Podemos se abre a ceder inmigración a Cataluña si Junts vota regularizar extranjeros

La Moncloa mantiene varios frentes abiertos con Junts; el más crucial es que Carles Puigdemont no puede regresar a España, y a esta circunstancia capital se añade, según el relato de los posconvergentes, toda una lista de promesas incumplidas, que les ha llevado a abrir una reflexión sobre su relación con el PSOE. Primero iban a liquidar su debate interno en verano, después en otoño, y ahora el secretario general de Junts, Jordi Turull, ha puesto una nueva fecha: 21 de diciembre.

Entre las cuestiones pendientes figura el traspaso de las competencias sobre inmigración a Cataluña, que no pudo ser aprobado por el veto de Podemos. Este asunto podría tener una solución con la aprobación de la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) de regularización de extranjeros, que es una "prioridad" para los morados. Ya hubo contactos entre la portavoz de Junts, Míriam Nogueras, y la secretaria general de Podemos, Ione Belarra, aunque resultaron infructuosos.

Belarra pedía la retirada de la proposición de ley y abrir la negociación, mientras que Junts proponía que apoyaran la tramitación e iniciar después las conversaciones. Pero el terreno de juego ya se ha establecido. El propio portavoz de Podemos, Pablo Fernández, lo ha verbalizado públicamente: "Se lo decimos abiertamente al PSOE, a Junts y al resto de partidos que votaron a favor: es muy sencillo, que el Gobierno apruebe una regularización extraordinaria de inmediato y que eliminen los elementos racistas de esa proposición de ley". "Si se acomete la regularización y se eliminan las partes racistas del preámbulo, podrán contar con los votos de Podemos", subrayó.

Los morados exigen una implicación activa del PSOE porque la regularización podría aprobarse ya como un real decreto ley en el Consejo de Ministros y convalidarse luego en el Congreso. El Gobierno, por ahora, no se siente concernido y apuesta por la vía parlamentaria, mucho más larga. En abril de 2024, todos los grupos menos Vox respaldaron la tramitación de la ILP, pero lleva varada desde entonces. Ni se ha llegado a acordar su alcance (qué inmigrantes irregulares y cuántos) y tampoco está claro si, una vez se defina, existe una mayoría suficiente para que salga adelante.

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Orillada más de un año, este tema revive ahora como posible moneda de cambio del traspaso de competencias de inmigración a Cataluña. Podemos no ha puesto nunca reparos a esa descentralización, pero cree que algunas de las consideraciones que hace el texto son "racistas". Junts no acepta estas acusaciones aunque no se niega tampoco a retocarlas.

El problema es que las relaciones entre ambos partidos están muy deterioradas. Los morados demandan la mediación del PSOE. No sólo para darle urgencia a la ILP sino para negociar con Junts los cambios en el texto, que es fruto de un acuerdo entre socialistas y posconvergentes. Dentro de ese paquete, también serían los responsables de arrastrar a Carles Puigdemont para que vote a favor de la regularización de inmigrantes. Una posibilidad que arroja muchas dudas, por el duro combate electoral que, según todas las encuestas, está librando Junts con el partido de corte independentista y xenófobo, Aliança Catalana.

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El Gobierno, por ahora, no se ha movido porque entienden que no se dan las circunstancias. Su tesis es que, tras los duros reproches que han intercambiado Junts y Podemos, es "pronto" para abordar este asunto dual. Antes, afirman, se debe "enfriar" la situación.

Los morados exigen una implicación activa del PSOE porque la regularización podría aprobarse ya como un real decreto ley en el Consejo de Ministros y convalidarse luego en el Congreso. El Gobierno, por ahora, no se siente concernido y apuesta por la vía parlamentaria, mucho más larga. En abril de 2024, todos los grupos menos Vox respaldaron la tramitación de la ILP, pero lleva varada desde entonces. Ni se ha llegado a acordar su alcance (qué inmigrantes irregulares y cuántos) y tampoco está claro si, una vez se defina, existe una mayoría suficiente para que salga adelante.