El PSOE andaluz pide fondos a agrupaciones locales por su mala situación económica

Las cuentas del PSOE de Andalucía pasan por un mal momento y en el equipo de Juan Espadas han optado por pedir colaboración monetaria a las agrupaciones. En una misiva firmada por el secretario de Administración del partido, la dirección de San Vicente solicita una aportación para "reajustar la financiación" de la formación del puño y la rosa. Las cantidades comienzan por 375 euros, pero pueden superar los 1.500 euros si la agrupación en cuestión cuenta con recursos suficientes.

En la dirección del PSOE andaluz confirman que se ha remitido esta carta a los secretarios generales de las agrupaciones locales, más de 700 en todo el territorio. Y lo enmarcan dentro de la normalidad. "Se viene practicando desde hace tiempo", explica a esta redacción el secretario de Organización regional, Noel López. Se trata de una fórmula de colaboración "multidireccional" que se ha practicado en otras ocasiones a la inversa, detalla el dirigente granadino, es decir, desde el partido regional a las provincias o los municipios. "Nos financiamos por los métodos establecidos en la ley y por la aportación de los militantes", aclara López.

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La carta está fechada el pasado 28 de julio y lleva la firma de Juan Tomás de Aragón, secretario de Administración del PSOE de Andalucía. Antes, la dirección socialista ha elaborado un "estudio de la situación económica general" de las agrupaciones y ha establecido varios tramos en función de la capacidad financiera de las mismas a fecha de 31 de diciembre de 2021.

Las agrupaciones con una liquidez superior a 10.000 euros deben remitir al partido una aportación del 15% de la misma, es decir, de 1.500 euros en adelante. Para las formaciones con un saldo de entre 7.500 y 10.000 euros, la donación debe ser del 10%, es decir, entre 750 y 1.000 euros. El siguiente tramo va de los 5.000 a los 7.500, lo que se traduce en un montante de entre 375 y 562 euros, mientras que, si tienen menos de 5.000 euros, no tienen por qué colaborar. Las agrupaciones con menos capacidad económica a la fecha límite tienen una excepción, pero, si reciben fondos anuales del grupo municipal en 2022 y es superior a esos 5.000 euros, deben hacer también el ingreso.

El PSOE-A enmarca esta práctica en la normalidad y asegura que se ha puesto en práctica en otras ocasiones

En la carta, la dirección andaluza ya adelanta el cálculo del dinero que cada agrupación debe ingresar en una cuenta antes del 30 de septiembre. Y finaliza la misiva agradeciendo "la compresión". Esta práctica coincide con un mal momento financiero del PSOE andaluz que responde a varios motivos. El primero es la pérdida de subvenciones electorales, tanto por cantidad de votos y escaños como para el funcionamiento del grupo parlamentario. En este segundo concepto, el PSOE se ha dejado unos 200.000 euros de la ayuda anual que la Cámara concede a los partidos y que sirve para su financiación.

El segundo motivo es que los socialistas andaluces pasaron por un 2021 de mucho gasto. El coste de las primarias celebradas en la primavera del pasado año se dejó notar en las cuentas del PSOE andaluz. Y hubo que sumar la posterior organización del congreso regional que se desarrolló en Torremolinos en noviembre. Después llegó la campaña electoral de las elecciones del pasado mes de junio. Y para sufragar parte de la misma ya pusieron en marcha una campaña de microcréditos a imagen de la utilizada por el PSOE federal en las dos elecciones generales de 2019.

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Aunque en la dirección regional doten de normalidad a esta práctica, el momento no es el mejor para las agrupaciones del PSOE. La solicitud llega cuando falta menos de un año para las elecciones municipales, que se celebrarán el 28 de mayo de 2023. Lo habitual es que los portavoces municipales de la oposición y los alcaldes tengan remanentes para poder llegar con más posibilidades a la campaña y lograr así el mejor resultado posible.

Hay que tener en cuenta que la convocatoria del próximo mayo es crucial para el PSOE andaluz, puesto que el partido se juega conservar el poder institucional que mantiene. Cuando se acercan los cuatro años fuera de la Junta, los socialistas tienen sus referentes en las seis diputaciones que gobiernan —algunas, como la de Córdoba, en coalición con IU— y los 458 alcaldes. Son más de la mitad de los 785 municipios que hay en Andalucía. Y muchos vieron como el PP superó al PSOE en votos el pasado 19-J.

El mantra que se oye por los pasillos de San Vicente es que hay una gran diferencia entre unas autonómicas y unas municipales. Además, existe el convencimiento de que los alcaldes se han activado tras el 19-J, conscientes del riesgo. Y que en unas elecciones locales el candidato tiene mucha mayor relevancia. Esto también lo saben en el PP y el partido de Juanma Moreno va a apostar fuerte para extender su éxito del 19-J a las municipales, que serán la antesala de las generales que Pedro Sánchez quiere convocar para finales de 2023.