Es noticia
El 'boom' del latino cualificado: así son los trabajadores que se rifan en Barcelona
  1. España
PERFILES DIFÍCILES DE HALLAR

El 'boom' del latino cualificado: así son los trabajadores que se rifan en Barcelona

Desde consultoras hasta compañías de 'software', las empresas de la Ciudad Condal han empezado a fijarse en Latinoamérica para cubrir los puestos que no pueden ocupar con trabajadores locales

Foto: Lautaro Nieva, profesional altamente cualificado. (Clara Fagalde)
Lautaro Nieva, profesional altamente cualificado. (Clara Fagalde)

Lautaro Nieva (34) estaba de vacaciones en marzo de 2024 cuando recibió un mensaje por Linkedin con una propuesta laboral. Dudó entre responder o esperar a su regreso. Pero no soportó la ansiedad. Cuatro meses más tarde, después de un proceso de entrevistas, dejó su Argentina natal para radicarse en Barcelona.

La empresa que lo contrató, Schneider Electric, llevaba meses sin encontrar un perfil como consultor SAP en Europa. La búsqueda, con características muy específicas, se alargó hasta que decidieron ampliarla a mercados emergentes. La historia de Lautaro es una de la de tantos latinos que llegaron en los últimos años a la capital catalana con la visa de profesional altamente cualificado.

En 2024, más de la mitad de los inmigrantes empadronados de Barcelona nacieron en América del Sur o América Central. Hay más argentinos (46.542), colombianos (42.535), peruanos (38.821) y venezolanos (33.017) que pakistaníes (28.778) o marroquíes (23.347). El cambio demográfico de los últimos años tiene múltiples factores. Muchos llegan con doble nacionalidad, pero hay otros, como Lautaro, que lo hacen exclusivamente para cubrir vacantes que el mercado laboral europeo no consigue. Por eso, las empresas asumen el costo del permiso de contratación.

Kevin Olaya (27) quería emigrar de Perú, preocupado principalmente por la inseguridad de su país. En Lima, como técnico mecánico, trabajaba en una empresa chilena en la elaboración de planos de tuberías para la industria petrolera. Había empezado a enviar currículums a diferentes empresas del mundo sin demasiado éxito al no contar con papeles. Hasta que fue contratado en julio de 2024 como profesional altamente cualificado en una consultora que desarrolla tareas para una empresa farmacéutica en Martorelles.

"Destacan tecnología, consultoría informática, ingeniería, desarrollo de software..."

“Me he dado cuenta desde que estoy aquí que es un perfil muy requerido en Europa, especialmente en tuberías, porque no muchos se encargan de este trabajo. Usualmente, quienes lo estudian salen como ingenieros juniors o ingenieros de diseño, pero no tienen experiencia en el desarrollo de los planos para fabricar tuberías y yo llevo 8 años”, explica Olaya que comenzó a trabajar desde muy joven.

Las empresas suelen tercerizar el proceso de contratación. Además de agencias de reclutamiento que buscan candidatos en todo el mundo, hay despachos de abogados especialistas en extranjería, consultoras que tramitan los permisos para luego vincular al talento con el cliente final y empresas de reubicación cuando el empleado llega a la nueva ciudad.

“En nuestro caso, podríamos decir que alrededor de un 70% de las autorizaciones profesionales altamente cualificados que tramitamos son para personas de Latinoamérica”, explica María Eugenia Blasco, socia del área de Inmigración y Movilidad Internacional de AGM Abogados, y añade: “Los más destacados son los sectores relacionados con la tecnología, la consultoría informática, la ingeniería, desarrollo de software, ciberseguridad. También el sector audiovisual ha aumentado con la creación de autorizaciones de residencia específicas para ese sector”.

Su número se multiplica en 10 años

En 2014, el primer año desde que se aprobó la ley de profesionales altamente cualificados, 745 ciudadanos latinos llegaron a España con la visa. En 2023, el último año que registra el Observatorio Permanente de la Inmigración, fueron 12.984. Si bien no están categorizadas por ciudad de residencia, los diferentes despachos consultados identifican a la capital catalana como uno de los destinos predilectos.

“En nuestra experiencia en la tramitación de autorizaciones de residencia para profesionales altamente cualificados (PAC) y de visados para inversores, hemos constatado un incremento en las solicitudes en el último año. El número de solicitudes de inversiones realizadas en Madrid sigue superando a Barcelona, pero Barcelona ofrece amplias oportunidades laborales en sectores estratégicos como la tecnología. Por eso muchos trasladan su residencia ahí como profesionales cualificados”, explica Patricia Ruiz, manager en el área de movilidad internacional de Ceca Magán Abogados.

