Sánchez olvida los rencores y rescata en la Moncloa al número dos de Iván Redondo
El presidente recupera a Francisco Salazar para una oficina electoral un año después de despedirlo junto a su exjefe de gabinete. La prioridad absoluta es activar el partido para las municipales
Quienes lo conocen, aseguran que Francisco Salazar es "un animal político". Su capacidad, su "visión", es lo que ha llevado a Pedro Sánchez a enmendar una decisión que él mismo tomó hace poco más de un año. El presidente del Gobierno ha recuperado al exdirigente sevillano para una nueva oficina creada en el organigrama de Moncloa. La labor que hará en el departamento de Planificación Política no será muy distinta a la que desempeñó como adjunto de Iván Redondo cuando el consultor vasco era jefe de gabinete de Sánchez. Pero no deja de llamar la atención este 'rescate' en un momento en el que hay una prioridad en su cabeza: rearmar al PSOE y al Ejecutivo para el ciclo electoral que se avecina.
La vuelta de Salazar a Moncloa, adelantada por Servimedia, hay que leerla en la revolución que Sánchez puso en marcha en el PSOE tras la salida de Adriana Lastra y el ascenso de María Jesús Montero a la vicesecretaría general del partido. Después de dejar de contar con una de sus fieles escuderas, de las que formaron parte del primer sanchismo, el jefe del Ejecutivo recupera a otro miembro de ese círculo que ha estado un año fuera. Su caída en desgracia fue pareja a la de su jefe, pero su recuperación demuestra, una vez más, que Sánchez no es rencoroso. Sobre todo cuando tiene un objetivo electoral entre ceja y ceja.
Para reforzar esta idea, solo hay que tener en cuenta que Salazar trabajará ahora con Óscar López y Antonio Hernando. El primero ahora ocupa el puesto de Redondo y el segundo es su adjunto. Ambos desaparecieron de la primera línea, a pesar de su amistad con el presidente del Gobierno, tras trabajar en bandos distintos al suyo durante las primarias de 2017... que el madrileño acabó ganando. Justo antes del rescate de Salazar, Sánchez hizo portavoz parlamentario a Patxi López, que se enfrentó a él en esas elecciones internas, y portavoz del partido a Pilar Alegría, ministra de Educación desde hace un año, que fue portavoz de la candidatura de Susana Díaz en la primavera de 2017.
En este año fuera de Moncloa, Salazar ha estado en el Hipódromo de la Zarzuela, donde ha ocupado el puesto de presidente. Ya tuvo un cargo similar en el Gran Hipódromo de Andalucía, una instalación impulsada por su padre político, el exalcalde de Dos Hermanas Francisco Toscano. La sombra del veterano socialista, que también fue uno de los principales apoyos de Sánchez en Andalucía, sigue dejándose ver en el actual equipo del presidente a pesar de que su cercanía no es la de antes.
Para un socialista servir a #España y al Presidente del Gobierno en @desdelamoncloa es un inmenso honor. Gracias @sanchezcastejon
— Paco Salazar (@SalazarRoPaco) August 2, 2022
Salazar, que ha mostrado su agradecimiento a Sánchez con un mensaje en Twitter, vuelve para encargarse de lo que más le gusta, la fontanería política. Lo hace tras participar en varios éxitos electorales del PSOE, como las dos elecciones generales de 2019 y las autonómicas de Cataluña. Pero también después del fracaso de Madrid y el ascenso de Isabel Díaz Ayuso. Aquellos comicios del 4 de mayo de 2021 fueron los últimos en los que Salazar estuvo en la sala de máquinas. Pero vuelve justo después de otro fracaso del PSOE, ya con él fuera de la toma de decisiones.
La derrota de Castilla y León fue un contratiempo, pero la debacle socialista en su viejo bastión andaluz ha precipitado los cambios que han acabado con Salazar de vuelta en Moncloa. Ahora su labor será planificar la reactivación del partido y engrasar las relaciones entre la Moncloa y Ferraz. Esa es la prioridad ahora para el jefe del Ejecutivo, ya que la nueva vicesecretaria general, María Jesús Montero, también tiene entre sus tareas esa misma misión. No obstante, la restauración de este dirigente socialista en Moncloa no se ha repetido en Ferraz, donde fue secretario de Acción Electoral dentro de la ejecutiva.
Salazar vuelve al núcleo de poder del presidente del Gobierno, donde ya solo sobrevive Santos Cerdán entre los acólitos del primer sanchismo
Salazar vuelve así al primer círculo de poder del presidente del Gobierno, lo que algunos leen como un espaldarazo al papel que ha jugado este sevillano en el ascenso de Pedro Sánchez. Junto con la citada Adriana Lastra, estuvo en el equipo que preparó las primarias de 2017, igual que José Luis Ábalos, Carmen Calvo y Santos Cerdán. Solo el navarro, que ha resultado vencedor en la pugna con la asturiana, sigue en este núcleo al que ahora ha retornado el nuevo secretario general de Planificación Política.
La primera meta volante para Salazar son las municipales del 28 de mayo de 2023. Al olfato político que se le atribuye, el sevillano tiene que añadir su experiencia en política local, ya que fue alcalde de su localidad natal, Montellano, un pueblo de unos 7.000 habitantes en la Sierra Sur de Sevilla. Los comicios, que van aparejados a las municipales en 12 comunidades autónomas, servirán de ensayo de las generales que se esperan para final de año. Serán clave en territorios como Andalucía, donde el PSOE se juega su poder institucional tras la derrota del 19-J.
Quienes lo conocen, aseguran que Francisco Salazar es "un animal político". Su capacidad, su "visión", es lo que ha llevado a Pedro Sánchez a enmendar una decisión que él mismo tomó hace poco más de un año. El presidente del Gobierno ha recuperado al exdirigente sevillano para una nueva oficina creada en el organigrama de Moncloa. La labor que hará en el departamento de Planificación Política no será muy distinta a la que desempeñó como adjunto de Iván Redondo cuando el consultor vasco era jefe de gabinete de Sánchez. Pero no deja de llamar la atención este 'rescate' en un momento en el que hay una prioridad en su cabeza: rearmar al PSOE y al Ejecutivo para el ciclo electoral que se avecina.