El 'modelo Berlusconi' pincha en RTVE: caen Broncano y el resto de estrellas 'políticas'

José Pablo López ha transformado RTVE con el objetivo prioritario de competir de tú a tú con las cadenas privadas, tanto en números como en contenido. Pero la "obsesión" por las audiencias, como relatan fuentes internas de la Corporación, está lejos de los resultados deseados en líneas generales. La niña bonita de la televisión pública, La Revuelta de David Broncano, lleva semanas de retroceso e incluso ha llegado a caer por debajo de los dos dígitos de cuota de pantalla, casi la mitad que en sus mejores momentos. Y los nuevos espacios de Malas Lenguas y Mañaneros 360, con una notable carga política, tampoco mejoran los registros. La gran esperanza es La Familia de la tele, el Sálvame 2.0, aunque a riesgo de rebasar los límites del interés general y el servicio público.

La reflexión interna, según las voces consultadas, es que para este viaje no hacían falta tantas alforjas. "Si todo justifica la audiencia, pero la audiencia no te responde, tienes un problema", dicen fuentes cercanas a la Corporación, al hilo de los últimos datos. Prácticamente ninguna de las nuevas apuestas televisivas tiene el respaldo del público, ni siquiera Broncano, que tras su estreno llegó a superar el 17% de share.

RTVE puso todos los huevos en la cesta de La Revuelta. Tanto, que a finales del año pasado asumió una penalización de un millón de euros con Loterías y Apuestas del Estado por relegar el sorteo nocturno de Loterías para dar mayor fuerza y visibilidad a Broncano. Y mientras la propia Corporación investiga internamente la comisión de presuntos delitos en la maniobra, la producción se desinfla paulatinamente y pierde fuelle ante su principal competidor, El Hormiguero. En abril, según los datos publicados, obtuvo el 11,10% de cuota media, con más de 1.300.000 espectadores. El pico este mes fue un 14,5% y el suelo, un 7,5%.

Los nuevos contenidos, añaden estas fuentes, cumplen una misión doble. Competir con Atresmedia y Mediaset, por un lado, y reforzar el mensaje político desde la cadena pública. "Todo tiene un sesgo y un objetivo muy claro, absolutamente todo", declaran a este diario. Y en este molde es donde encajan Malas Lenguas y Mañaneros 360, los programas 'políticos' de Jesús Cintora y Javier Ruiz, respectivamente, llamados a triunfar frente a El Programa de Ana Rosa y Al Rojo Vivo.

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La dirección del ente decidió emitir simultáneamente los dos proyectos, en La 1 y en La 2, para reforzar el arranque. Pero los resultados también son mejorables. Mañaneros 360 no ha pasado del 6% de cuota en el primer canal de TVE durante los tres primeros días en la parrilla, por debajo de Mañaneros, que llegó a superar el 10%. Y el balance en el segundo canal es mucho peor, con un 1,10%, un 0,9% y un 0,6% en el mismo periodo, con menos de 50.000 personas conectadas a la televisión.

El caso de Malas Lenguas, dirigido por Cintora, es un naufragio total. Empezó el 9 de abril con un 9,3% en La 1 y un 2,5% en La 2 y desde entonces el retroceso es progresivo y cada vez más muy acuciante. La media del mes, ya emitiéndose únicamente en La 2, no pasa del 3% de share y de los 200.000 espectadores, con un mínimo de 2,4%. Su presupuesto, sin embargo, supera los 3 millones de euros, mientras que Mañaneros y Mañaneros 360 roza los 700.000 euros.

Modelo Berlusconi

El presidente del ente público se afanó durante la última Comisión Mixta del Congreso, el pasado 27 de marzo, en diluir todas las críticas de la oposición y en señalar a los medios de comunicación por sus informaciones sobre RTVE. López negó, en primer término, las presuntas irregularidades en torno a casos como el de Broncano y Loterías o las deudas millonarias de RTVE. Y acto seguido garantizó el éxito de los nuevos programas. "Se trabaja en un tipo de programa y escaleta de contenidos que creo que va a ser del agrado de todos", declaró ante las preguntas por el Sálvame 2.0.

La Familia de la tele, precisamente, es otra de las preocupaciones que destacan internamente. En RTVE nadie tiene dudas de que la cadena ha abrazado ya el 'modelo Berlusconi', con contenidos inéditos hasta la fecha. Francisco Sierra, diputado de Sumar, ya alertó durante la misma comisión que el liderazgo de la audiencia no puede ponderarse por encima del interés general y la vocación de servicio público, con el aviso de que este modelo, "zafio, banal e inconsistente", es peligroso.

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El rechazo prácticamente generalizado, con críticas de derecha a izquierda, ha sido ignorado de momento por José Pablo López. El presidente de la Corporación pública insiste en que el nuevo programa encontrará un punto de equilibrio entre el entretenimiento y los estándares mínimos de calidad y rigor que exige la cadena, aunque lo cierto es que la audiencia está aún por ver. El estreno finalmente será este lunes, día 28.

El sueldo de las nuevas estrellas de RTVE más allá de Broncano y los contenidos políticos también son una incógnita. La Corporación pública, como ha informado este periódico, se ha negado a detallar los emolumentos de Belén Esteban, María Patiño y el resto de colaboradores del Sálvame 2.0, bajo el pretexto de que esta información vulnera el "derecho a la protección de datos".

"La información que se facilita engloba igualmente las retribuciones del personal interviniente sin identificación individual, con el fin de conciliar la transparencia en la gestión de fondos públicos con la protección de la información confidencial", contesta la Secretaría General de RTVE a una pregunta a través del Portal de Transparencia, donde únicamente detalla el coste total del producto: 5.310.414 euros.