Tienen que presentar una oferta con un salario de al menos 40.000 euros brutos al año

Lucas Arenas (38), que tenía más de 15 años de experiencia en el desarrollo de software en Argentina, fue contratado por InnoIT Consulting en 2024 y pudo elegir entre las dos. “Me dijeron: ‘tenés Barcelona o Madrid’. Yo no conocía ninguna, pero siempre tuve el sueño de vivir en un lugar cerca de la playa. Tuve la suerte de conseguir un piso que está a siete cuadras. Voy a caminar, a tomar mate. Me encanta porque puedo hacerlo en cualquier momento”.

Con pasado en Globant y Mercado Libre, dos unicornios argentinos, no tenía pensado emigrar hasta que lo contactaron. “Yo quería probar suerte en otro país dentro de dos o tres años. No tenía claro dónde y justo me cayó la propuesta. Me simplificaron el proceso de ir a otro país, estar de forma legal y no estar lidiando con temas burocráticos”.

Para que les aprueben la visa, los profesionales altamente cualificados deben presentar una oferta de trabajo con un salario mínimo de 40.000 euros brutos anuales, con algunas excepciones en los menores de 30 años. Si bien esto les permite vivir con soltura, los motivos de la mudanza no son exclusivamente económicos. “Vivir la experiencia”, “un mejor estilo de vida” o un “crecimiento profesional” son algunas de las respuestas más escuchadas.

El fenómeno de una inmigración más formada está reduciendo una histórica brecha salarial en Barcelona. En 2014, el primer año que se implementó la visa de profesionales altamente cualificados, el salario medio de los hombres españoles empadronados en Barcelona era 17.000 euros más alto que el de los inmigrantes. En 2023, se redujo a 12.000. Entre las mujeres, la diferencia pasó de 8.000 a 5.000. Los latinos altamente cualificados tienen su impacto.

“Se valora que hablen en español y también hay empresas con sede en Latinoamérica que los envían. En muchos casos, las empresas que contratan son de consultoría, que luego derivan a un cliente final. La mayoría son perfiles técnicos tecnológicos”, explica Blasco, de AGM Abogados.

Varones, tecnológicos, resilientes

Lo más frecuente es que los profesionales sean hombres. La brecha de género en disciplinas STEM (Ciencias, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) continúa en Latinoamérica, donde la participación femenina en áreas relacionadas la tecnología no superan el 30% en los diferentes países, según un reporte de Chicas en Tecnología (2024).

"El latino está centrado en progresar, lo que hace que seamos competitivos"

Víctor Sotillo (36) llegó hace menos de tres meses de Venezuela. En su caso, con 12 años de experiencia como ingeniero en el sector de gas y petróleo, dice que el sueldo neto es menor que el que percibía en la empresa rusa para la que trabajaba en su país. Sin embargo, ante la situación política, buscó un cambio.

"A veces no se gana, pero estoy en un país que me abrió las puertas del mundo. Tengo mayor proyección estando acá. Cuando vienes a un país como este te preguntas, ¿por qué no lo hice antes?"

Llegó con su pareja y todavía se mueve por la ciudad con Google Maps, pero no tardó en adaptarse. “Me sorprendió la empatía de las personas, el respeto, la educación. Vas en el bus y ves gente leyendo. Es un país que trata de educarse y nutrirse. Evidentemente, tiene complejidades como cualquiera, pero son más las cosas positivas que he vivido”.

placeholder Víctor Sotillo frente a la Sagrada Familia. (Foto cedida)
Víctor Sotillo frente a la Sagrada Familia. (Foto cedida)

Además de su trayectoria y la formación como ingeniero eléctrico, cree que en su candidatura valoraron la experiencia gerencial. Lideró la gestión de proyectos con inversiones de cuatro millones de dólares y actualmente está realizando un máster de Project Manager Professional. Para Víctor, hay una explicación a la alta demanda de profesionales de su región:

"En general, el latino está enfocado en la resiliencia, en progresar. Venimos de ambientes complicados. Esto hace que seas competitivo. Poblaciones donde el problema es ‘se me acabó el agua y no quiero salir a comprar una’ no se compara con venir de un país donde te cortan el agua cinco meses. Esto te hace sobrellevar los problemas".

La edad habitual entre los perfiles altamente cualificados es entre los 30 y 40 años. Llegan solos o en parejas no formales, pero generalmente sin hijos. En su contrato, las empresas suelen aplicar una cláusula de rescisión para garantizar un tiempo mínimo de trabajo que justifique los gastos en la gestión de la visa. A los dos años de haber llegado, si mantienen el vínculo laboral, pueden solicitar la residencia permanente.

"En 10 años será el momento de dejar Barcelona"

Víctor, al igual que la mayoría, no tiene planes de regreso, pero algunos reconocen que en unos años no lo verían con malos ojos. Tomás Sañudo (35) ya lleva cuatro años desde que llegó como profesional altamente cualificado desde Argentina.

