Feijóo aprieta a Vox: lleva al Congreso la defensa del español en EEUU tras borrarlo Trump de la web de la Casa Blanca
El PP trata de amplificar el desgaste de Abascal por su alianza con Trump y registra una proposición no de ley contra la decisión del gobierno americano de eliminar el español en sus comunicaciones oficiales, "una amenaza para nuestra lengua"
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Ff04%2F807%2Fb63%2Ff04807b634606f696e1ad7daf54c988d.jpg)
El PP ha fijado una posición clara respecto a Donald Trump. La descarga arancelaria del presidente de Estados Unidos ha reconfigurado también los equilibrios en la política nacional para hacer frente a una guerra comercial que amenaza con deteriorar el tejido productivo nacional. Feijóo se alinea con Sánchez —y, a su vez, con las instrucciones de la Comisión Europea— mientras exprime la soledad de Vox, al que ven "atrapado" por su alianza con el presidente norteamericano. Como publicó El Confidencial, Génova ha detectado un desgaste del partido ultraconservador en las últimas semanas, y están decididos a amplificar esa debilidad.
La ofensiva contra Vox no se quedará sólo en la batalla dialéctica por la inminente guerra comercial. Abascal evita confrontar con Trump, pero sus políticas resquebrajan el discurso "patriótico" al que Vox ha vinculado todos sus éxitos electorales. Y el PP lo sabe. Con ese objetivo, el primer partido de la oposición ha registrado una iniciativa en el Congreso para defender la presencia del español en Estados Unidos tras la decisión de Trump de eliminar su uso en las comunicaciones oficiales de la Casa Blanca, algo que ha rechazado de manera frontal la Asociación de Academias de la Lengua Española y el director del Instituto Cervantes.
A principios de marzo, Donald Trump firmó un decreto que declara el inglés como única lengua oficial de Estados Unidos, revocando una orden previa de Bill Clinton que permitía el acceso a los servicios públicos a ciudadanos con un dominio limitado del inglés. Trump ya eliminó la versión en español de la página web de la Casa Blanca durante su primer mandato (2017-2021). Biden la restableció, pero el líder republicano volvió a suprimirla nada más regresar al gobierno, en enero de este año. En EEUU hay alrededor de 60 millones de hispanohablantes, y es la segunda lengua más hablada del país.
El PP se opone de forma taxativa al borrado del español ejecutado por la nueva Administración, y recuerda en su proposición no de ley que nuestro idioma "tiene una presencia sólida" en el país norteamericano. Inciden, además, en que la decisión "representa un retroceso en el reconocimiento de la comunidad hispanohablante y una amenaza para la proyección y el desarrollo de nuestra lengua en el país".
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fac2%2F327%2F5bc%2Fac23275bcf918eeea39edb7792a2ac9b.jpg)
Los de Feijóo dirigen de forma explícita la presión al Gobierno por "permanecer callado mientras el español desaparece de la Casa Blanca", e instan al Ejecutivo a apoyar, en primer lugar, el manifiesto de condena suscrito por las Academias y dirigirse al gobierno de Estados Unidos para exigir su recuperación en las herramientas de comunicación. Exigen, además, impulsar una "programación específica" en el país americano y blindar su presencia, así como presentar en el Congreso "en un plazo de seis meses" un informe sobre la situación de nuestra lengua en Estados Unidos y las actividades que se vayan a implementar desde el Estado.
"Los hispanohablantes no pueden ser invisibles. Lo que está en juego no es sólo la lengua. Es una comunidad, una cultura y una influencia estratégica que España no puede permitirse perder", justifican fuentes del PP. Más allá de lanzarse contra el Gobierno, el objetivo velado de esta iniciativa que se votará y debatirá en el pleno es situar a Vox entre la espada y la pared de justificar las decisiones de su aliado internacional y defender la presencia del español en Estados Unidos. "Mientras algunos se arrodillan ante Trump, el PP defiende una diplomacia firme, seria y útil", deslizan en el partido.
:format(jpg)/f.elconfidencial.com%2Foriginal%2Fb12%2Fe6b%2Ff93%2Fb12e6bf9382272462dfe109df2c1641a.jpg)
Los de Abascal tampoco se han pronunciado sobre esta cuestión, y en el PP le recuerdan que "la defensa del español no puede depender del color político de quien ocupe la Casa Blanca. No es ideología, sino política de Estado", zanjan. Los populares apuestan también por "potenciar" el papel del Instituto Cervantes en Washington, así como redoblar "la acción cultural exterior" del Ejecutivo, que consideran "inexistente".
El PP quiere profundizar en la crisis discursiva que observan en el partido situado a su derecha, y que corta e raíz la tendencia al alza que habían registrado en los últimos meses. El pasado jueves, Feijóo ya lanzó a Abascal una advertencia directa en plena tormenta arancelaria, y recordó que "nadie que se considere patriota puede respaldar a Trump" tras su decisión de gravar con un 20% a las importaciones de la Unión Europea. El líder de Vox insiste en que su partido no defiende los aranceles, pero culpa de ellos a todos menos al presidente norteamericano, incluido al propio Feijóo por sus alianzas con los socialdemócratas en la Comisión Europea.
Al margen de los sondeos que manejan en el 13 de Génova, distintas empresas demoscópicas privadas han reflejado ese retroceso de Vox desde la eclosión del conflicto abierto con Trump. El último barómetro del CIS también reflejó que el 43,5% de los electores de Santiago Abascal creen que el nuevo mandato del líder republicano tendrá efectos negativos para España y la UE. En esa batalla ha entrado también la Fundación FAES, que preside el expresidente José María Aznar, y que censura que Vox "aplauda con ganas" el "tarifazo" emprendido por EEUU. "Se entiende mal lo de un españolismo contrario a los intereses de los españoles", señalan en un comunicado.
El PP ha fijado una posición clara respecto a Donald Trump. La descarga arancelaria del presidente de Estados Unidos ha reconfigurado también los equilibrios en la política nacional para hacer frente a una guerra comercial que amenaza con deteriorar el tejido productivo nacional. Feijóo se alinea con Sánchez —y, a su vez, con las instrucciones de la Comisión Europea— mientras exprime la soledad de Vox, al que ven "atrapado" por su alianza con el presidente norteamericano. Como publicó El Confidencial, Génova ha detectado un desgaste del partido ultraconservador en las últimas semanas, y están decididos a amplificar esa debilidad.