La abstención de ERC y Junts permite la reprobación de la ministra Redondo por las pulseras 'fake'

Los golpes parlamentarios se han convertido en la constante vital del Gobierno. Hace menos de 24 horas, el Ejecutivo vio cómo caía su pacto con Junts para ceder las competencias migratorias a Cataluña. Hoy experimenta un nuevo varapalo sin efectos prácticos, pero de alto simbolismo político por la crisis de las pulseras fake, con Ana Redondo en la diana. El Partido Popular, que ha escalado su ofensiva contra Sánchez por esta cuestión, ha conseguido sacar adelante la reprobación de la ministra de Igualdad, una iniciativa en la que también se solicitaba a Sánchez forzar su dimisión por ejercer "violencia institucional contra las víctimas".

Tanto ERC como Junts han optado por la abstención, facilitando el trámite, una posición a la que se han unido otras dos fuerzas minoritarias del bloque de investidura: BNG y Coalición Canaria. La votación se ha saldado finalmente con 170 votos a favor, 162 en contra y 16 abstenciones. La formación de Carles Puigdemont ya había dejado entrever su postura porque este martes también se abstuvo en el Senado en una iniciativa parecida presentada por el PP. La posición que ha sorprendido es la de ERC. La portavoz del grupo republicano, Pilar Vallugera, reconoció en su intervención que habían modificado el sentido de su voto a lo largo del día.

El malestar de los socios ha ido in crescendo a lo largo del día, especialmente después de que la ministra Redondo asegurase a primera hora de la mañana en el Congreso que "ninguna mujer que llevaba pulsera ha sido asesinada", y mezclase este asunto con crisis como la de la DANA en la Comunidad Valenciana. "Me quieren reprobar a mí y no reprueban al señor Mazón, que tiene a sus espaldas más de 200 hombres y mujeres víctimas", llegó a sostener en el control de este miércoles.

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"Con los meses que han pasado y con los avisos que tenían, han sido incapaces de pararlo y de dar una explicación a aquellos que confiaron lo suficiente en ustedes como para darles la investidura", censuró Valluguera desde la tribuna. Censuró de este modo las declaraciones de Redondo y lamentó que no sea ella la que comparezca mañana en la Comisión de Seguimiento del Pacto contra la Violencia de Género en el Congreso. El Gobierno enviará a su lugar a la delegada del ramo, Carmen Martínez Perza. "Deberían ser mucho más responsables", criticó.

Mucho más dura ha sido la diputada de Junts, Pilar Calvo. La formación independentista evitó optar por el voto a favor de la reprobación por "esperar" a las explicaciones de la delegada del Gobierno este jueves, pero su discurso fue igualmente crítico con el Ejecutivo. La dirigente utilizó la última campaña del Ministerio de Igualdad en la que se invita literalmente a los hombres a "tener huevos" para frenar la violencia de género para exigir lo mismo a la ministra Redondo. "Ustedes no han tenido huevos u ovarios para explicar cuando tocaba que el sistema de control de los maltratadores ha sufrido graves disfunciones", censuró.

Esos errores, censuró, "han podido poner en riesgo a miles de mujeres, mujeres que viven con miedo, estresadas y pendientes de si salta la alarma. Es absolutamente inadmisible que la ministra de Igualdad mezcle este tema con la DANA o diga que no ha muerto ninguna mujer por estos fallos. Siguen siendo víctimas, del miedo, de las amenazas", subrayó. La formación que preside Carles Puigdemont aprovechó el asunto para lanzar la enésima advertencia al Ejecutivo en un momento de máxima tensión entre las dos formaciones. "Sin transparencia no podrán seguir teniendo nuestro apoyo".

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Ni el portavoz del BNG ni la de Coalición Canaria han intervenido en el pleno, aunque han manifestado su malestar a través del sentido de su voto. El PNV también lanzó críticas ácidas frente a la gestión de la ministra, y avisó que "no vamos a aceptar las triquiñuelas y el escapismo". "No actuaremos con peloteo ni haremos como que aquí no ha pasado nada. Se tiene queexplicar cómo ha ocurrido y por qué ha pasado", apuntó el diputado Joseba Aguirretxea. No obstante, los jeltzales se consolidan como el socio más estable del Ejecutivo, y optó por el voto en contra. "Señorías del PP, nadie nos va a dar lecciones en esta materia".

El debate ha estado marcado por la bronca y la tensión contra una ministra de Igualdad que, sin embargo, se ausentó de la sesión. La portavoz del PSOE, Trinidad Argota, recriminó al PP que "utilice a las mujeres" para arremeter contra el Gobierno, y aseguró que "las víctimas han estado protegidas en todo momento", entre gritos de "¡Mentirosa!" procedentes de la bancada de la oposición.

El partido de Feijóo ha desplegado una ofensiva a todos los niveles por esta cuestión. Consideran "imperdonable" que el Gobierno no subsanase los fallos de los dispositivos pese a que, tal y como publicó El Confidencial, recibiesen múltiples avisos procedentes de múltiples instancias, entre ellos el Consejo General del Poder Judicial. No sólo se avisó a la ministra Redondo de las deficiencias, sino que también se notificó por escrito al ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños.