El peluquero de 'celebrities' detenido tres veces por abusos sexuales a sus empleadas

La galería de fotos de sus redes sociales parece un ‘photocall’. Cristina Castaño, Alejo Saura, Fran Perea, Itziar Castro, Ana Duato, Imanol Arias, Lola Dueñas o Ruth Lorenzo son algunas de las ‘celebrities’ que han pasado por las manos de sus peluqueras. Actrices y actores que, horas antes de desfilar por la alfombra roja del Festival de Cine de Málaga, mostraban alegremente sus glamurosos peinados, maquillajes y vestidos de noche junto a estas profesionales de la estética. Momentos capturados en instantáneas que ocultaban que ese hombre encantador, propietario de una cadena de peluquerías, que colaboraba con firmas internacionales y que dirigía a su equipo como un maestro de orquesta, era investigado por abusos sexuales a sus empleadas. Era 2019, un año después de su primer arresto, y meses antes de su segundo. Ahora, ha sido detenido por tercera vez. Cinco trabajadoras le acusan de haber abusado de ellas, así como de perjudicarlas laboral y económicamente si no accedían a sus deseos.

La Comisaría Provincial de Málaga informó este lunes de que al arrestado, de 49 años de edad, se le considera presunto responsable de un delito contra la libertad e indemnidad sexual por el que ha sido puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Fuengirola.

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El individuo, con antecedentes por hechos similares, regenta una cadena de establecimientos de belleza, con sedes, entre otros lugares, en una céntrica vía de Málaga y un centro comercial de Fuengirola. Es la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de esta última localidad la que inició las indagaciones después de que una de las afectadas interpusiese una denuncia el pasado 11 de noviembre y cuyas pesquisas hicieron aflorar cuatro víctimas más. Todas describían situaciones de abuso, acoso y hostigamiento por parte de su empleador.

La citada fuente oficial detalló que las pesquisas han concluido que el individuo supuestamente “citaba individualmente a las trabajadoras en el interior de una cabina de estética alegando privacidad” y, “con el pretexto de revisar objetivos profesionales, aprovechaba el jefe para hacerles declaraciones sexuales y tocamientos”. Otras fuentes consultadas detallaron que el investigado presuntamente les manoseaba el culo y otras partes de sus cuerpos e intentaba ir más allá.

Todas las víctimas describieron situaciones de abuso, acoso y hostigamiento

“Cuando las perjudicadas se mostraban reacias a acceder a las pretensiones sexuales del empresario, este las hostigaba laboralmente, castigándolas con traslados forzosos a peluquerías con menor clientela, cambios de turno o asignándoles menos volumen de trabajo”. Estas represalias provocaban que las trabajadoras viesen reducidos sus ingresos, ya que gran parte del salario que percibían dependía de los “objetivos alcanzados”.

Las fuentes sondeadas por este periódico añadieron que algunas de las víctimas llevarían soportando esta situación “durante años”, a pesar de que supuestamente se lo comunicaron a la pareja del investigado. Esta circunstancia no impidió que continuara con los presuntos abusos.

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Los agentes al frente de la investigación recabaron la declaración de las cinco perjudicadas y un testigo, que les condujeron finalmente a la detención del investigado por su presunta implicación en un delito de contra la libertad e indemnidad sexual.

No era la primera vez que el sospechoso era arrestado por delitos de la misma naturaleza. En 2018 y 2020 ya se vio frente a efectivos de la Policía Nacional. No ha escarmentado; y ahora, por tercer año casi consecutivo, vuelve a ser objeto de una investigación. Los policías se preguntan si habrá una cuarta.

Las diligencias instruidas fueron puestas a disposición del Juzgado de Instrucción número 2 de Fuengirola.