Es noticia
El Defensor del Pueblo investiga el "escaso rigor" en el control de la discoteca del tiroteo
  1. España
  2. Andalucía
AL MENOS SEIS EXPEDIENTES ABIERTOS

El Defensor del Pueblo investiga el "escaso rigor" en el control de la discoteca del tiroteo

Ha elaborado varios informes en los que censura que el ayuntamiento marbellí no adoptara más medidas con un negocio, Opium, que durante un tiempo operó con licencia de “restaurante sin música”. El consistorio defiende su actuación

Foto: Cinco personas resultaron heridas en el tiroteo de Opium. (EFE/Antonio Paz)
Cinco personas resultaron heridas en el tiroteo de Opium. (EFE/Antonio Paz)

Cuando las luces de las ambulancias y coches policiales convirtieron la noche en día, poco sorprendió a los vecinos próximos al club de playa —discoteca— Opium de Marbella. Tampoco les extrañó mucho que un tiroteo dejara cuatro heridos. No era la primera vez que un incidente en este establecimiento desvelaba sus sueños. Para muchos, aseguran, es lo habitual cuando llega el verano. Porque la música y el ruido que supuestamente trascienden al exterior les roban el descanso. Una situación que han denunciado reiteradamente y que está siendo investigada por la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz. Un organismo que en los últimos meses ha emitido varios informes en los que cuestiona severamente el papel del consistorio para fiscalizar un negocio “reiteradamente incumplidor” y que no oculta su sorpresa por que se le haya concedido una licencia de auditorio que permite triplicar el aforo hasta las 2.500 personas. La Administración local, por su parte, defiende su proceder y afirma que ha intervenido y sancionado siempre que ha habido motivo para ello.

En uno de los documentos a los que ha tenido acceso El Confidencial, con fecha 10 de noviembre de 2021, se destaca que Opium opera —“en vigor a fecha del informe”— con un permiso de apertura para la actividad de restaurante, “esto es, establecimiento de hostelería sin música”. No obstante, ha estado celebrando eventos musicales, en parte, porque durante un periodo de cinco meses se le permitía “el desarrollo de actividades de música pregrabada al aire libre de carácter ocasional” y se le concedieronautorizaciones para actividades extraordinarias”. Un total de 17 en “un lapso de poco menos de dos meses” durante el pasado verano. Fue el paso previo a otorgarle una licencia de auditorio que eleva el aforo del local a unas 2.500 personas. El anterior rondaba las 750.

Foto: Acceso a la discoteca Opium, donde sucedió el tiroteo. (EFE/Antonio Paz)

Este recorrido administrativo no supondría ningún problema si no fuese porque este negocio acumula numerosas quejas vecinales por ruido e intervenciones de la Policía Local que, según el Defensor del Pueblo Andaluz, demuestran una “reiterada voluntad de incumplimiento”. Entre enero y julio de 2021, documenta al menos seis actuaciones policiales que se tradujeron en expedientes sancionadores por “reproducir música que trascendía al exterior” y “realizar actividad musical en vivo sin autorización o sin ajustarse a la otorgada”. Los tres primeros sumaron multas por 8.404,08 euros.

A pesar de esta actitud, “no parece que se haya cerrado este establecimiento ni un solo día, o que se le haya suspendido su actividad, pese a que se le llegó a advertir”, hace hincapié este organismo, que ahonda en su crítica cuando recalca que al polémico club de playa “se le han autorizado numerosos eventos extraordinarios, convirtiendo prácticamente en habitual y ordinario lo que debería ser excepcional y extraordinario”. “Con estos antecedentes, no podemos decir que sean buenos los augurios para el descanso y tranquilidad de los residentes en la zona (...), pues la realidad es que la persistente actitud infractora durante el pasado año no invita a ser optimista”.

Lamenta que no se tomen medidas contra un establecimiento "reiteradamente incumplidor"

La Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz cuestiona abiertamente la labor de control llevada a cabo por el Ayuntamiento de Marbella, a quien reprocha su “escaso rigor” y “no ser contundente frente a tanta infracción agresora del derecho al descanso”. “De nada sirve incoar reiteradamente expedientes sancionadores, con multas que resultan irrisorias frente al rédito económico obtenido por la infracción, si no se adopta alguna medida accesoria que castigue verdaderamente la persistente actitud infractora”, advierte en una de sus resoluciones, en la que señala que el artículo 23 de la Ley 13/1999 ofrece herramientas más concluyentes, como el cierre temporal, suspensión de la actividad o inhabilitación para desarrollarla hasta en un plazo de tres años.