“Creo que en un par de años llegará el momento de dejar Barcelona. Volver siempre está sobre la mesa, pero no lo sé. Si mejora el país, puede ser”. En 2021, la empresa de marketing digital para la que trabajaba en Argentina decidió trasladarlo a Barcelona. La selección no fue porque tuviera un perfil demasiado específico, sino porque llevaba 8 años en la empresa y lo necesitaban en la oficina central. El cambio no le requirió demasiada adaptación.

"Yo ya venía trabajando con parte del equipo, pero lo que sí me gustó mucho es que al ser una empresa global tenía a cargo un equipo de 15 o 20 personas de más de 10 nacionalidades. Italianos, rusos, latinos. Había gente de Bielorrusia, Macedonia, de países que nunca conociste. Esa internacionalización en Argentina no la tenés".

Sañudo hizo un Máster, tiene la residencia permanente y ahora es el responsable de monetización de los sitios del grupo Adevinta. Si bien logró un cambio de trabajo que significó un importante crecimiento, considera que el mercado laboral en Barcelona no es sencillo:

"Veo una dificultad de conseguir e ir creciendo en trabajos nuevos. Creo que acá es más de encontrar uno, hacer carrera y quedarte ahí, que eso a veces te achata un poco. Es difícil conseguir que te pague bien, que te guste, que te divierta y tengas posibilidades. Mucha gente que conozco le cuesta llegar a las entrevistas porque hay puestos con más de mil aplicaciones en 24 horas. Hay mucha publicación y no responden".

Una vida diferente

Barcelona le permitió un nuevo estilo de vida, del que valora especialmente el work-life balance. El modelo híbrido, el trabajo hasta las tres de la tarde de los viernes y el horario de verano son partes de su rutina, pero reconoce que a veces extraña el caos. Como una manera de seguir vinculado a su país de origen, reconoce que la mayoría de sus amigos son argentinos:

"Es una ciudad internacional, pero los argentinos terminamos con los argentinos"

"Esta ciudad es el paso seguro. Si emigras de Argentina siempre hay un conocido o un amigo de un amigo. Es muy loco porque en una ciudad tan internacional terminan los argentinos con argentinos, los chilenos con los chilenos, y así… Al final del día, la nacionalidad termina tirando. Al menos en mi caso.

En el caso de Leonardo Sly (38), que también es argentino, la situación es diferente. “Me encanta Argentina, pero estoy en otro país y quiero aprender de la cultura de acá”, dice. Tiene más amigos catalanes que argentinos y ahora que se mudó a Castellar del Vallès piensa quedarse en Cataluña por muchos años.

Antes de Barcelona, había estado en Málaga con una visa no lucrativa, que funcionaba como una residencia temporal, pero no le permitía trabajar. Con más de quince años como Scrum Master en diferentes empresas y una experiencia en Dubái, a principios de 2023 le surgió una oportunidad laboral como profesional altamente cualificado y recibió la visa a los cinco días.

Leonardo Sly vive en Castellar del Vallès. (Foto cedida)

“Barcelona fue de casualidad. A mi mujer le gustaba la cultura andaluza, pero en Málaga había muchos nórdicos. Empezamos a buscar en Valencia, Madrid, Alicante y cuando surgió la oferta pensamos que no estaba mal vivir cerca de una ciudad grande”.

En busca de una naturaleza o escapando de los altos precios de alquileres, los municipios cercanos a Barcelona son una opción viable para muchos de los profesionales altamente cualificados. La posibilidad del trabajo remoto también ayuda a descongestionar la ciudad.

Álvaro Agudelo (32) es colombiano, pero aclara rápidamente “ahora también español” porque hace unos días recibió el pasaporte. Trabaja en Barcelona desde hace dos años y 9 meses como desarrollador Java de aplicaciones.

El mercado laboral necesita cubrir puestos y hay latinos listos para emigrar

“El deseo de vivir en España era por un crecimiento profesional. El primer factor era que quería una mejor calidad de vida. En Colombia no se vive mal, pero cuando vi cómo vivía una hermana en Estados Unidos y la otra en España, empecé a buscar una forma de salir de manera legal”, dice.

En Barcelona, 1 de cada 4 personas empadronadas es extranjera. Mientras el mercado laboral requiere cubrir puestos específicos, del otro lado del Atlántico, hay latinos preparados para emigrar.

Lautaro Nieva (34) estaba de vacaciones en marzo de 2024 cuando recibió un mensaje por Linkedin con una propuesta laboral. Dudó entre responder o esperar a su regreso. Pero no soportó la ansiedad. Cuatro meses más tarde, después de un proceso de entrevistas, dejó su Argentina natal para radicarse en Barcelona.

Empleo Trabajo Barcelona
El redactor recomienda