Aído aterriza en Andalucía pero descarta ser candidata para dirigir el PSOE-A
La exministra deja claro que seguirá con sus responsabilidades en la ONU y que no tiene previsto volver a la política en el corto plazo. La tensión en las filas andaluzas sigue subiendo
El próximo lunes, la exministra de Igualdad Bibiana Aído estará en Andalucía. En concreto, participará en Granada en unas jornadas de la universidad —tituladas 'Sobre el reto global de la unidad'— y estará en otra conferencia en Córdoba con motivo de los 10 años de la ley de igualdad. Esa agenda estaba "cerrada desde hace meses", señala la propia Aído para frenar especulaciones.
Quien fuera ministra en el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, dedicada a la ONU desde su retirada de la vida política, descarta totalmente en conversación con este periódico que su regreso a Andalucía tenga nada que ver con las informaciones que apuntan a que podría dar el salto de la mano de Pedro Sánchez para disputar el liderazgo del PSOE andaluz a Susana Díaz. "Nada que ver con esa información. Tengo un compromiso y unas responsabilidades con ONU Mujeres que son mi prioridad y que voy a seguir desempeñando", aclara desde Ecuador a preguntas de El Confidencial. Su vida está en Quito, donde se trasladó desde Nueva York.
Ya voces cualificadas del entorno de Pedro Sánchez habían descartado totalmente que empujaran a Aído, socialista andaluza del afamado clan de Alcalá de los Gazules (Cádiz), para desestabilizar a Susana Díaz. Así lo han entendido, sin embargo, en el entorno de la presidenta andaluza, hasta el punto de que muchos dirigentes del PSOE andaluz dan por hecho que los sanchistas han lanzado esta posibilidad como "una amenaza" para meter presión tras su victoria en las primarias.
"No tengo planes ni expectativas de volver a la política", reitera Aído, que asegura que si alguien ha pensado en ella para sumarse a la nueva dirección de Pedro Sánchez, es "un honor" que no tiene pensado en ningún caso aceptar. "Mis responsabilidades actuales son con ONU mujeres y con el avance de los derechos de las mujeres en Ecuador. No tengo planes para volver ni a la política ni a España", quiere dejar claro la exministra.
Mientras Pedro Sánchez diseña su nueva ejecutiva federal y perfila quiénes serán sus personas de confianza en Ferraz y en el grupo parlamentario del Congreso, en Andalucía siguen los tirones entre los sanchistas y los dirigentes afines a Susana Díaz por el tema de las listas al congreso federal. Eso a pesar de que la dirigente andaluza dejó claro que no dará la batalla en el congreso federal y proclamó "el fin del susanismo". Su oferta de paz pasa por dejar hacer a Pedro Sánchez en Ferraz a cambio de que no se interfiera en el Gobierno andaluz ni en el próximo congreso regional del PSOE-A, que se celebrará a finales de julio.
La guerra más dura se está librando en el PSOE de Sevilla, al que pertenecen dos sanchistas de peso que se da por hecho que irán en la futura ejecutiva federal, se trata de Alfonso Rodríguez Gómez de Celis y del alcalde de Dos Hermanas, Quico Toscano. Ambos podrían quedar fuera del congreso federal si no hay un acuerdo en el PSOE sevillano, acostumbrado a suicidas guerras fratricidas. Susana Díaz insiste en que nadie ha dado órdenes de rechazar la oferta de los sanchistas de pactar las listas de delegados al congreso federal conforme a los porcentajes de las primarias, como se está haciendo en otros territorios, y que cada agrupación tiene manos libres. En Triana, la suya, sí hubo acuerdo. En Dos Hermanas, por ejemplo, no, apuntan.
Pero el acuerdo provincial para evitar una dura guerra en los 'congresillos' del sábado no parece que vaya a llegar en Sevilla. Como prueba el cruce de reproches públicos de Rodríguez Gómez de Celis y Fernando Villalobos, presidente de la Diputación y del PSOE de Sevilla, al que la presidenta andaluza cariñosamente llama "tito". Los de Sánchez piden hechos y no palabras y reclaman acuerdos. El mensaje es claro: "No queremos dar alterativa ni presentar una candidatura rival a Susana Díaz en el congreso regional, pero si nos siguen pisando el cuello, no vamos a tener otro remedio", en palabras de los sanchistas.
Díaz se enfrentó este jueves a la oposición en el Parlamento tras su derrota en las primarias. Podemos pasó de puntillas e IU le dio la "bienvenida" al tiempo que Antonio Maíllo le reclamó un cambio de Gobierno, tildando al actual de "obsoleto, agotado y conservador". Desde el PP andaluz Juanma Moreno le dejó claro que su caída en las primarias "no le va a salir gratis" y aprovechó para insistir en que es "tan pésima gestora que ni los suyos le compran el modelo". "Usted es así, esa soberbia... Le falta decir que ha perdido porque ha querido perder", espetó. Díaz lamentó "la frustración" de su adversario porque "su única obsesión era que me fuera para no tener que volver a enfrentarse a mí". Sabe que la oposición tiene un poderoso relato para tratar de desbancar al PSOE de la Junta después de tres décadas largas sin alternancia en Andalucía.
El próximo lunes, la exministra de Igualdad Bibiana Aído estará en Andalucía. En concreto, participará en Granada en unas jornadas de la universidad —tituladas 'Sobre el reto global de la unidad'— y estará en otra conferencia en Córdoba con motivo de los 10 años de la ley de igualdad. Esa agenda estaba "cerrada desde hace meses", señala la propia Aído para frenar especulaciones.
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