"Hola, soy Juan Espadas": el PSOE recurre a los 'bots' para captar votos por teléfono

El teléfono comenzó a sonar y Jorge miró extrañado la pantalla. “Era un número de Madrid” desconocido, pero decidió descolgar para comprobar quién llamaba. Se llevó el móvil al oído y su sorpresa fue mayúscula. “Hola, soy Juan Espadas, candidato del PSOE a las elecciones de la Junta de Andalucía del 19 de junio. Tu voto es muy importante…”. Dejó pasar unos segundos. “Y colgué”. Este malagueño, vecino del barrio de Pedregalejo, es uno de los andaluces seleccionados por los 'bots' a los que ha recurrido el PSOE para tratar de captar votos en el tramo final de la campaña autonómica, donde el desconocimiento del aspirante socialista lastra las opciones del partido.

Jorge, en declaraciones a este periódico, explica que recibió la llamada en torno a las 12:00 de este martes y que aguantó la grabación tan solo un instante porque no siente ninguna simpatía por esta formación.

La estrategia, 'a priori', parece poco efectiva. Es cierto que escuchar al candidato socialista presentándose genera una curiosidad que hace que escuches unos segundos, pero también es cierto que hay pocas cosas más molestas que el 'marketing' telefónico. Raro es el ciudadano que cada día no recibe alguna comunicación de una compañía de seguros, telecomunicaciones o suministros energéticos. La reacción habitual es colgar casi de forma inmediata. Y si la llamada interrumpe algo importante, o se produce a la hora de la siesta, podría hasta generar rechazo.

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Al menos con Jorge contactaron a mediodía, pero este ciudadano se pregunta si ha sido elegido aleatoriamente o se han basado en su perfil personal o profesional. Él supone que "habrán comprado un paquete de números de teléfono", pero cuestiona si se realiza un cribado que encaje con un perfil que no sea votante del PSOE para que cambie el sentido de su voto el domingo.

Fuentes socialistas consultadas por El Confidencial confirman la existencia de este plan de seducción electoral, que ya fue utilizado por el PSC en la campaña de las autonómicas catalanas del pasado año y en la Comunidad de Madrid el 4-M. Espadas imita ahora a Salvador Illa —que ganó aquellos comicios— y a Ángel Gabilondo, pero no es el primero que emplea este tipo de técnicas electorales en Andalucía. En 2018, el PP de Juanma Moreno se sirvió de una fórmula similar, aunque la voz del presidente no era la que sonaba cuando ciudadanos anónimos como Jorge levantaban el teléfono.

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Fueron 1,2 millones de llamadas ejecutadas por un equipo de 50 personas, andaluces, que preguntaban sobre el conocimiento del candidato e informaban sobre el programa del partido. Un año después, en las elecciones de noviembre de 2019, fue Pablo Casado quien optó por dirigirse directamente a varios millones de ciudadanos con un SMS, aunque también utilizó el modelo de llamadas que había inaugurado Moreno un año antes. La Junta Electoral Central archivó ese caso trasladado por la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) tras denunciar la práctica el PSOE y varios de los destinatarios de esos mensajes.

Una polémica que llegó al Constitucional

El 'spam' político en campaña siempre ha sido motivo de crítica, pero los juristas consultados apuntan a que, al menos por lo conocido hasta el momento, el PSOE no ha cruzado las líneas rojas que marca la ley. "Depende de la fuente de los datos telefónicos. Si las llamadas son al azar, no habría problema: no existe un derecho a que no te telefonee un extraño. Tampoco con una base de datos legalmente obtenida", explica uno de ellos. "Mientras respeten privacidad y datos personales...", apunta otro.

El Tribunal Constitucional, de hecho, también se ha pronunciado al respecto. En concreto, en mayo de 2019, cuando atendió un recurso del defensor del pueblo y tumbó por unanimidad el apartado 1 del art. 58 bis de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General. "La recopilación de datos personales relativos a las opiniones políticas de las personas que lleven a cabo los partidos políticos en el marco de sus actividades electorales se encontrará amparada en el interés público únicamente cuando se ofrezcan garantías adecuadas", establecía el tribunal, permitiendo a los partidos políticos recoger datos personales relativos a las opiniones políticas de los ciudadanos.

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Consideró inconstitucional este apartado, pero al mismo tiempo mantuvo intacto el resto del artículo, en el que se regula la "utilización de medios tecnológicos y datos personales en las actividades electorales". Estos son los cuatro puntos que siguen vigentes a día de hoy.

1. Los partidos políticos, coaliciones y agrupaciones electorales podrán utilizar datos personales obtenidos en páginas web y otras fuentes de acceso público para la realización de actividades políticas durante el periodo electoral.
2. El envío de propaganda electoral por medios electrónicos o sistemas de mensajería y la contratación de propaganda electoral en redes sociales o medios equivalentes no tendrán la consideración de actividad o comunicación comercial.
3. Las actividades divulgativas anteriormente referidas identificarán de modo destacado su naturaleza electoral.
4. Se facilitará al destinatario un modo sencillo y gratuito de ejercicio del derecho de oposición.

Las dudas en el PP sobre las papeletas

Las técnicas de 'marketing' telefónico del PSOE no son la única novedad de esta campaña. El PP ha tenido que poner en marcha algunas técnicas llamativas, como la colocación de carteles electorales llamando a los andaluces a no ir a la playa el domingo. Al menos no sin haber votado antes o planeando hacerlo después. En el equipo de Juanma Moreno envían el mensaje de que muchos de sus potenciales electores tienen segunda residencia en la costa. Y que en Granada y Sevilla el jueves comienza un puente festivo, lo que, sumado a las altas temperaturas y el exceso de confianza en la victoria que dan las encuestas, puede provocar un éxodo a la costa. "Habrá muchos días de playa, pero solo hay un día para consolidar el cambio", reza el cartel.

Además, desde el PP andaluz han puesto en marcha una campaña en redes sociales con un vídeo en el que explican cómo votar a Moreno si no lo encuentran en sus papeletas. Los populares aseguran que han recibido numerosas llamadas en la sede regional preguntando por qué el candidato no figura en sus candidaturas provinciales. "Tiene que coger siempre la papeleta del PP", indica el vídeo difundido, que explica que los malagueños "tienen más suerte", ya que es la circunscripción por la que se presenta el presidente de la Junta. Después, muestra el resto de papeletas, con los nombres de los siete cabezas de lista que deben elegir para facilitar la victoria de Moreno. La necesidad de hacer hincapié en este extremo demuestra la utilidad de la campaña personalista del político malagueño, pero también que igual ha ido demasiado lejos en separar su marca de la de su partido.