El citado organismo, además, censura que se hayan seguido atendiendo las peticiones del establecimiento, a pesar de que algunas de las autorizaciones que se le otorgaron contaban con cláusulas que advertían de que, "en el caso de que se constate que la actividad temporal autorizada produce molestias a los vecinos, en caso de incumplimiento de la franja horaria autorizada, o si incumpliera alguna de las condiciones higiénico sanitarias anteriormente reseñadas, se procederá (...) a acordar la revocación". “Nada de eso ha acontecido, pese a que son obvias las molestias y las denuncias presentadas”, sentencia, antes de señalar que “nos parece verdaderamente sorprendente que se justifique la no adopción de medidas accesorias” alegando en un informe jurídico que “no se pueden sustentar en la sola apreciación de la Policía Local” sobre el nivel del ruido por no contarse —“además”— con una “medición técnica”.

Foto: Una de las terrazas de Madrid, en el barrio de Malasaña. (Getty/Carlos Álvarez)
TE PUEDE INTERESAR
Madrid se rinde ante el ruido: más de 11.000 denuncias, a la basura sin ser tramitadas
Alfredo Pascual Gráficos: Unidad de Datos

Aunque “somos conscientes de que la concesión de licencias es una actividad reglada, parece claro que no se está siendo muy exigente con el cumplimiento de la normativa de protección frente al ruido”, desliza el Defensor del Pueblo, que entre otras cosas ha reclamado información sobre “el procedimiento por el que este establecimiento, reiteradamente incumplidor, solicitó licencia para auditorio al aire libre”.

Fuentes del Ayuntamiento de Marbella, consultadas por este periódico, defendieron su actuación en todo momento y remarcaron que “se está cumpliendo la ley”. Explicaron que distintos departamentos municipales han estudiado y estudian el caso de Opium y que se ha actuado cuando han constatado cualquier infracción. En este punto, recordaron que le impusieron una sanción de 6.000 euros cuando se detectó que supuestamente desde 2020 desarrollaba su actividad sin el limitador de sonido.

El consistorio defiende su labor y dice que se ha actuado ante cualquier infracción constatada

Las citadas fuentes aseguraron que se está interviniendo con todo el rigor y rechazaron las acusaciones formuladas por la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz, para seguidamente reiterar que se toman medias ante cada aviso o denuncia.

Pero estas aseveraciones no convencen a los residentes consultados, que señalan que este asunto se está analizando en distintas comunidades de propietarios y que el acuerdo mayoritario es “tratar las actuaciones necesarias con el ayuntamiento”, ya que consideran que hay que abordar con contundencia este asunto.

Opium afirma que perfeccionará las medidas y protocolos de seguridad

La discoteca Opium utilizó las redes sociales para pronunciarse por primera vez sobre el suceso acaecido la madrugada del lunes. En comunicado oficial hecho público este martes, sus responsables afirmaron que “no tenemos palabras para expresar el dolor que sentimos por lo sucedido”. Tras solidarizarse con las víctimas, a las que desearon una pronta recuperación, lamentaron que “un par de indeseables pongan en cuestión nuestro esfuerzo por conseguir que un local ubicado en un marco incomparable (...) vea afectada su imagen y reputación”.

“Hemos acordado con las autoridades correspondientes no reabrir nuestras instalaciones hasta haber perfeccionado las medidas y protocolos de seguridad, de forma que sea imposible que un triste suceso como el ocurrido pueda repetirse”, aseguraron.

Cuando las luces de las ambulancias y coches policiales convirtieron la noche en día, poco sorprendió a los vecinos próximos al club de playa —discoteca— Opium de Marbella. Tampoco les extrañó mucho que un tiroteo dejara cuatro heridos. No era la primera vez que un incidente en este establecimiento desvelaba sus sueños. Para muchos, aseguran, es lo habitual cuando llega el verano. Porque la música y el ruido que supuestamente trascienden al exterior les roban el descanso. Una situación que han denunciado reiteradamente y que está siendo investigada por la Oficina del Defensor del Pueblo Andaluz. Un organismo que en los últimos meses ha emitido varios informes en los que cuestiona severamente el papel del consistorio para fiscalizar un negocio “reiteradamente incumplidor” y que no oculta su sorpresa por que se le haya concedido una licencia de auditorio que permite triplicar el aforo hasta las 2.500 personas. La Administración local, por su parte, defiende su proceder y afirma que ha intervenido y sancionado siempre que ha habido motivo para ello.

Defensor del Pueblo Tiroteo Marbella Noticias de Andalucía
El redactor recomienda