Susana Díaz proclama que el PSOE "no es nacionalista" junto a Chaves, Griñán y Guerra

Susana Díaz inauguró el 13º Congreso del PSOE andaluz con un homenaje a los expresidentes de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves y José Antonio Griñán, que pasan momentos muy duros camino del banquillo por el caso ERE, y acompañada también de Alfonso Guerra, que recibió efusivos aplausos del plenario socialista después de que Ferraz lo destituyera al frente de la Fundación Pablo Iglesias. Su mensaje más claro fue en defensa de la igualdad entre territorios en pleno desafío catalán y cuando el PSOE de Pedro Sánchez ampara "asimetrías" dentro de la España "plurinacional".

Con el lema 'Andalucía, la fuerza socialista', Díaz rindió cuentas de su gestión al frente del PSOE andaluz en los últimos cuatro años sin mencionar de forma directa su estrepitosa derrota en las primarias frente a Pedro Sánchez hace sólo dos meses. Lo máximo que dijo al respecto fue para agradecer el apoyo de los socialistas andaluces en "los momentos difíciles y complicados". "Os he sentido a mi lado", dijo sin incluir su aventura fallida a la secretaría general como parte del balance de su gestión al frente del PSOE andaluz. Ni media palabra. A lo largo de todo su discurso tampoco mencionó en ningún momento a Pedro Sánchez, ante la atónita mirada de tres sanchistas andaluces de la ejecutiva federal: José Antonio Rodríguez, Nacho López y María Jesús Castro, sentados en la primera fila.

También la ausencia de Carlos Sanjuán, secretario general del PSOE andaluz durante seis años desde 1988 a 1994, fue muy criticada por los sanchistas. El exlíder del PSOE fue uno de los históricos que se alineó con Sánchez en las primarias. Durante el debate interno, militantes cercanos a Nacho López lamentaron ese "error grave" en un congreso además que rememora los 40 años de socialismo andaluz. Tampoco asistieron otros históricos como Carmeli Hermosín y Luis Yáñez, que igualmente hicieron campaña por Sánchez.

"Los socialistas somos de izquierdas y por eso siempre anteponemos la gente a los territorios. Nunca hemos sido nacionalistas", dice Susana Díaz

La escenografía fue muy cuidada. Los expresidentes andaluces, José Rodríguez de la Borbolla, Manuel Chaves y José Antonio Griñán, el ex vicepresidente Alfonso Guerra, los ochos secretarios provinciales del PSOE-A y Susana Díaz con su número dos, Juan Cornejo, y quien fue su hombre fuerte en la gestora socialista, Mario Jiménez, hicieron el 'paseillo' hasta el plenario y fueron recibidos entre aplausos.

Díaz lanzó varios dardos directos a Pedro Sánchez, que asistirá mañana domingo a clausurar el cónclave. El primero estaba en el guión y ella misma tenía claro que iba a hacerlo: el desagravio a Guerra. "Hay páginas de la historia del PSOE que no se pueden arrancar y Alfonso (Guerra) es una de ellas", proclamó desatando la ovación de los socialistas andaluces hacia el exdirigente del PSOE. "Decía y dice que no es importante el cargo sino el lugar que se ocupe en el corazón de los militantes, los simpatizantes y los ciudadanos que votan al PSOE y ese lugar lo ocupa Alfonso (Guerra) siempre, gracias Alfonso, gracias siempre", añadió. Guerra ha sido destituido de la Fundación Pablo Iglesias y ha rechazado su presidencia de honor.

Los mensajes centrales de Susana Díaz, como ya habían advertido fuentes de la dirección del PSOE andaluz, estuvieron destinados al debate territorial y el desafío de Cataluña. Los más veteranos del partido se mostraron encantados por el tono y el fondo de sus mensajes a favor de la igualdad de España. "Los socialistas somos de izquierdas y por eso siempre anteponemos la gente a los territorios. Nunca hemos sido nacionalistas", sentenció la secretaria general del PSOE-A horas antes de revalidar su liderazgo.

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Díaz subrayó la presencia de socialistas de otros territorios, mencionando a militantes del PSC, Valencia, Extremadura y Galicia junto a "otros muchos rincones de España". Consideró que la palabra que dio a los militantes andaluces hace cuatro años está cumplida y que llega con los deberes hechos. "Prometí unir al PSOE y volver a ganar elecciones y hoy venimos con los deberes hechos y la palabra cumplida", agregó. Nada sobre su fracaso en las primarias de mayo. Esa fortaleza electoral de los socialistas en Andalucía aseguró que se volverá a repetir en autonómicas y municipales de 2019.

"No queremos solidaridad, queremos igualdad, queremos lo que es nuestro y lo que es justo", prosigue Díaz subrayando un mensaje claro

El PSOE andaluz ya ha avanzado que festejará con un gran despliegue los 40 años del 4 de diciembre de 1977, cuando los andaluces salieron a la calle a pedir una autonomía para Andalucía en pie de igualdad que las llamadas nacionalidades históricas. "Andalucía salió a la calle para pedir lo que era nuestro, lo que era justo", defendió la presidenta de la Junta dejando claro que volverá a hacerlo en el debate abierto sobre la futura financiación autonómica.

"No queremos solidaridad, queremos igualdad, queremos lo que es nuestro y lo que es justo", prosiguió Díaz subrayando un mensaje muy claro a favor de la igualdad en un momento en el que el PSOE defiende la España "plurinacional" y sus portavoces avalan las "asimetrías" entre territorios dentro de la Constitución. Un día antes el secretario general del PSPV, Ximo Puig, hacía las paces públicamente con Pedro Sánchez y defendía un giro nacionalista a su partido para competir a la izquierda con Compromís. Los socialistas andaluces ya venían advirtiendo cuál iba a ser su bandera y Díaz cumplió, dejando clara su "libertad de opinión", como defendieron desde sus filas.