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La lucha soterrada tras el vacío de Olona acrecienta los nervios en Vox
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EL PARTIDO SIGUE DESCABEZADO

La lucha soterrada tras el vacío de Olona acrecienta los nervios en Vox

El partido de Abascal guarda silencio sobre quién será el líder en Andalucía y deja ver una pelea interna tras el fracaso de las elecciones del 19-J. La formación ha anunciado un nuevo acto multitudinario para octubre, mientras cae en las encuestas

Foto: Macarena Olona, junto a Jesús Aguirre, en la ronda de contactos previa a la investidura de Juanma Moreno. (EFE/Julio Muñoz)
Macarena Olona, junto a Jesús Aguirre, en la ronda de contactos previa a la investidura de Juanma Moreno. (EFE/Julio Muñoz)
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La marcha de Macarena Olona sigue sin resolverse y ha dejado al descubierto las costuras de Vox en Andalucía. Y más allá. La alicantina acudió este miércoles al Parlamento regional para renunciar a su acta de diputada y, por lo tanto, a la portavocía. Dado que no tiene estructura autonómica, la formación sigue descabezada y nadie se atreve a dar el nombre de quién sustituirá a Olona. De fondo, se mantiene la guerra soterrada que influyó en la dimisión de la exdirigente, motivada por "razones médicas". El resultado de las elecciones andaluzas del pasado 19 de junio sigue retumbando en un partido que se había acostumbrado a mejorar siempre sus resultados, pero que comenzó a pelear con sus expectativas antes incluso de que se instalasen las urnas.

Un mes y cuatro días después de renunciar al acta de diputada en el Congreso y tomar posesión como parlamentaria andaluza, Olona ha dimitido en presencia del presidente del legislativo, Jesús Aguirre. Su salida deja al grupo sin líder, aunque lo cierto es que agosto es un mes inhábil y no habrá mucha actividad, pero Vox lleva en silencio desde el pasado viernes, cuando la candidata anunció su marcha. Lo hizo con un tuit acompañado de una foto con Santiago Abascal, plagado de mensajes de cariño. El líder del partido hizo lo propio y aseguró que "las puertas siempre estarán abiertas" para la política alicantina. Pero los mensajes que se destilan en un lado y otro emborronan la imagen de cordialidad que enviaron Olona y Abascal.

Foto: Macarena Olona, durante la investidura de Juanma Moreno. (EFE/Julio Muñoz)
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A ello hay que sumar el hermetismo que practican en Vox cuando se alude a un problema interno. Se da por hecho que han tenido un papel importante en la salida de Olona de la primera línea política. La que ha sido la principal referente femenina del partido anunció sorpresivamente su marcha el pasado viernes por "motivos de salud" y adelantó que no volvería a la política activa al recuperarse de su condición. Recuperará así su plaza como abogada del Estado. Pero al motivo médico hay que añadir su situación de aislamiento en Andalucía. Su candidatura el 19-J fue una apuesta de la dirección de Vox por mejorar sus resultados en la comunidad, también fue el inicio de su caída en desgracia.

En la dirección de Madrid han querido poner tierra de por medio con el 'fracaso' de Olona el 19 de junio. Hubo una mejora de más de 100.000 votos y dos escaños respecto a 2018, pero la expectativa era duplicar los números. Y se quedaron lejos de ese millón de sufragios que Abascal puso como meta en un mitin de los inicios de la campaña. En el núcleo duro de Vox responsabilizan a la candidata de los malos datos y deslizan que las decisiones más polémicas de la campaña fueron responsabilidad de la política alicantina. No todo el mundo asegura lo mismo, ya que hay fuentes que hablan de la existencia de una suerte de comité electoral en Madrid que también tenía capacidad decisoria. Por lo tanto, apuntan estas fuentes, no se puede cargar sobre las espaldas de Olona todo el peso de los errores previos al 19-J.

