La Vuelta no tendrá el final de etapa más alto de Europa: el Gobierno central gana a la Junta
La Junta de Andalucía finalmente no modificará la protección del Parque Natural de Sierra Nevada para permitir un final en alto. Los ecologistas decantan la victoria a favor de las tesis del Ministerio de Transición Ecológica
Finalmente y tras meses de tira y afloja la Vuelta a España no tendrá el final de etapa más alto de una gran competición ciclista. O al menos, de momento. Tras rechazar el consejo de participación del Parque Nacional de Sierra Nevada modificar el plan del mismo para relajar la protección y permitir dicha prueba, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía ha anunciado que seguirá el mismo camino, a pesar de que dicha resolución no sea vinculante. En el mismo consejo fueron los votos de las universidades y las organizaciones montañeras y ecologistas los que rompieron el empate entre las instituciones gobernadas por el PP (Junta y ayuntamientos) y por el PSOE (Gobierno central y otros consistorios).
Lo que estaba en juego era la modificación del Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del Parque Nacional de Sierra Nevada para permitir que la carrera atravesase 900 metros de dicha zona protegida y acabase la tradicional etapa con final granadino algo más arriba de lo habitual, en el Observatorio del Pico Veleta. Con 2.850 metros sobre el nivel del mar, se habría convertido en el final de etapa a mayor altura de Europa y en un golpe publicitario para la zona y para la propia Vuelta. Pero chocaba con la protección medioambiental del mismo y ponía sobre la mesa el eterno debate en torno a Sierra Nevada: espacio protegido o turístico.
La decisión final anunciada esta semana por la Junta de Andalucía, que se había pronunciado a favor, llega tras una votación en el consejo de participación del Parque Nacional en el que su postura salió derrotada. Se votaba modificar el punto 5.2.3.1 del PRUG de manera que se considerase la Vuelta como “prueba tradicional”, al estilo de, por ejemplo, la Romería de la Virgen de las Nieves. Finalmente el ‘No’ ganó por 31 contra 22 votos (de 61, los restantes se abstuvieron) que incluyeron un empate a 9 entre administraciones dependientes de la Junta, gobernada por el PP, y las del Gobierno, incluyendo directamente al Ministerio de Transición Energética que preside Teresa Ribera.
Dado que los ayuntamientos y diputaciones se dividieron de igual manera (los del PP, como el de Lugros o Cogollos de Guadix o la Diputación de Almería, a favor, y los del PSOE, como Fiñana, Pampaneria o la Diputación de Granada, en contra) el desempate vino por parte de los expertos, los ecologistas y las federaciones deportivas. Las posturas de las universidades de Almería y Granada, Ecologistas en Acción, SEO Bird Life, la Federación Andaluza de Montañismo, los sindicatos, la Unión de Pequeños Agricultores (UPA) y la federación de consumidores Facua también fueron en contra, decantando el debate a favor del ‘No’.
Javier Cabello, profesor del Departamento de Biología y Geología de la Universidad de Almería y uno de los expertos que coordinó la presentación de alegaciones a la modificación del PRUG —realizadas por 45 científicos de ocho universidades de toda España— explica a El Confidencial que no se trataba tanto de los “900 metros” de Parque Nacional que supuestamente iba a recorrer la etapa como de “la puerta que se abría a que otras actividades parecidas tengan carta blanca para hacer lo que quieran”. “Reabre un debate sobre los usos de conservación de Sierra Nevada”, señala.
Recuerda Cabello que las altas cumbres de Sierra Nevada son “uno de los puntos calientes de biodiversidad del Mediterráneo occidental” con más 100 de especies de insectos y de 93 especies de plantas endémicas de la zona, que ya está amenazada por el incremento de las temperaturas por el cambio climático. “Consideramos que la etapa habría sido un impacto adicional sin realmente ningún beneficio, ya que si la etapa llega un poco más arriba no supone ningún cambio más allá del publicitario”.
