El jurado declara a Montoya culpable de todos los cargos por el crimen de Laura Luelmo

El jurado popular ha considerado culpable por unanimidad a Bernardo Montoya, único acusado en el juicio por el asesinato de Laura Luelmo que se ha celebrado esta semana en la Audiencia Provincial de Huelva. Tanto la Fiscalía como las acusaciones que ejercen la familia y la Junta de Andalucía han mantenido las peticiones de pena realizadas en el día de ayer y que incluían la prisión permanente revisable.

Pasadas las 12:30, el magistrado-presidente del tribunal entregaba el objeto del veredicto, compuesto por 19 preguntas, a los miembros del jurado, que se retiraron a deliberar y que comunicaron su decisión en torno a las 18:30.

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Montoya ha sido, por tanto, declarado culpable de haber agredido sexualmente y asesinado a Luelmo, la profesora zamorana de 26 años, en la localidad onubense de El Campillo. Se enfrentaba a una doble petición de prisión permanente de la Fiscalía y la acusación particular por, entre otros delitos, la agresión sexual y el asesinato de Luelmo. La joven profesora se convirtió en otra víctima más de este peligroso delincuente que arrastraba sentencias por una muerte previa, allanamiento u obstrucción a la justicia. Circunstancia por la que la representante del Ministerio Público reclamaba que, en el caso de ser condenado de nuevo, se acordara expresamente que no sea clasificado en tercer grado penitenciario hasta el cumplimiento de un mínimo de 22 años de prisión.

En su escrito de acusación señaló que entre las 17:25 y las 17:30 horas del día 12 de diciembre de 2018 Montoya supuestamente “abordó a la joven, quien regresaba a su domicilio tras hacer la compra en un supermercado cercano”.

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El acusado, que vivía enfrente de la joven, presuntamente “sorprendió a la víctima” y la introdujo a la fuerza en su domicilio, donde la golpeó y después de dejarla “malherida y muy debilitada”. Posteriormente, la agredió sexualmente, siempre “imposibilitándole cualquier tipo de defensa”.

“Para evitar que se conociera tanto la comisión del delito que acababa de cometer como que él era el autor, con ánimo de acabar con la vida de Laura, pero no sin antes someterla a padecimientos innecesarios y un sufrimiento más intenso que el necesario para causarle la muerte, le propinó más golpes”, y finalmente le asestó “un fuerte golpe en la cabeza con un objeto contundente” hasta que murió.

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Sobre las 18:42, según el Ministerio Fiscal, la introdujo en el maletero de su vehículo para, entre las 19:16 y las 19:25, llegar y arrojar el cuerpo en una zona de difícil acceso y entre matorrales conocida como Las Mimbreras -en el punto kilométrico 166 de la carretera nacional N-435-.

El cuerpo sin vida de la joven profesora fue hallado el 17 de diciembre. Bernardo Montoya fue detenido un día después y pasó a disposición judicial el día 21, acordándose la prisión provisional comunicada y sin fianza para el mismo.

Los miembros del jurado, tras algo más de cinco horas de deliberación, han decidido por unanimidad que estos hechos que en la primera sesión del juicio eran presuntos han quedado probados. El veredicto ha sido contudente a pesar de que el acusado no había reconocido los hechos, pero sí pidió disculpas por haber, según su versión, trasladado el cuerpo de la joven. Fue la única parte que ha admitido.

La vista oral se ha celebrado a puerta cerrada después de que así lo decidiera el jurado, y tras la petición de todas las partes personadas, amparándose en los posibles daños que la exposición del caso pudiera ocasionar en la memoria y la dignidad de la víctima.