Diraya: caídas y ¿resurrección? del complejo programa informático de Salud andaluz

“Obsoleto”, critican médicos.

“Somos un modelo en toda España e incluso fuera de nuestro país”, argumentan sus técnicos.

¿Cuál es la realidad de Diraya?

Diraya no es una 'app' ni un sistema informático. Para profanos: sería un conjunto de programas informáticos. Cuenta con dos módulos de comunicación. Uno está situado en Cartuja 93 (Sevilla) y el otro está en Málaga Tech Park (la denominación del Parque Tecnológico de Andalucía). La Junta de Andalucía creará este año un tercero que, al igual que los ya existentes, se situará en un lugar que por razones de seguridad no se hará público de modo exacto.

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Agustín Rivera. Málaga

Juan Antonio Gómez Palomeque es director de Tecnología de la Información y de la Comunicación del Servicio Andaluz de Salud (SAS). Admite las incidencias que han sufrido debido a la elevada demanda de sus usuarios: 1.547 centros de Atención Primaria, 28 áreas hospitalarias, cuatro empresas públicas y 3.961 farmacias en una población de 8,4 millones de habitantes (87.597 kilómetros cuadrados).

Juanma Moreno, presidente andaluz, ha anunciado una inversión de 40 millones para un completo Plan Renove de las infraestructuras tecnológicas de información de la sanidad andaluza. “Hay que tener en cuenta la dimensión de lo que estamos hablando y hay que hacerlo de una manera totalmente segura. Si no, podemos correr el riesgo de que el remedio sea peor que la enfermedad”, cuenta Gómez Palomeque.

Sin subvenciones europeas

“No estamos esperando a que vengan subvenciones europeas ni nada de esto”, señala el directivo de la Junta a este diario. ¿Hay fecha para su puesta en marcha? Principios de verano. “Es verdad que tenemos nuestros problemas e incidencias todos los días, pero somos un modelo para toda España y parte del mundo. Andalucía es como un país en sí mismo por su tamaño”.

La centralización de los sistemas de información sanitarios arrancó a principios de la década de los dos mil, en el Gobierno de Manuel Chaves, en los centros de salud. Los hospitales se incorporaron más tarde. Esa centralización tiene la gran ventaja de agrupar todo un gran número de datos de cada paciente entrando desde un ordenador conectado a la red del SAS, la empresa con mayor número de empleados de España: 115.000 personas.

Y esta complejidad de Diraya ha provocado quejas continuas por su lentitud y por su caída del sistema que no han pasado desapercibidas a los facultativos. El Sindicato de Médicos de Málaga denunció el pasado 28 de enero que el soporte dejó de funcionar durante 24 horas.

“Ha ocasionado una gran crispación entre los profesionales y graves incomodidades a las personas que han acudido a los centros sanitarios. Con los años, se ha quedado obsoleto”, indica Antonio Martín, presidente del SSM, en declaraciones a El Confidencial. “Para las necesidades que hoy se piden, sus servidores son insuficientes y no son los adecuados. Necesitan una profunda remodelación”.

"Lo que han hecho es poner parches. El problema fundamental es que no se dimensionó bien desde el inicio", critica una médica

Carmen González es médica de Atención Primaria y responsable del colectivo Basta Ya. Su análisis sobre Diraya es bien claro: “Lo que han hecho es poner parches y más parches. El problema fundamental es que no se dimensionó bien desde el inicio, por eso no termina de funcionar bien y se desestabiliza”.

González diagnostica los principales problemas de Diraya basada en su experiencia diaria: “Se cuelga mucho rato. Puede ir lento una hora y me he encontrado, estos días pasados, con que no funciona el módulo receta, por ejemplo. Algunas partes funcionan y otras no”.

Ángel García Arjona, vocal de Atención Primaria del Colegio de Médicos de Málaga, califica los problemas de Diraya de esta manera tan gráfica: “Es como si quisieras poner 10.000 vatios de luz y contratas 5.000: ¿qué es lo que pasa? Que se producen sobrecargas. Se diseñó mal desde el principio. Es verdad que conforme ha pasado el tiempo ha ido mejorando, pero hay días en los que el servidor no puede asumir la carga que tiene porque acceden médicos, enfermeros, administrativos y Salud Responde. Todo pasa por Diraya y el problema es que las renovaciones que se hacen son siempre peores que las anteriores”.

Resulta ingente la cantidad de información que asume. Solo en el año 2000, Diraya registró más de 40,4 millones de asistencias (hojas de seguimiento) en Atención Primaria. A ello se suman más de 70 millones de prescripciones a usuarios, y 180 millones de dispensaciones de medicamentos en farmacias de la comunidad andaluza. Del mismo modo, el Módulo de Pruebas Analíticas de Diraya ha gestionado más de 113 millones de pruebas solicitadas. Las agencias sanitarias que no están en la órbita del SAS, como el Hospital Costa del Sol de Marbella, prevén incorporarse a Diraya durante 2021.

Fugas de información

“La red informática del SAS es de las más grandes de Europa, pero tiene muchas fugas de información. Hace tan solo un año, se creó un grupo de seguridad. Era necesario, porque una vez que el sistema ha crecido tanto, hay que tomar medidas para que no colapse”. Lo dice un experto informático consultado por este diario que lleva trabajando más de 10 años para un hospital andaluz de referencia.

El SAS se enorgullece de estar implantando en estos momentos un sistema de imágenes médicas que promete convertirse en uno de los más potentes de Europa. “Hay cosas que no se saben o no se ven. Si implantamos un programa de telemedicina o telellamada, se nota claramente, pero si cambias toda la infraestructura de datos, eso no lo ve nadie…”, remata Gómez Palomeque.