Bolaños señala al juez otro cargo de Moncloa que certificó las funciones de la asesora de Begoña Gómez

El ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, aportó al juez que investiga a la mujer del presidente del Gobierno el nombre de otro alto cargo de Moncloa llamado Raúl Díaz Silva. El magistrado Juan Carlos Peinado investiga si Begoña Gómez usó a una asesora para sus negocios privados y este miércoles interrogó como testigo a Bolaños, quien se desmarcó de la contratación de esta mujer llamada Cristina Álvarez. En un momento de su interrogatorio, el ministro identificó a este otro funcionario, actual coordinador del personal del Palacio de la Moncloa.

Según informan a El Confidencial varias fuentes jurídicas presentes en la diligencia de este miércoles, el ministro se ausentó unos minutos de la sala de la Moncloa, donde estaba prestando declaración ante el juez. A su regreso, identificó a este alto cargo. Raúl Díaz Silva firmó el pasado 6 de febrero un documento remitido al Juzgado en el que se presentaba como “responsable de la administración y de la coordinación de personal de los edificios Palacio y Consejo de Ministros en el Complejo de la Moncloa”.

En ese mismo escrito, al que ha tenido acceso este periódico, describió al juzgado las funciones de esta asesora, amiga de Begoña Gómez: “Certifico que la empleada pública de Presidencia de Gobierno, María Cristina Álvarez Rodríguez, desempeña tareas de colaboración inmediata, de carácter logístico y organizativo en el marco de la atención de la esposa del presidente del Gobierno, en las que predominan las notas de afinidad inherentes a la confianza”.

Raúl Díaz, “vocal asesor”, enumeró lo que se entiende como tareas de confianza: “La gestión de la agenda y la preparación de la presencia en reuniones, visitas y/o eventos, la gestión y administración de las comunicaciones, la asistencia telefónica y documental, acompañamiento en desplazamientos y la interlocución y coordinación con los equipos de protocolo, seguridad, asuntos exteriores y resto de departamentos implicados en la organización de actos y viajes del presidente del Gobierno o derivados de su propia agenda”.

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Este alto cargo figura como responsable de algunos contratos de personal dependientes de la Secretaría General de Presidencia del Gobierno. Al menos tres fuentes conocedoras de la diligencia precisan a El Confidencial que Bolaños explicó este miércoles el organigrama y citó a Raúl Díaz Silva. Hace unos años, un periódico local de Huelva le dedicó una información en la que presumía de vecino por su cercanía y confianza con Pedro Sánchez. El citado diario ilustraba la información con fotos y en una de ellas se aprecia a este alto cargo abrazando en el Congreso de los Diputados al líder del Ejecutivo.

El Confidencial informó en enero que Raúl Díaz Silva fue el encargado de redactar los pliegos de un contrato por 18.138 euros para poner fin a una plaga de palomas en La Moncloa. También ha acompañado al matrimonio a viajes oficiales en el extranjero. Las citadas fuentes consultadas precisan que fue el juez quien le pidió a Bolaños confirmar la identidad de este cargo, cuya identidad ya obraba en el caso.

Vaticina más citaciones en el caso

A su salida de la declaración, la abogada que representó a las acusaciones populares unificadas durante el interrogatorio, Marta Castro, evitó dar detalles del contenido del interrogatorio de Peinado, pero sí avanzó su impresión de que esta diligencia abre la puerta a escuchar nuevos testimonios en la causa.

Bolaños defendió la legalidad del nombramiento en 2018 de la asistenta de Begoña Gómez, ambas imputadas. No obstante, no fue capaz de recordar su contratación. En ese momento, Bolaños era secretario general de Presidencia. Se ha escudado en que en esas fechas, cuando se produjo el cambio de Gobierno, hubo que renovar numerosos puestos en el Ejecutivo y en Moncloa.

El juez Juan Carlos Peinado regresó este miércoles al complejo presidencial para interrogar como testigo a Bolaños. Ya estuvo en verano para hacer lo propio con Pedro Sánchez. Esta nueva diligencia tiene que ver con un presunto delito de malversación de fondos al emplear a una funcionaria para fines particulares. El escrito de Raúl Díaz Silva en el que certificaba las funciones de Cristina Álvarez formaba parte de una batería de documentación que mandó Moncloa al Juzgado a petición del magistrado.

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Juan Carlos Peinado ya interrogó al vicesecretario general de Presidencia porque en esa documentación que recibió aparecía su nombre en la firma de la propuesta de nombramiento de la asesora de Begoña Gómez. Aquel cargo explicó que se limitó a elevar la propuesta y al preguntarle quién era su superior en 2018, citó a Bolaños. Las fuentes consultadas afirman que, este miércoles, el juez le hizo escuchar al ministro esta declaración de su exnúmero dos, llamado Alfredo González Gómez.

Por eso, el ministro declaró este miércoles durante dos horas y 20 minutos. Contestó a todas las preguntas, dijo que no conocía a la asesora antes de que la ficharan y que nunca fue su responsable ni su jefe. El ministro de Justicia también defendió que la figura de asistente de la mujer de los presidentes del Gobierno ha existido siempre porque asisten a actos, realizan actividades públicas y todo eso tiene que tener cierto control. Añadió que la diferencia entre Begoña Gómez y el resto de mujeres de presidentes del gobierno es que ella solo ha tenido un asistente y el resto han tenido más de uno.

Cristina Álvarez explicó en diciembre durante 49 minutos en el juzgado las funciones que realizaba para la mujer del presidente del Gobierno. Entre otras labores, explicó el correo electrónico que le mandó a Reale, una de las empresas patrocinadoras de la cátedra universitaria de la esposa de Pedro Sánchez, en el que pedía más financiación. “Yo estaba escribiendo y no me costaba un segundo. Dijo ‘oye, pues aprovecha y diles si van a seguir en la cátedra’, es un segundo”, narró Cristina Álvarez, quien restó relevancia a una gestión que forma parte de la causa que investiga un presunto delito de malversación de fondos públicos.