramunicipal ha invertido o va a invertir 32 millones de euros en obras hidráulicas. Del total, 10 millones se han dedicado a abastecimiento de agua y han permitido la mejora de las captaciones y las infraestructuras de potabilización; la construcción de nuevos depósitos de agua, en unos casos, o el aumento de su capacidad, en otros; y, sobre todo, la sustitución y modernización de las conducciones y redes de distribución con sistemas de control que alerten y eviten pérdidas o fugas.

Mientras los pueblos andaluces se adentran en un otoño con pobres previsiones de lluvia, y tratan de combatir la sequía aplicando restricciones que reduzcan el consumo, un estudio de la Diputación Provincial de Málaga ha constatado una problemática que complica el suministro de agua en los núcleos de población: la existencia generalizada de fugas y robos en la red de distribución que provocan una silenciosa y constante pérdida de agua. Las primeras conclusiones del trabajo realizado señalan que los siete hectómetros cúbicos que se ‘evaporan’ entre las tuberías equivalen al consumo anual de los 64 municipios más pequeños de la provincia, que aproximadamente suman 90.000 habitantes. Una circunstancia por la que el presidente del ente supramuicipal, Francisco Salado, ha vuelto a reiterar la necesidad de que los ayuntamientos inviertan en la detección y reparación de estos escapes y sustracciones.

Málaga Diputación de Málaga Lluvia Agua Noticias de Andalucía