El crucero más elegante atraca en España: sirve 1,5 millones de huevos al año, tiene una biblioteca de dos plantas, un teatro con palcos y tres anclas

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El puerto de Valencia ha recibido este domingo la majestuosa silueta del Queen Victoria, el crucero de lujo de la naviera Cunard, que ha atracado a primera hora en la Marina con más de 2.000 pasajeros deseosos de saborear el Mediterráneo. La llegada del buque, de 294 metros de eslora y casi 55 metros de altura sobre la línea de flotación, se ha convertido en todo un acontecimiento para curiosos y aficionados a los barcos, que han llenado los muelles para fotografiar a esta dama de los mares.

Quienes se acercaron a contemplarlo quedaron cautivados por sus líneas clásicas y los detalles art déco que realzan salones, escalinatas y lámparas estilo años 30. Con 90.000 toneladas de registro bruto, 12 cubiertas para huéspedes y 1.035 camarotes, entre ellos Grand Suites de hasta 144 m², el Queen Victoria combina la tradición de los grandes transatlánticos con el confort propio del siglo XXI.

A bordo, la vida se articula en torno al imponente Grand Lobby de triple altura y el Queens Room, donde cada tarde se sirve el célebre té al estilo británico con camareros de guantes blancos. El Royal Court Theatre, de tres plantas y palcos al más puro estilo West End, se suma a una biblioteca de dos niveles con 6.000 volúmenes, pistas deportivas al aire libre y dos piscinas exteriores que hacen de este buque una auténtica ciudad flotante.

Sabores y bienestar en alta mar

La oferta gastronómica se reparte entre cuatro comedores principales: desde la opulencia de Queens Grill y Princess Grill hasta la atmósfera art déco del Britannia Restaurant, inspirado en los vagones del Orient Express; todos ellos acompañados por la carta de vinos que ha hecho famosa a Cunard. Para opciones más informales, el bufé Lido despliega estaciones de pizza al momento, mientras que el Golden Lion Pub conquista con clásicos de la cocina británica.

Cuando cae el sol, la coctelería del Chart Room se transforma en punto de encuentro antes de los espectáculos del Royal Court Theatre o de las veladas con música en vivo del Yacht Club, donde la pista no se vacía hasta bien entrada la madrugada. En cubierta, las dos piscinas garantizan chapuzones con vistas a la costa valenciana, y las zonas de pádel o tejo animan las horas de travesía.

El relax absoluto se alcanza en el spa Mareel Wellness & Beauty, diseñado junto a Canyon Ranch: piscina de talasoterapia, sala de meditación con tumbonas de resonancia acústica y rituales de baño de algas conviven con un gimnasio panorámico equipado para quienes no renuncian a su rutina fitness ni en vacaciones.

Curiosidades que enamoran

El Queen Victoria luce una colección de más de 500 obras de arte, incluidos grabados originales de la reina Victoria y el príncipe Alberto, que salpican pasillos y salones como un museo itinerante. Para dominar el mar, dispone de seis motores diésel que impulsan dos cápsulas azimutales y tres hélices de proa, alcanzando 23,7 nudos (44 km/h) sin perder la elegancia. Como dato curioso final, el barco cuenta con tres anclas (dos en uso y una de repuesto) y cuenta con Wi-Fi y señal GSM en todos los camarotes y espacios comunes.

A lo largo del año, el Queen Victoria moviliza cifras de consumo realmente asombrosas: más de 950.000 tazas de té, cerca de 27 toneladas de café, 19.285 cajas de cereales, 109.000 litros de zumo, 200 toneladas de patatas, más de 1,5 millones de huevos frescos y cerca de 352.000 botellas de vino, todo para satisfacer a pasajeros y tripulación en sus travesías.