Susana Díaz se queda de jefa de la oposición y lista para ser de nuevo candidata del PSOE

La secretaria general del PSOE andaluz, Susana Díaz, compareció este viernes en la sede socialista en Sevilla con un mensaje muy claro para los de dentro, sobre todo, y los de fuera de su partido: se quedará como jefa de la oposición en el Parlamento, no optará a ser senadora por la Comunidad Autónoma en Madrid, aspira a volver a repetir como candidata si hay elecciones, que prevé pronto, y no considera que tenga "problemas orgánicos", puede que sí políticos, con la dirección federal del PSOE y con el secretario general, Pedro Sánchez.

Díaz, presidenta en funciones hasta que el miércoles sea investido presidente Juanma Moreno (PP), se mostró convencida de que en Andalucía se abre un tiempo de "inestabilidad" política, atendiendo las declaraciones de Vox y Cs en las últimas horas y su amago de ir a elecciones si no hay acuerdo. En ese caso, certificó que el PSOE está listo para volver a las urnas y mostró abiertamente su deseo de volver a ser candidata y recuperar la Junta.

"He estado a disposición del partido desde que era una niña y eso no es un problema", aseguró Díaz, que insistió varias veces en su comparecencia en que lidera y encabeza una candidatura que "ha conseguido más de un millón de votos" y que ganó las elecciones, por lo que tiene "legitimidad" de sobra. "Voy a estar al frente de la oposición que es lo mínimo que tiene que hacer un dirigente cuando se presenta a unas elecciones y las gana aunque no pueda formar gobierno. Con total legitimidad y responsabilidad", señaló.

Díaz evitó responder directamente a las declaraciones del secretario de organización del PSOE, José Luis Ábalos, que dejó claro que Ferraz quiere empezar a intervenir en el partido en Andalucía. Pese a los avisos que ha recibido de la dirección federal se mostró convencida de que cuenta con el total respaldo de los cuadros y militantes en Andalucía. "La Voluntad de los militantes se expresó en unas primarias y en un congreso regional donde tuve el respaldo de mis compañeros", recordó.

Opinión

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Una oposición "firme y constructiva"

Díaz descartó, como se había especulado, que vaya ser senadora por la comunidad autónoma, lo que le permitiría tener un pie en Madrid y otro en Andalucía. "Solo quiero estar al frente del grupo parlamentario parta hacer una oposición firme y constructiva. Ahí dejaré toda mi energía", subrayó, insistiendo en que la "inestabilidad" lleva a pensar en que habrá "nuevas elecciones autonómicas" sin que se agote la legislatura. "No tengo ninguna dificultad orgánica ni con el secretario general ni con la dirección federal, hubo un congreso, un proceso orgánico y desde ese momento todos los socialistas estamos al lado de la dirección federal", subrayó.

Sobre la elaboración de las listas de las municipales y el aviso de Ferraz de que no volverá a actuar como en las autonómicas, cuando renunció a intervenir y dio manos libres a Díaz para hacer unas candidaturas donde no había ni un 'sanchista', Díaz se remitió a los estatutos del partido. "Será lo que decidan los militantes, a los que 39 congreso dio más capacidad para tener la última palabra", sostuvo.

"Sí habrá momentos en los que haya discrepancias politicas y mi responsabilidad será expresar mi posición y sobre todo en lo que afecte a Andalucía. No se debe confundir lo político con lo orgánico", afirmó Díaz dejando claro que no guardará silencio frente a actuaciones de Pedro Sánchez que no le gusten. Sobre su posición en Cataluña fue muy firme. "La coherencia no se compra en el supermercado, la coherencia se tiene o no se tiene. Todo el mundo sabe lo que pienso de Cataluña que es lo mismo que he pensado siempre", subrayó.

María Jesús Montero suena como su sucesora

La secretaria general del PSOE andaluz restó crédito e importancia al manifiesto que han puesto a circular militantes socialistas pidiendo su relevo y señaló que la propia dirección federal se ha desmarcado. Sobre la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que suena desde Madrid como su sucesora y la elegida por Pedro Sánchez para ponerse al frente del PSOE andaluz, Susana Díaz dijo que es "una mujer fantástica con una amplia trayectoria" que ya fue consejera con Manuel Chaves, José Antonio Griñán y en su propio gabinete.

La presidenta en funciones prometió un traspaso de poderes "ejemplar" y aseguró que tendrán "todo el respeto por el presidente y el Gobierno y el mismo respeto pedimos para el partido que ha ganado las elecciones aunque haya sido de forma insuficiente para formar gobierno". Aseguró que no pondrá en duda "la legitimidad" de Moreno para gobernar gracias a su pacto con PP y Vox. El vicepresidente del Gobierno andaluz, Manuel Jiménez Barrios, telefoneó este jueves a última hora a Juan Marín (Cs), que será vicepresidente del futuro Gobierno andaluz, para poner en marcha entre ambos el traspaso de poderes. En cuanto Juanma Moreno tome posesión habrá 667 altos cargos, directivos de empresas públicas y eventuales que cesarán automáticamente.

Se despidió agradeciendo "a todos los funcionarios, empleados, trabajadores públicos de los servicios centrales y entes instrumentales" y pidió "respeto" hacia ellos tras días de "demasiadas descalificaciones".

Díaz confió en que a partir de ahora "Andalucía no pase a gobernarse desde Madrid" y reivindicó respeto al 28 de febrero, día de la conquista de la autonomía por los andaluces. También lamentó que en Andalucía se hable ya como "en la administración Trump", refiriéndose a la promesa de "deportación" de 52.000 inmigrantes irregulares y auguró lo peor de ese acuerdo a tres de PP, Cs y "la ultraderecha" de Vox.