Varapalo de la Junta a la alcaldesa de Marbella por dar una licencia ilegal a Tomás Olivo

La Consejería de Obras Públicas y Vivienda de la Junta andaluza ha pedido al Ayuntamiento de Marbella que revoque la controvertida licencia de obras que concedió en diciembre al empresario Tomás Olivo, en su día mano derecha de Roca, para construir un edificio de viviendas de seis plantas en el solar que ocupaba la casona de Radio Nacional. Tal como informó este periódico, la oposición municipal se manifestó en las puertas del edificio denunciando esta ilegalidad y el concejal Javier de Luis, por su parte, interpuso un recurso contencioso administrativo denunciando la medida.

 

Desde la Junta instan ahora a la regidora Ángeles Muñoz, que otorgó el permiso de forma indebida, que rectifique. Los técnicos de la Conserjería de Obras consideran que, “en aquel momento en el que estaba tramitación el nuevo PGOU, se introducía un tratamiento distinto al suelo en cuestión”. También estiman en el escrito que “la construcción autorizada no se ajusta al nuevo planeamiento”, sino que sigue la normativa del antiguo PGOU del 1986. Tendrá que ser el juez el que, en este nuevo contencioso entre Junta y Consistorio marbellí, dictamine si la licencia es ilegal o no.  

Según la oposición, “este es el primer varapalo urbanístico a un gobierno municipal que está haciendo la ley como le viene en gana”. El concejal socialista Javier de Luis, que viene denunciando las tropelías urbanísticas tanto ahora como en la época gilista, manifestaba “su agrado” a El Confidencial por la medida adoptada por la Junta de Andalucía, que “repercutirá en el bien del pueblo de Marbella”.

El edil presentó hace unos meses un recurso contencioso administrativo al juzgado número 5 de Málaga para impugnar la decisión del Ayuntamiento. En dicho recurso, el concejal socialista denunciaba que “el otorgamiento de la licencia y la construcción del nuevo edificio previsto, en sustitución del existente, requiere obviar, lisa y llanamente, el régimen urbanístico que establece el Nuevo Plan General de Ordenación Urbanística de Marbella, cuya eficacia anticipada o cautelar, en los términos previstos en el artículo 27 de la Ley 7/2002, de 17 de diciembre, ha sido ignorada”.

El Ayuntamiento, que recibió el requerimiento de la Junta el 12 de mayo, indica que la licencia otorgada a Olivo está avalada por informes técnicos y jurídicos y se ajusta a la ley. En estos momentos, prepara una contestación a la consejería. Por su parte, el departamento del gobierno autónomo de Obras Públicas y Vivienda impugnara la licencia en los tribunales si no es revocada de oficio.

 

La solicitud de Olivo

El PGOU anterior contemplaba uso residencial en el solar de los antiguos locales sindicales y sede de RNE, que General de Galerías Comerciales, la sociedad de Olivo, se adjudicó cuando el Estado la sacó a subasta pública. Eso ha sido lo autorizado en la licencia municipal, cuando el nuevo PGOU, que sólo estaba pendiente de la aprobación definitiva cuando ésta se expidió, prevé uso hotelero y terciario y la obligación, además, de ceder 1.216 metros cuadrados para equipamiento público al municipio.

La Ley de Ordenación Urbanística de Andalucía (LOUA) estipula que la concesión de licencias de obra quedará suspendida en el momento en el que un municipio apruebe inicialmente su planeamiento y en tanto se tramita en las zonas afectadas por cambios.

La aprobación del PGOU se produjo en julio de 2007, pero el consistorio no delimitó las zonas de suspensión. Sí lo hizo cuando se produjo la primera aprobación provisional, el 28 de octubre de 2008. Curiosamente, trece días antes el promotor, Tomás Olivo, solicitó formalmente la licencia de obra, y el consistorio optó por excluir de la suspensión aquellas licencias que ya se hubieran solicitado con anterioridad. Ahora la Junta echa atrás todo.