Foto: Macarena Olona, en el salón de plenos del Parlamento andaluz, en presencia de Juan Marín y Jesús Aguirre. (EFE/Julio Muñoz)

La disensión no solo se produjo en la campaña, porque Olona fue perdiendo papel en el grupo parlamentario poco a poco en el escaso mes que ha formado parte de él. Comenzó siendo la interlocutora de Elías Bendodo en las conversaciones para acelerar la elección de Juanma Moreno como presidente, pero después fue sustituida por Rodrigo Alonso, presidente del grupo parlamentario. La elección del senador por designación autonómica, en la que Olona no tuvo un papel relevante, según desveló 'El País', fue otra muestra. La alicantina llegó a anunciar la elección de Jacobo González-Robatto, su jefe de campaña, pero la ley de igualdad obligó a Vox a buscar a una mujer para ocupar su puesto y cumplir con la paridad en el cupo de nueve senadores que el Parlamento andaluz envía a la Cámara Alta. Olona no participó en esa elección.

Dudas sobre el nuevo portavoz

Las distintas fuentes consultadas mantienen el hermetismo sobre quién será el nuevo portavoz de Vox en el Parlamento de Andalucía, pero las miradas se centran en Javier Cortés y Manuel Gavira. Cortés es el jefe provincial del partido en Sevilla y es cercano a Abascal. Gavira fue portavoz en la segunda mitad de la pasada legislatura, así como secretario en la Mesa de la Cámara. Ahora son portavoz adjunto y secretario general del grupo, respectivamente. Junto con el citado Rodrigo Alonso, que también es jefe nacional del sindicato afín a Vox, Solidaridad, son los dirigentes más relevantes del partido en la comunidad.

Foto: Macarena Olona durante un acto del partido. (EFE/Raúl Caro)

Si finalmente Abascal opta por Cortés, Vox tendrá su quinto portavoz en menos de cuatro años, que son los que la formación lleva en la política andaluza desde su irrupción en las elecciones autonómicas de diciembre de 2018. El candidato a aquellos comicios, Francisco Serrano, fue apartado cuando se hizo público que estaba implicado en un supuesto fraude de subvenciones públicas superior a los dos millones de euros. Su sustituto fue Alejandro Hernández, diputado por Córdoba, que sigue en el actual grupo parlamentario y que cosechó una fructífera relación con el primer Gobierno de Juanma Moreno. En el último tramo de la legislatura, Vox optó por Gavira para virar su estilo de oposición hacia uno más duro y alejarse así del PP en un contexto preelectoral.

Un evento revulsivo en octubre

En medio de esta inestabilidad y a la baja en las encuestas, Vox plantea ya la celebración de un nuevo acto lúdico, pero con tintes políticos, para el arranque del otoño. Se trata de Viva 22, un evento que en su primera edición reunió a más de 20.000 personas en Ifema, en Madrid, y que sirvió para reivindicar su discurso y reforzar sus alianzas internacionales. La diferencia es que entonces el partido de Santiago Abascal estaba en pleno ascenso y ahora experimenta el primer frenazo de su historia. Un parón que comenzó precisamente en la campaña de las elecciones andaluzas que protagonizó Olona.

Viva 22 se desarrollará los días 8 y 9 de octubre, en los días previos a la fiesta nacional del 12 de octubre, y tendrá un importante contenido histórico. El objetivo de Vox es llevar el evento a un recinto aún mayor que el palacio de ferias madrileño y que gire en torno a 52 figuras históricas. Se trata de una práctica habitual en la formación de Abascal, que suele combinar los actos festivos con los políticos, como ha hecho recientemente en la caseta de la 'velá' de Triana, que se celebra cada mes de julio en Sevilla.

La marcha de Macarena Olona sigue sin resolverse y ha dejado al descubierto las costuras de Vox en Andalucía. Y más allá. La alicantina acudió este miércoles al Parlamento regional para renunciar a su acta de diputada y, por lo tanto, a la portavocía. Dado que no tiene estructura autonómica, la formación sigue descabezada y nadie se atreve a dar el nombre de quién sustituirá a Olona. De fondo, se mantiene la guerra soterrada que influyó en la dimisión de la exdirigente, motivada por "razones médicas". El resultado de las elecciones andaluzas del pasado 19 de junio sigue retumbando en un partido que se había acostumbrado a mejorar siempre sus resultados, pero que comenzó a pelear con sus expectativas antes incluso de que se instalasen las urnas.

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