La postura más controvertida era la del propio director del Espacio Natural de Sierra Nevada, que engloba al Parque Nacional y el Natural, Francisco Muñoz, quien defendía el “escaso impacto” de la movilización puntual de los vehículos pesados necesarios para el final de etapa (se calcula que mínimo se instalarían cuatro unidades móviles de televisión, dos furgonetas, y una treintena de vehículos a motor, como ocurrió en dos ocasiones para llegar a la cima de la Bola del Mundo, en la Sierra de Guadarrama, en Madrid, con la misma protección de Sierra Nevada). Muñoz sustituyó Javier Sánchez, que había ocupado el cargo desde 1999, en septiembre de 2019. Hasta entonces había ejercido como asesor de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Granada con gobiernos del PP en dos etapas diferentes.
Fuentes de Unipublic, la empresa organizadora de La Vuelta a España, explicaron a El Confidencial antes de conocerse la decisión de la Junta de Andalucía que ya habían solicitado en varias ocasiones el permiso para acabar la etapa en el Observatorio IRAM Pico Veleta, en la montaña del Pico Veleta, a 2.850 metros de altitud sobre el nivel del mar. “Nos haría ilusión si en algún momento es posible, pero en ningún caso es una obsesión. Serán las administraciones las que decidan y si no es posible, seguiremos terminando la etapa en la Hoya de la Mora, como estaba previsto y ha sido otros años”.
La Hoya de la Mora se sitúa en los límites del Parque Nacional junto a la urbanización de Pradollano, en la misma estación de esquí de Sierra Nevada. Se encuentra situado junto a la carretera A-395 en su camino hacia el Veleta, pocos metros más abajo donde queda cortada al tráfico, en la barrera de la zona de control del Parque. En 2021 la Junta de Andalucía ya tomó la decisión de cortar el tráfico y prohibir el aparcamiento en la zona. La carretera hasta el Observatorio estaba cerrada a vehículos no autorizados —excepto en la Romería— desde 1999.
La etapa prevista para el próximo 4 de septiembre, Martos-Sierra Nevada, partirá de Jaén y acabará en la montaña granadina, acumulando un total de 148,1 kilómetros y casi 4.000 de desnivel entre bajadas y subidas como la del Alto del Purce. Una etapa de montaña durísima, según los expertos, y a la que la llegada al Observatorio del Veleta añadiría 1,9 kilómetros de los que los realmente conflictivos serían los 900 metros por los que se atravesaría el Parque Nacional. La altura final, de 2.850, nunca se ha alcanzado en un final en alto de Vuelta, Giro o Tour.
Fuente de la Consejería aclararon a este periódico que si las instituciones dependientes de la Junta, incluido el propio Parque Natural, estaban a favor de permitir la etapa es por entender que en el perímetro del mismo ya se habían celebrado otros eventos deportivos. Además, solo afectaría a un kilómetro de carretera ya asfaltada, “por lo que no había intervención sobre el terreno”. Aún así, insisten desde la Junta, se ha querido respetar la decisión del consejo de participación.
Hay otras razones posibles para la marcha atrás de la Junta de Andalucía. Por ejemplo, que antes de la modificación sería necesario también un informe del Organismo Autónomo de Parques Nacionales, que incluye a los 16 espacios que conforman la red, aunque tampoco hubiese sido vinculante y probablemente habría sido también en contra, sumando dos votos desfavorables. También, que salvo decisión acelerada que no se preveía antes del 15 de julio, el final de etapa en el Observatorio difícilmente habría llegado a tiempo, ya que los equipos participantes en la Vuelta deben tener un recorrido cerrado disponible con dos meses de plazo.
Finalmente y tras meses de tira y afloja la Vuelta a España no tendrá el final de etapa más alto de una gran competición ciclista. O al menos, de momento. Tras rechazar el consejo de participación del Parque Nacional de Sierra Nevada modificar el plan del mismo para relajar la protección y permitir dicha prueba, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía ha anunciado que seguirá el mismo camino, a pesar de que dicha resolución no sea vinculante. En el mismo consejo fueron los votos de las universidades y las organizaciones montañeras y ecologistas los que rompieron el empate entre las instituciones gobernadas por el PP (Junta y ayuntamientos) y por el PSOE (Gobierno central y otros consistorios).