Detenido en Francia el asesino de los tres agricultores de Navarra y Cataluña, un yihadista fugado de España

Las autoridades francesas han detenido a un marroquí nacionalizado español que está acusado de matar a tres agricultores en España entre 2023 y 2024. Según informan a El Confidencial fuentes de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil se trata de Allal El Mourabit un yihadista que fue detenido en 2016 en España y que se fugó tras ser condenado antes de cumplir su pena al quitarse la pulsera telemática con la que le controlaba el sistema penitenciario.

La investigación corría a cargo de un equipo conjunto formado por la Guardia Civil, los Mossos d’Esquadra y la Policía Nacional. El primer asesinato del que se le acusa se ubica en noviembre de 2023, ocurrido en Tudela (Navarra). Semanas después, presuntamente perpetró otro asesinato en Ribaforada (Navarra). El tercero y hasta ahora último conocido fue en enero en Vilanova de la Barca (Lleida). Todas sus víctimas eran personas de avanzada edad.

Antes de su fuga, El Mourabit llevaba años entrando y saliendo de prisión por delitos relacionados con el yihadismo. Residía en Vitoria en situación de libertad vigilada con una pulsera de control telemático. Pero ese dispositivo de control dejó de dar señal el 27 de septiembre de 2023 y se perdió el rastro de este condenado por terrorismo. Su familia acudió a una comisaría de Policía para denunciar su desaparición y pedir que lo busquen. Las fuerzas y cuerpos de seguridad activaron la alerta.

Según ha avanzado este miércoles El País, Al Mourabit ha sido arrestado en Béziers. Sus allegados encontraban raro el modo en que se marchó, porque dejó la documentación en casa. “Su actitud, últimamente, era normal”, añaden. El Confidencial tuvo acceso a la denuncia presentada por su hermano. Lo hizo en una comisaría de Vitoria bajo la advertencia de que tenía obligación legal de decir la verdad. Este familiar fijó la hora de la desaparición a entre las 20:20 y las 21:30 del 27 de septiembre en el parque Salburua de la capital vasca.

TE PUEDE INTERESAR

La familia de un yihadista que se quitó la pulsera telemática denuncia su desaparición a la Policía

Alejandro Requeijo

El condenado por yihadismo tiene 55 años, mide 1,90 de altura, pesa unos 80 kilos y presenta un aspecto físico delgado y encorvado, con un pelo entre moreno y canoso. Desde el año 2022, vivía en casa de su hermana, quien también se personó en la comisaría. Afirmaban desconocer los motivos por los que su hermano no había regresado.

Fue la Policía, de hecho, la que el 27 de septiembre de 2023 se puso en contacto con los familiares para preguntarles por el condenado. A las autoridades les había saltado la alerta de que se había desprendido de su pulsera telemática. Un rato antes, se despidió al salir de casa diciendo que se iba a dar un paseo. En el domicilio, quedaron su teléfono móvil, su documentación y las tarjetas bancarias. Este condenado por terrorismo tiene un hijo con el que al menos en ese momento mantenía contacto habitual y que vive en Marruecos junto a su madre, de la que se divorció hace años. Pese a sus problemas con la Justicia, era la primera vez que desaparecía, según la versión de sus hermanos que consta en la denuncia.

No les constaba que hubiese expresado su intención de cambiar de estilo de vida. Tampoco se medicaba ni tenía problemas mentales. Uno de los hermanos sí dijo a la policía que en los últimos tiempos decía sentirse agobiado. Tampoco tenía coche, ni moto. Solía hacer casi todo en casa, incluso el rezo, apenas salía y si lo hacía a la media hora estaba de vuelta. A sus familiares les parecía extraño que no se hubiese llevado ni el teléfono, porque era muy activo en las redes sociales. De hecho, esa actividad le costó en el pasado una condena por enaltecimiento del terrorismo. Con esa forma de vida, no constaban tampoco amigos o conocidos suyos en Vitoria.

Sus causas judiciales

Llevaba tiempo sin trabajo después de 30 años en España. Fue arrestado por primera vez tras el atentado yihadista de Niza en 2016, cuando un tunecino residente en Francia mató a 86 personas al volante de un camión. El Mourabit, afincado entonces en Pamplona, también conducía camiones y acostumbraba a difundir propaganda yihadista en sus perfiles de redes sociales. Llegó a viajar a Turquía con la intención de entrar en Siria. Cuando fue juzgado en 2018, su actitud en el juicio mereció titulares como “El yihadista que troleó a la Audiencia Nacional”. Les recordó a los jueces los audios de la entonces ministra de Justicia, Dolores Delgado, y el comisario Villarejo en los que ella decía que magistrados de la Audiencia Nacional mantuvieron relaciones con menores en un viaje a Colombia.