Las víctimas del incendio de Doñana: "Las llamas se quedaron a cuatro metros"
La angustia se apoderó de los habitantes de la zona. No hay que lamentar daños personales, pero los daños materiales son severos
“¡Vámonos, vámonos, que hay fuego!”. Con estas palabras desesperadas se alertaron los vecinos de Mazagón del incendio que iba poco a poco cerniéndose sobre sus casas. Macarena Medina es una de las afectadas por el fuego, que ha abrasado su casa y ha dejado completamente inservibles todas sus pertenencias. En declaraciones a 'El Programa de Ana Rosa', Macarena ha relatado cómo vivió los momentos más angustiosos: “Había muchísimas llamas que se quedaron a unos cuatro metros de nosotros. Eran las 00.40 y el calor era insufrible”.
Macarena no estaba en su casa cuando se originó el incendio: “Estábamos en la casa de al lado, en una boda que se estaba celebrando. Vimos en Facebook y en WhatsApp que había un incendio a la entrada de Mazagón. Y empezó a haber humo, y más humo, y más humo, y muchas cenizas”. Después, la afectada acudió a su hogar, desde donde salió huyendo con su familia: “Teníamos claro que no podíamos salir corriendo ni andando porque el humo era tal que no podíamos respirar. No entendíamos qué hacía allí el fuego, porque empezó como a cinco kilómetros”.
En otro programa de Telecinco, 'Viva la Vida', se emitieron las declaraciones de Diego Velo, un hombre que se comportó como un auténtico 'héroe' al salvar la vida de su familia y otros vecinos. Residente en la urbanización Casa de Bonares, tras poner a salvo a sus familiares volvió a por otras personas que quedaron entre el fuego para llevarles hasta la playa lejos de las llamas. “La gente, por el pánico, se tiraba dentro del coche hasta que se quedó tirado y ya no pudimos seguir adelante”, recordó ante las cámaras de televisión.
Con el recuerdo del incendio de Portugal muy vivo en la cabeza –“lo pasamos bastante mal, sobre todo porque es muy reciente y lo teníamos todos en mente”–, Diego regresó a su barrio para recoger a todos cuantos pudo. Afortunadamente no hay que lamentar daños personales, pero sí ha habido varios vecinos que han perdido sus casas. “Una vecina muy próxima a nosotros ha perdido la casa totalmente, y otra la ha perdido solo parcialmente porque los bomberos, gracias a Dios, actuaron rápidamente”, dijo.
El incendio registrado en Moguer (Huelva) obligó a desalojar a unas 2.000 personas de localidades situadas en el entorno del Espacio Natural Doñana, donde ha llegado a adentrarse. Además, el fuego ha motivado el desalojo del Centro de Cría del Lince Ibérico de El Acebuche y la reubicación de los animales que alberga –una hembra ha muerto a consecuencia del estrés sufrido por los traslados–.
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Más de 550 efectivos del Infoca, de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y del Consorcio Provincial de Bomberos, con más de dos decenas de vehículos terrestres y hasta 25 medios aéreos, trabajan en la extinción del fuego. A causa del avance de las llamas, solo del cámping Doñana tuvieron que ser evacuadas esta madrugada 1.500 personas, a las que hay que sumar alrededor de 800 más del resto de infraestructuras desalojadas, como el Parador Nacional de Mazagón.
“¡Vámonos, vámonos, que hay fuego!”. Con estas palabras desesperadas se alertaron los vecinos de Mazagón del incendio que iba poco a poco cerniéndose sobre sus casas. Macarena Medina es una de las afectadas por el fuego, que ha abrasado su casa y ha dejado completamente inservibles todas sus pertenencias. En declaraciones a 'El Programa de Ana Rosa', Macarena ha relatado cómo vivió los momentos más angustiosos: “Había muchísimas llamas que se quedaron a unos cuatro metros de nosotros. Eran las 00.40 y el calor era insufrible”.